ENTREVISTAS
Celia Fausto: «Estamos sin Raúl (Padilla), pero Raúl sigue estando con nosotros; era un líder que consensuaba»
Por Mario Ávila //
A un año de la orfandad en el seno de la Universidad de Guadalajara, la ausencia de Raúl Padilla López, quien fuera su máximo líder durante más de tres décadas, los universitarios saben que están sin Raúl, pero al mismo tiempo saben que Raúl sigue estando con ellos.
Esta fue la explicación de lo que siente el Grupo Universidad, en voz de la regidora de Guadalajara, Celia Fausto Lizaola, compañera de Padilla López desde los orígenes de su carrera al frente de la universidad en los años finales de la década de los noventas, en el siglo pasado.
Todos los personajes somos insustituibles -dijo-, porque tenemos una personalidad propia, pero en el caso de Raúl con todo lo que nos enseñó y lo que nos dejó en el terreno educativo, en la cultura, en el arte y en la política, es ahora un capital social que tiene como destinatarios a las nuevas generaciones en el estado y en el país.
Hoy -abundó-, las decisiones se siguen tomando de manera colegiada, Raúl no era un hombre omnipotente, ni todólogo, era un líder que aglutinaba, que consensuaba, que sumaba, que ponía en la mesa los temas a discusión para el debate y que aterrizaba finalmente con una idea o con un proyecto. Y eran decisiones colegiadas.
Fausto Lizaola, una de las integrantes del primer círculo de amigos, en los orígenes de la carrera de Padilla López, habló para los lectores del semanario Conciencia Pública, sobre el sentimiento que hoy tiene a un año de su ausencia.
“Yo me siento muy honrada de haber formado parte inicialmente de este colectivo creado en torno a Raúl para fortalecer y engrandecer a la universidad y lo que yo tengo en mi memoria y en mi estilo de vida, es precisamente su forma de ser, que uno no tomaba decisiones solo, sino que lo hacía con el consenso de todos y creo que en ese sentido las cosas no han cambiado. Y lo hemos dicho recio y quedito, quien hoy ostenta el liderazgo institucional, es Ricardo Villanueva, no solo por ser el rector general, sino porque no ha perdido de vista que existen otros actores que pueden opinar, aportar y comprometerse con la Universidad.
“Raúl no se fue pensando que iba a haber una crisis, sino que seguramente se fue pensando que íbamos a continuar con ese modelo, con ese esquema de toma de decisiones democráticas, consensuadas y para bien de la propia universidad».
«Raúl, repito, fue un líder que obviamente nos hace falta, que nos formó, pero que nos dejó comprometidos con su legado y en unidad por nuestra universidad”, planteó Celia Fausto, tras augurar que la mejor muestra de unidad se habrá de dar en la elección del nuevo rector de la UdeG en el año entrante.
Y abundó: “Me resulta muy difícil hablar de Raúl Padilla López, sin que esté con nosotros, aunque lo está. Lo está porque finalmente estamos comprometidos con toda la herencia que nos ha dejado, la educación la cultura e inclusive una visión de la política diferente. Pero también debemos de entender que la vida sigue y que lo que tenemos que hacer es seguir adelante. Para mí, a un año de su partida las cosas han cambiado, aunque para bien, sí con un dejo de melancolía, de tristeza, de añoranza, porque por supuesto nos hace falta, porque sin duda Raúl fue un líder muy vigoroso, muy visionarios e innovador.
“También fue un líder que creó conciencia y esa conciencia nos ha movido también a nosotros a hacer cada vez mejor las cosas, tal vez tenemos errores, tenemos defectos, pero siempre en nuestra menta quienes estuvimos cerca de él, quienes aprendimos de él, quienes nos formamos políticamente a su lado, quienes escuchamos sus consejos, su conducción siempre certera, obviamente que eso nos marcó para siempre estando él con nosotros y ahora que no está, atesoramos muchísimo esa herencia que en lo personal siento que cada quien valora muy a su modo”, planteó la regidora tapatía.
Y cuando yo digo -expuso-, que se trató de un líder visionario e innovador, basta recordar que antes de ser rector, Raúl ya había atesorado su sueño en la literatura a través del gran encuentro de los libros y los escritores, lo que ahora es La FIL, un acontecimiento cultural de proyección internacional que agrupa, concentra, que aglutina, que reúne a escritores autores de México y de todo el mundo. Y también antes de ser rector, hizo realidad el hecho de promover y potenciar el talento de los cineastas, productores, actores. Creo que eso es algo que en Jalisco se dio, gracias a Raúl Padilla.
En lo educativo, Celia Fausto recordó que la obra de Padilla López también fue innovadora “organizando a la Universidad de Guadalajara en un modelo en red, un modelo que hoy por hoy está muy fortalecido y permeó a lo largo y ancho del estado y que no tuvo otro objetivo que acercar a la juventud jalisciense a la educación, a la formación de personas de bien y útiles a la sociedad. Ese legado y esa herencia, ya no es nada más para los universitarios y las universitarias, sino que es un capital educativo y cultural de todos los jaliscienses y los habitantes del Occidente del país.
