Dante Delgado: ¿Cómo ayudar al presidente?

De primera mano, por Francisco Javier Ruiz Quirrín //

A Dante Delgado Rannauro, dueño del partido político, “Movimiento Ciudadano”, se le ha descompuesto de un día para otro su plan de ponerse en “modo espera” a que Marcelo Ebrard se anime a dejar MORENA y convertirse en candidato presidencial bajo el color naranja.

Pero más allá de eso, se ha puesto en riesgo su papel oculto y convenenciero de ayudar a López Obrador, como lo hizo en los pasados comicios en el Estado de México.

Todo comenzó con la sorprendente aparición de Xóchitl Gálvez en el firmamento de la búsqueda de la Presidencia de la República.

A estas alturas no es secreto para nadie, que el “Fenómeno Xóchitl” alteró el dominio casi absoluto del Presidente sobre el panorama sucesorio, paseando a sus “corcholatas” por todo el país, sin mayores “detentes” que unas recomendaciones balines del Instituto Nacional Electoral, que puso oídos sordos a la realidad insultante del adelanto de campañas y uso de recursos públicos desde palacio nacional.

La primera reacción, -lógica, para no salir de la jugada- dentro de Movimiento Ciudadano, fue del mismo Dante, quien lanzó la declaración de que “Xóchitl es nuestra amiga”.

Enseguida, el dirigente nacional del partido, Clemente Castañeda, no tuvo el menor rubor para enviar el mensaje de que, ante la presencia de la senadora hidalguense en la contienda por la candidatura presidencial de la alianza opositora al partido en el poder, “habría qué replantear la postura de MC ante esta presencia y definir una posición”.

Palabras más, palabras menos, ver la posibilidad de que MC apoyara también a Xóchitl, con todo y que camina con la bandera de la alianza PRI-PAN-PRD.

Ante ello, no trascurrieron muchas horas para que el propio Dante enviara unas cuantas líneas en un “twitt”, para recalcar que con el PRI “ni a la esquina”.

Secunda a Dante el gobernador de Nuevo León, Samuel García, quien envía además el mensaje de que el PRI se la ha llevado “jodiendo y jodiendo” a su gobierno, de tal manera que está convencido de que jamás accedería a convenir una alianza política con este partido político.

Pero quizá lo que más pesó en la animosidad de MC, fue el mensaje del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien no sólo dio a conocer que no buscaría la candidatura presidencial, sino que exhortaba a su partido a asumir una postura seria, de una oposición con proyecto de nación que se hiciera presente en esta contienda electoral adelantada.

A la par, se antoja difícil que Marcelo Ebrard, si no es el candidato presidencial de MORENA, deje a ese partido para aceptar la postulación por otro instituto político, entre los que se ha mencionado a Movimiento Ciudadano.

Delgado Rannauro, como el jardinero central en un equipo de béisbol, ha jugado “pegado a la barda”, esperando “cachar” un elevado profundo que le permita competir “con dignidad” la presidencia de la república, poniendo sus esperanzas en Marcelo y en Ricardo Monreal.

Desde luego, para el dueño de MC no es secreto alguno la forma de hacer política de López Obrador, que incluya la integración de expedientes “comprometedores” de los integrantes de su mismo equipo, listos para ser exhibidos en caso de una deslealtad.

Pero la presencia de Xóchitl Gálvez, disruptiva, con un perfil ideal, candidateable en cualquier partido político, ha provocado que Dante –en términos beisboleros- “busque dejar el jardín central y colocarse dentro del cuadro”.

Más todavía, convencido de que la decisión de AMLO de atacar constantemente a Xóchitl, conlleva el riesgo de martirizarla y en vez de perjudicarla, brindarle una gran ayuda haciéndole su campaña de imagen ante un pueblo que abraza a las víctimas de los abusos del poder.

Es tan difícil para el Presidente atacar a Xóchitl, que además de no encontrar un lado oscuro en ella, quizá acepte uno de estos días que en el año 2018, a través de Claudia Sheinbaum, la buscó para ofrecerle una candidatura por MORENA y hasta un cargo en el gabinete.

Ahora, es un gran dilema para Dante, encontrar respuestas a sus angustiosos cuestionamientos: ¿Cómo salir ganancioso de esta justa? ¿Cómo ayudar a López Obrador? ¿Qué cartas le quedan para ir solo y buscar la Presidencia? ¿Seguir esperando a Marcelo? ¿Decidir dar el apoyo a Xóchitl? ¿Y reaparecer en una asamblea al lado de “Alito” y Marko Cortés? ¡Nunca!

Preferiría postularse él mismo como candidato a la Presidencia… ¿Será?