Connect with us

OPINIÓN

La Gestalt aplicada a la bioética: Los límites de la investigación científica

Publicado

el

Bioética, por Omar Becerra Partida //

El proceso de pensamiento de un individuo se conforma de dos procesos mentales, uno llamado conciencie y el otro el inconsciente.

Consciente, se relaciona con el conocimiento en el individuo de que siente, piensa y actúa, está asociado con el acto psíquico a través del cual un sujeto se percibe a sí mismo en el mundo y con el que la podemos definir como conciencia.

La conciencia está vinculada a la actividad mental que sólo es accesible para el propio individuo y al conocimiento reflexivo de las cosas.

La psicología menciona que la conciencia es un estado cognitivo no-abstracto que permite al ser humano interpretar e interactuar con los estímulos externos que forman la realidad.

El profesionista de la neurociencia, no puede acceder a la conciencia del paciente, pero entonces sí puede interpretarla a partir de lo que el paciente relata o evidencia.

Es importante establecer que, dentro de la psicología, el médico austríaco Sigmund Freud determinó tres sistemas que dan forma al aparato psíquico. En concreto, habló de consciente, inconsciente y preconsciente, que van estrechamente unidos entre sí.

Según la filosofía la conciencia es la facultad humana para decidir acciones y asumir la responsabilidad de las consecuencias según la concepción del bien y del mal.

Freud define al inconsciente de manera original. La observación de la vida normal de vigilia parecía validar esa concepción clásica del inconsciente. Pero el análisis de las formaciones psicopatológicas de la vida cotidiana y del sueño había hecho aparecer al inconsciente como una función de dos sistemas muy distintos.

En adelante, junto al consciente había que concebir dos tipos de inconsciente, ambos inconscientes en el sentido descriptivo, pero muy distintos en cuanto a su dinámica y al devenir de sus contenidos: los del inconsciente propiamente dicho no podían llegar nunca a la conciencia, mientras que los contenidos del otro, denominado por tal razón preconsciente, alcanzaban la conciencia en ciertas condiciones, sobre todo después de pasar el control de una forma de censura.

Para los científicos de la neurociencia, describen al inconsciente como la parte activa de la mente de la cual uno no está consciente, pero que puede manifestarse y entenderse por medio de la interpretación de los sueños y la conducta, del individuo

Esto es una ausencia total de lo que decimos y hacemos, como si el individuo estuviera dormido o en trance, en donde lo bueno y malo no puedes juzgarlo.

El ser humano en sí mismo es incompleto, la búsqueda del amor, de la felicidad y de la congruencia en la vida del mismo, son preguntas recurrentes en el proceso de vida, de cualquier ser humano, y más en el bioeticistas que solo puede comprender a través de la madurez y desgraciadamente la madurez solo se da con el dolor, no con el sufrimiento si no con el dolor.

El ser humano nace más dependiente de todos los seres vivos, tan es así que la primera palabra que dice un ser humano es Ma, según los especialistas, necesitamos amor, en todos los aspectos de la vida, y por ende el descubrirnos a nosotros mismos a través del proceso terapéutico sanando esas heridas de la infancia, podríamos hablar de un ser que toma conciencia de sí dispersando los miedos y haciéndolos nuestros aliados en vez de nuestros enemigos.

En este orden de ideas es vital para el Bioeticistas en proceso conocerse para poder aplicar la bioética a sus ámbitos externos.

Esto trae consigo que si tenemos un bioeticistas que ya está haciendo un proceso terapéutico o si ya lo realizó tendríamos un individuo pleno para la aplicación de la misma.

El bioeticistas necesita pasar por este proceso de madurez de reparación de identificación de un darse cuenta para poder resolver dilemas tanto éticos como bioéticos.

DE LA GESTALT A LA BIOÉTICA Y DE AHÍ AL BIODERECHO

A muchos nos gustan vivir en la fatalidad, quizá no de manera consciente si no inconsciente, mucho depende de cómo se define la felicidad, quizá muchos la dicten como algo inalcanzable, quizá, pero creemos que es la certeza de estar en paz.

Nosotros no discutimos quien tiene el conocimiento o como lo tenemos, pero sería interesante y por qué no negamos la posibilidad de la que la GestalT podría llegar al Bioderecho.

Pero ¿qué es el Bioderecho?, al Derecho lo definimos como el conjunto de normas que imponen derechos y obligaciones, que establecen las bases de convivencia social.

La Bioética ha cobrado autonomía académica, difusión social más no política, al abordar los problemas relacionados con el origen y final de la vida humana y las exigencias éticas derivadas de su protección. Su repercusión sobre el derecho plantea exigencias específicas, relacionadas con el embrión, con células madres, con el alquiler de vientres, etc.

Ha surgido así el Bioderecho, es el conjunto de normas jurídicas de interés público que se encuentran íntimamente ligadas a la protección de la vida desde su inicio y hasta su final respetando la dignidad humana.

Se ha confundido el término, ya que algunos autores afirman que el derecho se relaciona con el concepto de biología; quizá como ciencia sí se relacione, mas no en el ámbito gramatical, la Bioética es la parte troncal en la concepción natural del Bioderecho.

El objetivo que se busca es que el Bioderecho no se vea urgido por la política tradicionalista, en donde se queda solamente en palabras bellas que el político no lleva acabo; es decir, el político solo se mueve en el ámbito teórico y no llega a la acción, para que le sirva de instrumento de la sociedad misma.

Legislar es bueno y deseable cuando se persigue un orden de justicia social, pues las leyes justas aseguran la pacífica convivencia de todos. Sin embargo, es difícil sacudirse de encima la pesimista intuición de que no es práctico legislar en asuntos de Bioética, si se atiende a lo ocurrido a lo largo de la historia mexicana, una historia manchada de sangre.

La nueva imagen del derecho, que pretende el Bioderecho, es cambiante y lógica, como definición filosófica humanista; se puede entender como una mezcla de filantropía, positivismo y legalidad, bañada de justicia.

En contexto, el Bioderecho es el conjunto de normas jurídicas de carácter público, que se encarga de regular la biotecnología, la vida en su inicio tanto en su final, contemplando siempre la dignidad humana.

Ahora bien, su ámbito de acción más claro, pero no el más importante, es en la clonación y más cuando afecta al humano, la familia y la sociedad.

La clonación humana es producto del desarrollo científico tecnológico, que ha alcanzado la humanidad, pero vista la posibilidad, de que, en su aplicación, esta nueva tecnología de la vida, puede atentar contra la persona humana y su dignidad, se hace necesario su reglamentación, a través de un Estatuto Jurídico-Ético, cuyos principios y normas básicas nazcan de un estudio multidisciplinario de dos ciencias básicas: Bioética y Derecho.

No se trata de una limitación a la investigación científica, sino de establecer controles a la misma, partiendo de la idea de que las políticas y los principios no inciden sobre el descubrimiento sino sobre su difusión; no sobre la innovación sino sobre su aplicación; y que la libertad de investigación no es absoluta: está regulada por la Ley. Estos contenidos dan origen a una nueva visión y rama especializada del Derecho: El Bioderecho.

Continuar Leyendo
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Copyright © 2020 Conciencia Pública // Este sitio web utiliza cookies para personalizar el contenido y los anuncios, para proporcionar funciones de redes sociales y para analizar nuestro tráfico. También compartimos información sobre el uso que usted hace de nuestro sitio con nuestros socios de redes sociales, publicidad y análisis, que pueden combinarla con otra información que usted les haya proporcionado o que hayan recopilado de su uso de sus servicios. Usted acepta nuestras cookies si continúa utilizando nuestro sitio web.