JALISCO
Una relación del amor al odio: Está en su cancha…una mejor forma de comunicación por parte del gobernador Alfaro
																								
												
												
											Por Daniel Emilio Pacheco //
Recién terminaba Enrique Alfaro Ramírez su preparación universitaria, contó con el apoyo y guía de periodistas que le ayudaron a entrar en los círculos de la política jalisciense. La petición directa de su padre el Ingeniero Enrique Alfaro Anguiano, ex rector de la U de G, a un par de columnistas fue lo que le llevó a ser acercado a Enrique Ibarra Pedroza, en ese tiempo un político priista que destacaba por sus buenas formas de hacer política.
Así fue como la cobertura informativa siempre estuvo presente en los inicios políticos de un joven Enrique Alfaro echado pa´ delante, que, con su estilo claridoso y señalamientos precisos, evidenciaba las deficiencias de sus adversarios políticos.
Es esa misma buena relación entre Enrique Alfaro y la prensa tapatía, lo que ahora nos permite tener el registro de todos los posicionamientos que como oposición realizó el actual Gobernador de Jalisco, pues la apertura ante los medios por parte del ahora mandatario era total.
El miércoles pasado, la cara de Enrique Alfaro trataba de ser amable ante los medios de comunicación que asistieron a Casa Jalisco, mientras hacía pública su decisión de realizar ruedas de prensa semanales para hablar de temas que sean de interés para los jaliscienses, esto, cambiaría su estilo de comunicar, que hasta ahora, solo ha sido por medio de mensajes en redes sociales y boletines de prensa, una política de comunicación generada desde los inicio de su administración como presidente municipal de Guadalajara, desde la mesa de un restaurante argentino de la calle Justo Sierra.
La burbuja en la que el equipo de comunicación metió al entonces presidente municipal y el carácter del propio Enrique Alfaro, generó más roces y desencuentros entre el mandatario y la prensa, que buena relación.
El 2 de junio de 2017, durante la inauguración de obras de pavimentación en la colonia Lomas del Gallo, al oriente de Guadalajara, Enrique Alfaro dijo: “Yo quiero ver a todos esos que escriben tantas cosas de mí, al periódico MURAL, a NTR, a Crónica, a todas esas basuras que escriben cosas todos los días denigrando, ofendiendo, atacando, quiero ver qué han hecho ellos, que le llegue a los talones a esto para cambiar la realidad, ¿qué han hecho aparte de criticar, atacar, ofender, mentir?, eso hay que cambiar y decirles basta”.
Las reacciones por esta declaración de Enrique Alfaro a nivel estado primero, y luego a nivel nacional, ocasionaron que el presidente municipal de Guadalajara utilizara el medio electrónico de Jorge Álvarez Máynez para ofrecer una disculpa, escribió en esa ocasión: “Hace unos días, califiqué a algunos medios de comunicación de Jalisco de una manera en la que no debí hacerlo y por eso les ofrezco una disculpa a ellos y a quienes se hayan sentido ofendidos”.
“Entiendo que algunos aspectos de mi vida personal se acotan en el momento en el que represento a una institución pública pero a fin de cuentas, antes de ser un político o un presidente municipal, soy un ser humano. Sin que sea justificación, estaba enojado. Estaba enojado porque despertar todos los días y leer mentiras y ofensas sobre ti, así como la descalificación sistemática de tu trabajo, a cualquiera le generaría una reacción de esa naturaleza. Pero yo tengo una responsabilidad pública y un liderazgo que me obliga a moderar mi lenguaje y atemperar mis ánimos. Lo entiendo y lo asumo como un compromiso de aquí en adelante”, aseguraba Enrique Alfaro.
Luego en esa misma publicación –México no necesita silencio. Enrique Alfaro Ramírez /07/06/2017 / publicado en TERCERA VIA-, Enrique Alfaro escribía: “México atraviesa por una profunda crisis política e institucional, en donde lo peor que puede pasar es que impere el silencio. Hoy más que nunca, se requiere ejercer la libertad de expresión y la libertad de crítica para enfrentar los abusos y atropellos del poder; para combatir la desinformación y la manipulación; para ejercer nuestra ciudadanía y defender lo que creemos. Sin la crítica libre y el disenso abierto no tendremos herramientas para mejorar y corregir el rumbo de nuestro país”.
