OPINIÓN
Qué tino tiene Enrique Alfaro Ramírez
Tercera Instancia, por Modesto Barros González //
Una vez más el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez (EAR), demuestra un tino fenomenal para provocar malestar entre la población que gobierna, ahora sin querer reconocer y mucho menos tomar en cuenta las inconformidades defiende a capa y espada el incremento al transporte urbano de pasajeros y busca escudarse que lo autorizó la anterior administración gubernamental.
Como un acto autoritario se decidió que el pasaje urbano se incrementara más del 35% aunque por la falta de monedas de 50 centavos y no tener para dar el cambio se eleva al 42%. Primero dieron el golpe de incremento y ahora para sobar el golpe iniciaron la “campaña de socialización” publicitado en los medios por el Sistema del Tren Eléctrico Urbano, y escudándose que todo está más caro y deben dar un buen servicio.
El actual gobierno que encabeza EAR, “ni suda y ni se acongoja” al sumarse al elevado costo del pasaje en los servicios que presta y que son propiedad del gobierno del estado de Jalisco, como son el Tren Eléctrico Urbano, el Sitren y el Trolebús, pero en forma extraña defiende el aumento en el Macrobus que hasta donde se tiene conocimiento es propiedad de los concesionaros de la Alianza de Camioneros de Jalisco y no del gobierno local, aunque pudiera ser socio pero minoritario, así que no le compete entrar de frente a la defensa del costoso incremento.
Este último domingo por la avenida Manuel Acuña, frente a Casa Jalisco, se colocaron desde temprana hora vayas metálicas para repeler las manifestaciones contra el aumento de la tarifa, pero las autoridades una vez más hacen “oídos sordos” y se niegan por lo menos a escuchar, pero eso si han ordenado la intervención de la fuerza pública como lo hizo en la estación de Plaza Universidad de la línea “2” del Tren Eléctrico.
El gobernador Enrique Alfaro Ramírez, tiene “puntería de apache” y no equivoca acciones que le ponen en contra a la población, como la tan criticada concesión de maquinaria agrícola y sus constantes ausencias cuando se le requiere estar al pendiente de su trabajo como responsable del Poder Ejecutivo del Estado de Jalisco.
En uno días cumplirá ocho meses de mandato y la aceptación ante la población es cada vez mayor, aunque sus flamantes funcionarios posiblemente lo tienen engañado, total él será el único que pierda nuevos logros políticos, si es que tratará de buscarlos.
SIGUE DE CANDIL DE LA CALLE Y OBSCURIDAD DE SU CASA
El Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, continúa con su política de destinar cientos de millones de pesos a otros países que ni le obliga y dejar sin apoyos a diferentes dependencias de nuestro país.
Con “bombo y platillos” anunció que entregará 90 millones de dólares a países sudamericanos y por otro lado quiere desaparecer el Coneval, dejar sin trabajo a miles de personas del sector salud y de otras dependencias.
Según su publicidad la subasta que ordenó de joyas que fueron confiscadas a la delincuencia organizada dejará alrededor de 30 millones de pesos, mismos que serán destinados para carreteras en el estado de Michoacán, en lugar de destinarlo al sector salud que tanto
lo requiere como los Hospitales Civiles de Guadalajara.
En su afán protagónico y autoritarismo AMLO, sigue peleando con medios de comunicación y advierte a todos quienes llegan a criticarlo que están vendidos o rentados con los anteriores gobierno o son de los que denomina fifís así que quienes no están con él, están en su contra, según ha sentenciado en repetidas ocasiones.
Interviene, se queja y hasta patalea, por decirlo de alguna manera, por lo que no le conviene o no está de acuerdo, pero en casos que hacen militantes de su partido se declara muy “respetuoso e imparcial”, como es el caso de la aberrante acción de diputados del Estado de Baja California”, que en la clandestinidad, escondidos en un recinto ajeno al suyo decidieron aumentar tres años la administración del gobernador que fue electo, con todo y que los votantes lo hicieron por dos años como estaba decidido en los ordenamientos electorales.
Si el primer mandatario no quiere intervenir es una demostración que está muy de acuerdo con la arbitrariedad que se pretende implementar en el norteño estado. El caso es que a “gritos y sombrerazos” sigue gobernando quien busa la cuarta transformación.
