ENTREVISTAS
Alerta el inversionista Michael Burry: Medidas contra el coronavirus «están matando la economía del mundo»
Por Diego Morales //
El remedio no puede ser peor que la enfermedad, por ello, el médico e inversionista Michael Burry lanzó una crítica a las políticas de aislamiento que se están llevando a cabo en el mundo para combatir el COVID-19, sobre todo en Estados Unidos, donde asegura que de seguir así, el daño a la población por los efectos negativos en el empleo y la economía podrían agravarse y poner en riesgo.
En mensajes publicado en su cuenta de Twitter (@michaeljburry), el médico hace críticas a la reclusión social que se está teniendo en el mundo, pues los impactos en las vidas hogareñas de la población están siendo mayores, debido al desempleo, el cierre de negocios e incluso en algunos casos en el incremento de violencia intrafamiliar.
A la vez, Burry propone que las pruebas para el COVID-19 se hagan de manera universal, para mostrar que la tasa de fatalidad es baja, por lo cual las personas más vulnerables deben permanecer resguardadas mientras que el resto, que es la gran mayoría, puede seguir una vida relativamente normal, siguiendo los cuidados de higiene y distancia.
“Si las pruebas COVID-19 fueran universales, la tasa de mortalidad sería inferior al 0.2 por ciento. Esto no es una justificación para políticas gubernamentales radicales que carecen de todos los matices, que destruyen las vidas, los empleos, y los negocios del otro 99.8 por ciento”, escribió en su red social.
También, Michael Burry hizo un llamado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a preservar los intereses de la clase trabajadora y las pequeñas empresas, con la dureza de que no se puede colapsar la economía para salvar al 0.2 por ciento de la población.
“La política del COVID-19 no puede ser dictada por políticos con cédula de médicos que solo ven por sí mismos, demasiado martillo, clavo, y muy poco sentido común. El Presidente debe reflejar los intereses de la clase trabajadora y las pequeñas empresas, la economía no se puede colapsar un 30 por ciento para salvar el 0.2 por ciento. Liberen a Estados Unidos”.
Con algunos enlaces a información científica, precisó que el COVID-19 no debe generar una histeria colectiva. “El coronavirus es un virus similar al resfriado común, que no crea inmunidad duradera. Los coronavirus son por lo tanto endémicos en humanos, quizás ese sea el futuro del COVID-19, debemos aprender a vivir son sensatez, sin histeria colectiva”.
Añadió en otro tweet: “La tasa de letalidad del COVID-19 en Alemania es de 0.4 – 0.6 por ciento, con las pruebas universales sería aun más baja, alto a la histeria colectiva, cancelemos la reacción exagerada del gobierno, necesitamos entender los hechos, no a la exageración, no a la histeria de los medios”.
Con la aclaración de que no rechaza la precaución para atender al virus y resaltando el trabajo que han hecho los trabajadores de la salud, Michael Burry insistió en su punto de que las medidas de restricción están generando más daño a los estadounidenses que el propio COVID-19.
“Los americanos no debemos aceptar esto. Las restricciones gubernamentales están causando más daños a las vidas de los estadounidenses que las que el COVID-19 podría haber hecho por sí solo”.
Agregó en otro posteo: “Es excesivo, pongamos las horribles solicitudes de ayuda por desempleo en perspectiva. Este no es causa del virus, esto es causa de la respuesta al virus que está matando la economía de USA y del mundo. Con toda la tragedia humana que lo acompaña, vea las solicitudes de ayuda de desempleo de Estados Unidos a lo largo de las décadas”.
También, como médico de profesión, fue crítico en algunas acciones que ha tomado la Organización Mundial de la Salud como la suspensión de vacunas contra la polio, afirmando que el COVID-19 es una enfermedad que afecta a ciertos sectores de la población.
“La OMS suspende las vacunas contra la polio, a pesar de que es endémica en numerosos países. Esto a pesar de que el COVID-19 es una enfermedad de los obesos, enfermos, diabéticos, tabaquismo, ancianos. COVID-19 no está causando problemas en niños sanos, la polio sí”.
Así, para cerrar con su visión crítica del manejo de la crisis ocasionada por el COVID-19 en Estados Unidos, Michael Burry refirió que el aislamiento no es bueno para nadie, y que incluso el trabajo en casa no es una opción viable para reactivar la economía, pues sectores de la población no tienen acceso a esta condición.
“El cierre no es bueno para nadie. Solo el 30 por ciento de los blancos y asiáticos pueden trabajar desde casa, pero es mucho peor para los negros y latinos. El trabajo duramente ganado y las ganancias salariales se están evaporando más rápidamente para lo que ya no tienen privilegios, a qué costo la prevención”.
En la búsqueda de posturas que fortalezcan su visión, Michael Burry retuiteó textos de Steve Hilton, asesor y comentarista político británico que presenta The Next Revolution, un programa semanal para Fox News, en donde pide no convertir una crisis de salud pública en la peor catástrofe de Estados Unidos, haciendo el llamado a salvar a las pequeñas empresas, aplanar la curva del virus pero no de la economía.
“Pueden los idiotas de la televisión dejar de decir todo lo que se te pide que hagas es quedarte en casa, a costa de perder el negocio que tu familia construyó durante generaciones, el trabajo que mantiene un techo sobre tu cabeza, el ingreso que alimenta a tu familia, no es un pequeño sacrificio”, precisó Hilton.
¿QUIÉN ES MICHAEL BURRY?
Es un médico, ex neurólogo y gestor de fondos de cobertura americano. Fundador del Fondo Scion Capital LCC, que operó desde el año 2000 hasta el 2008. Burry fue uno de los primeros inversores en reconocer la crisis de hipotecas subprime e invertir mediante seguros de impago, convirtiéndolo en un genio para leer los datos al anticipar la crisis inmobiliaria que casi manda a la quiebra al sistema financiero de Estados Unidos.
Su vida y obra se ha visto reflejada en la cultura popular en el libro “The Big Short”, del escritor Michael Lewis, para dar paso a la pantalla grande en la película “La Gran Estafa”, interpretado por el actor Christian Bale.
