OPINIÓN
Pandemia politizada
																								
												
												
											Luchas Sociales, por Mónica Ortiz //
Lo peor de la pandemia por Covid-19 ha llegado a México, no podemos negarlo las cifras son extremadamente desalentadoras, la sociedad está dividida entre los que creen en el Covid-19, los que se consideran escépticos a su peligroso contagio y aquellos que la necesidad les hace creer que son lo suficientemente fuertes para salir buscando proveer a su familia.
No obstante, de tan grandes diferencias que surgen de las diversas formas para justipreciar esta pandemia de la idiosincrasia mexicana, tenemos otros factores que convierten este tiempo surrealista también en una época llena de incertidumbre, los gobiernos y la política preelectoral son otros factores negativos para superar este pico pandémico nacional de manera congruente.
Hoy los gobiernos son los responsables absolutos de este terrible pico pandémico en el país y de que no se salga de los límites establecidos por sus obligaciones gubernamentales y por aquellos estándares sociales que tocan la conciencia humana y los derechos humanos básicos universales; sin embargo, otra parte de la responsabilidad de este momento inclemente y de que no sea una aterradora tragedia de muerte y contagio es sin lugar a dudas la ciudadanía y pensándolo bien ninguna de las partes está dentro de un parámetro lógico de auto cuidado, solidaridad y unión para enfrentar está cúspide de contagios masivos.
En este sentido, resulta importante delimitar desde ese individualismo social que actualmente divide los grandes pilares del país a quienes asumimos para afrontar el reto titánico de salud que desafiamos dignamente como nos ha sucedido en terribles tragedias nacionales en las que la población se une y funda empatía por los afectados; pero en estos instantes epidémicos nos resulta imposible incluso respetar las dinámicas básicas de medidas de emergencia, restricciones, paros de actividades, cuidados individuales y familiares, lo peor es que ni siquiera las primeras dos fases de aplicación de la vacuna respetamos, las cuales serían las únicas que deberían existir, las consecuentes ya son discriminación y ausencia de los principios de igualdad, no hemos logrado ser ese México unido y fuerte de otras historias nacionales, debido a que esto es ya una lucha de supervivencia humana y ni eso hemos logrado entender.
Por lo pronto nuestros gobiernos todos, el estatal en Jalisco, referente de Movimiento Ciudadano a cargo de Enrique Alfaro Ramírez y el federal del partido Morena con Andrés Manuel López Obrador, no han logrado estar a la altura de la pandemia, tuvieron casi 10 meses para prever y planificar un pico como el que actualmente estamos viviendo sin que pasara absolutamente nada (como los logros de gobierno de ambos).
Y eran los que habrían de generarnos las básicas y principales condiciones de salud trabajando los planes estratégicos para sobrellevar esta situación previsible desde el mes de marzo del 2020 consiguiendo evitar y disminuir los efectos de esta crisis por Covid-19, pero no esta etapa preelectoral los ha puesto a politizar el tema en general, lo usan para regalarse la culpa de las cifras, sembrándonos errores sociales y responsabilidades individuales, argumentando que son sus opositores los que mienten con respecto a los que realmente sucede en estos momentos de contingencia por Covid-19 estatal y nacional, aun siendo distintos perfiles políticos, ideologías incomparables y claramente opuestos, las excusas son las mismas son políticas y son electoreras.
Nos toca vivir estos próximos dos meses con responsabilidad individual y familiar, con solidaridad social y mucha empatía al personal médico de todo tipo, porque desgraciadamente una evaluación a nuestros gobiernos políticamente correcta, solo nos llevaría a determinar que son y serán simuladores de sus obligaciones, nuestro país tiene todas las décadas podridas en materia política gubernamental y no han cambiado ni cambiará son los efectos de una sociedad politizada que al llegar al poder simulan gobierno y administración, esto es ya un sálvese quien pueda.