“Como ciudadano, pero también como político, así he entendido a la libertad de expresión, y por ello las críticas y cuestionamientos que he recibido durante mi carrera por parte de medios de comunicación, de periodistas, e incluso de otros actores políticos, cuando provienen de un ejercicio libre, profesional y auténtico, las he asumido como recordatorios de que hay algo que mejorar”, parecía que con estas ideas tan claras Enrique Alfaro iniciaba una nueva forma de relación con la prensa.
Ahora como Gobernador de Jalisco, la relación de Enrique Alfaro con la prensa ha quedado evidenciada en el “Posicionamiento de Amedi Jalisco respecto a las reacciones del gobernador Enrique Alfaro ante trabajos periodísticos críticos de su administración”, publicado el 24 de febrero de 2020, por la propia Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) en Jalisco
Aquí un extracto: “Desde que usted asumió su cargo como gobernador del estado de Jalisco, en diciembre de 2018, ha protagonizado varios desencuentros con medios de comunicación y periodistas locales. Recuperamos aquí tan solo algunos de ellos:
En enero de 2019 criticó la cobertura de varios medios de comunicación sobre la desaparición del Instituto Jalisciense de las Mujeres y, en un diálogo público con periodistas, llamó mentirosos a reporteros del Diario NTR Guadalajara.
Tres meses después, en marzo de 2019, se generó otro desencuentro con el Diario NTR y sus periodistas, luego de que se difundiera una investigación sobre la licitación de maquinaria pesada para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER). Ante los cuestionamientos que implicó dicho trabajo periodístico, usted respondió que “no contestaba mentiras”.
En octubre de 2019, en medio de una (sic) alza inaudita en los contagios por dengue, varios medios de comunicación presentaron investigaciones críticas sobre el desempeño del gobierno. Como respuesta, usted se refirió a los medios y periodistas como “genios que critican”.
En enero de 2020 tuvo usted otro desencuentro con el diario El Informador. En lugar de intentar comprender la discrepancia entre su gobierno y el medio en el manejo de algunas cifras relacionadas con la seguridad del estado, eligió descalificar un ejercicio periodístico aludiendo a razones cupulares de compra de publicidad oficial.
Finalmente, el pasado sábado 22 de febrero de 2020, tras la publicación de un artículo de opinión sobre desapariciones de mujeres en Jalisco de la autoría del periodista Rubén Martín, usted descalificó a través de Twitter tanto los datos referidos como la trayectoria del autor.
Estos episodios han establecido un patrón. Medios de comunicación y reporteros locales presentan investigaciones y opiniones críticas sobre el desempeño del Gobierno del Estado de Jalisco y el Gobernador reacciona con descalificaciones hacia la labor periodística. Reconocemos que en el ejercicio del derecho de réplica el debate público en un marco de libertad se ensancha para beneficio de todas y todos. Sin embargo, la réplica debe centrarse en lo que se estiman hechos imprecisos o falsos, no sobre la calidad o intenciones de los periodistas. En otras palabras, no es mediante descalificaciones o denostaciones como se ejerce el derecho de réplica”, señala la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) en Jalisco.
Ahora, ante la oportunidad de realizar ruedas de prensa presenciales, valdría mucho la pena recordar lo escrito por Enrique Alfaro en su columna “México no necesita silencio”, donde el entonces presidente municipal de Guadalajara reconocía: “Discrepar, criticar y argumentar públicamente constituyen el núcleo de la libertad de expresión. Por ello, hoy no puede haber temas, instituciones, medios, ni personas exentas de la crítica. Quien pretenda defender la libertad de expresión sin reconocer el derecho de cualquier persona a disentir, incluso de los medios de comunicación, está reduciendo la libertad de expresión al monopolio de unos cuantos.
México necesita que se escuchen más voces, que ejerzamos nuestra ciudadanía, que la sociedad civil más despierta y activa no cese de cuestionar ni de disentir, que los medios de comunicación y periodistas ejerzan con libertad y dignidad su profesión. De nada nos va a servir el silencio ante quienes mienten y manipulan desde la comodidad del poder”.
La oportunidad del Gobernador de Jalisco de tener una mejor comunicación con la prensa… está en su cancha.
En Twitter @DEPACHECOS
