OPINIÓN
Bilderberg y los designios económicos recientes: La cumbre fue en Washington
																								
												
												
											Economía Global, por Alberto Gómez-R. //
Los giros más recientes en la economía occidental para tratar de paliar los ya devastadores efectos de la crisis económica en un importante número de países, así como las medidas que están tomando los bancos centrales para tratar de contener las presiones inflacionarias (¿?) coinciden en tiempos y formas con la más reciente reunión del llamado Club Bilderberg.
El Club Bilderberg, una cumbre anual en la que jefes de Estado, poderes ejecutivos, empresariales y mediáticos mayoritariamente de Occidente se reúnen a puerta cerrada en torno a una serie de temas considerados candentes.
Todo un gobierno mundial informal unificado por sus distintas clases dirigentes, como representación de la jerarquización de un mundo actual, en realidad, muy pequeño en su cumbre.
El primer encuentro Bilderberg se realizó entre el 29 y el 31 de mayo de 1954 en el hotel del mismo nombre en Oosterbeek, Holanda. En 1955 hubo dos encuentros, en Francia y en Alemania. En 1956 se desarrolló en Dinamarca.
Los temas tratados en esos primeros encuentros, que contaron con la presencia del patriarca petrolero David Rockefeller, fueron, entre otros: la actitud hacia la Unión Soviética y el comunismo; la actitud hacia la integración europea y la Comunidad de Defensa Europea; la infiltración comunista en países occidentales; las políticas y aspectos estratégicos de la energía nuclear; la reunificación de Alemania; el rol del anti-colonialismo en las relaciones entre asiáticos y occidentales; y una aproximación común hacia China.
Un fundador destacado del grupo fue Joseph Retinger, lobbista de origen judío-polaco, ex asesor del primer ministro del Gobierno de Polonia en el exilio en Londres durante la Segunda Guerra Mundial, miembro del MI6 británico, promotor de entidades organizativas previas a la formación de la futura Unión Europea, como el Movimiento Europeo, el Congreso Europeo de la Haya y el Consejo de Europa, en las que conoció de manera cercana al entonces delegado Giovanni Montini, futuro papa Pablo VI.
El pasado domingo 5 de junio culminó en Washington D.C., en la mayor discreción, la 68ª reunión del elitista Club Bilderberg.
Tras dos años de impasse tras la emergencia global suscitada por el Covid-19, Bilderberg 2022 contó con la presencia de un nonagenario Henry Kissinger (ya con 99 años a cuestas), y cerca de 120 participantes de 21 países. Los invitados al selecto club incluyeron al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg; al rey Guillermo Alejandro de Holanda; al director actual de la CIA, William Burns; al ex CEO e histórico ejecutivo de Google/Alphabet, Eric Schmidt; al presidente y CEO de Pfizer, Albert Bourla; al presidente de la junta supervisora del Deutsche Bank, Paul Achleitner; al presidente de Goldman Sachs International, José Manuel Barroso; a la editora en jefe de The Economist, Zanny Bedoes; a la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin; al ex director de la CIA, David Petraeus; al editorialista del Financial Times, Gideon Rachman; al ex director del MI6 británico, John Sawers; al presidente de la histórica banca Wallenberg, Marcus Wallenberg; a la viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland; y al presidente ejecutivo del grupo de medios PRISA, Carlos Núñez; entre otros. (perfil.com)
Las reuniones del Club Bilderberg son secretas, no se permite la asistencia de ningún medio de información, periodistas o nadie que no tenga específicamente una invitación para asistir al evento. Durante muchos años la existencia de este grupo fue considerada como una de las “teorías de la conspiración”, pero al pasar de los años se fue evidenciando a través de filtraciones la veracidad de ello a pesar de que se delimita una amplia zona de restricción de acceso donde se llevan a cabo las reuniones, vigiladas por feroces guardias privados y agentes de seguridad de distintas corporaciones internacionales y de inteligencia.
Como para tener una somera idea de los temas de discusión de Bilderberg 2022, los principales tópicos que se filtraron de su temario fueron:
1. Realineamientos geopolíticos
2. Desafíos de la OTAN
3. China
4. Realineamiento del Indo-Pacífico
5. Competencia tecnológica chino-estadounidense
6. Rusia
7. Continuidad del gobierno y la economía
8. Disrupción del Sistema Financiero Global
9. Desinformación
10. Seguridad y sostenibilidad energética
11. Salud pospandemia
12. Fragmentación de las sociedades democráticas
13. Comercio y desglobalización
14. Ucrania
Los temas que se abordan en las reuniones del Club Bilderberg son desdoblados en otros foros internacionales a la luz pública, como el Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés) de Davos Suiza, en el que se plantean los temas más relevantes en la economía mundial.
La semana pasada, el organismo que coordina los grandes bancos centrales del mundo, el Banco de Pagos Internacionales (BIS), ha pedido que las tasas de interés se eleven “rápida y decisivamente” para evitar que el avance de la inflación se convierta en asunto aún más problemático.
El organismo que coordina los grandes bancos centrales del mundo, el Banco de Pagos Internacionales (BIS), ha pedido que las tasas de interés se eleven “rápida y decisivamente” para evitar que el avance de la inflación se convierta en asunto aún más problemático.
Los aumentos de las tasas de interés desde los bancos centrales no se ha hecho esperar, elevando con ello el precio del dinero, tratando de su valor prevalezca ante un escenario adverso tanto en los hechos como en la credibilidad de monedas como el dólar.
Ante una alta demanda de productos pero con muy baja oferta debido a la crisis actual en las cadenas de suministros y la guerra en Ucrania, los precios de estos seguirán aumentando y, aunado al incremento al costo de los créditos –una medida económica para tratar de contrarrestar dicho incremento- que repercuten directamente en los sectores productivos además de desincentivar el consumo, es poco probable que la subida de las tasas de interés tenga un efecto positivo, al contrario, podría acelerar la llegada de una gran recesión económica, que probablemente haya sido planeada desde las altas élites mundiales.

