CULTURA
¿Qué sorpresas nos esperan? Inicia la fiesta grande
Miscelánea Deportiva, por Esteban Trelles Meza:
Para aquellos escépticos que afirman que el futbol mexicano es mediocre, la liguilla demuestra todo lo contrario en el que la moneda está en el aire para definir el campeón de Liga MX.
Lo que es claro y contundente, que un equipo que invierte cada temporada en refuerzos de jugadores, cuerpo técnico, mercadotecnia publicitaria con programas exclusivos de sus equipos, gastando una fortuna en tiempo aire en TV, no es garantía de campeonar.
Los tan trillados “equipazos” América, UANL, Monterrey son una muestra clara que la plata ayuda siempre, mas no para ceñirse la corona, en el que las posibilidades son equitativas para todos (Guadalajara Cruz Azul, UNAM, Toluca, Pachuca).
Sostenemos nuestra apreciación personal en el sentido del momento futbolístico por el que atraviesa un equipo, en el que la preparación física es fundamental y básica, el ritmo de competencia, el aspecto anímico, pero lo más importante su propia compenetración de conjunción que recuerda la frase célebre del argentino- español, llamado también la “saeta rubia”, Alfredo Di Stefano “Ningún jugador es tan importante como todos juntos”.
Ciertamente, las individualidades pesan pero jamás nunca supera el equipo como tal en el que todos luchan parejos por la obtención de la victoria, que es sin duda alguna determinante para superar adversidades y vicisitudes que se presentan en campeonatos oficiales de torneos diversos, (lesiones, castigos, bajas de juego, etc ).
“Digan lo que digan”, no es el título de la canción del divo de Linares, sino nuestra aseveración de nuestros dichos que están plasmados en nuestra crónica escrita.
La mercadotecnia es importante para posicionar la marca (equipo), principalmente con los comentaristas televisivos que manipulan a la afición para bien o para mal.
A diferencia con el futbol español por citar un solo ejemplo, que define al campeón de Liga, que al igual lo era en nuestro país, siendo campeón el primer lugar de la tabla general en un torneo anual, de dos vueltas, esto es, jugar contra un equipo como local y visitante, que entre paréntesis se supone sería lo justo.
La Liguilla en México hace la diferencia adentrando al aficionado su permanencia en los estadios, con la vehemencia y pasión desbordada, que muchos gozan de ello, que a pesar de todo sigue siendo un espectáculo familiar.
En ese sentido América seria campeón absoluto arrasando los campeonatos que generacionalmente siempre busca la supremacía en toda clase de competencia con la mística y el espíritu triunfador que prevalece siempre, alimentado y motivado por su empresa televisora y sus secuaces, perdón quise decir su ejército de comentaristas incondicionales diseminados en todas las empresas de comunicación.
El fanatismo ciega la mente y anula las conciencias, que hace perder los estribos y la objetividad no solo en los aficionados, sino en los medios de comunicación.
Definitivamente “La Liguilla” llegó para quedarse, manteniendo viva la expectativa del aficionado, en el que las emociones están al “rojo vivo”, y los encuentros en esa fase son de vida o muerte, que lo hace ser un espectáculo interesante que desborda la pasión del aficionado y los tiene siempre al “filo de la navaja”.
“Que ocho equipos en liguilla son demasiados”, “que las modificaciones contemplan cuatro equipos más”, “que es una exageración” y tantos comentarios negativos que reciben en cada torneo, no quita la entrega de sus jugadores, y se ven encuentros de calidad y competencia.
Cada periodista tiene su propia visión en la manera de interpretar los partidos bajo su óptica personal que algunos dramatizan, otros magnifican, otros exageran, otros manipulan, que el aficionado los identifica plenamente, que el aparato receptor casero busca su canal preferido y disfrutar de los que sí saben de futbol.
Por otro lado, Pachuca es para nuestro particular punto de vista un ejemplo a seguir en todos sentidos dentro y fuera de la cancha, tienen al igual que el “Rebaño Sagrado”, la humildad que los hacen grandes.
Jesús Martínez, el propietario de los “Tuzos”, se dedica en cuerpo y alma a su equipo junto a sus proyectos exitosos del Salón de la Fama Internacional, la Universidad del Deporte y por supuesto su equipo canterano de calidad de exportación con Hirving “Chuky” Lozano como uno de sus máximas figuras entre muchos más.
El apoyo de su familia es importante, involucrando hermano e hijo como directivos de primer nivel, recordando que León junto a UNAM y Atlas son los únicos bicampeones en el formato de Liguilla del futbol mexicano.
Dicen que los comparativos son odiosos, que a diferencia de su homologo Azcárraga este último por dinastía son vanidosos, prepotentes, engreídos con el poder de su televisora, que el “Tigre” mayor se ufanaba de su empresa diciendo “Cuando han visto ustedes una televisión tirada a la basura”, lo que alguien le respondió : “Pero cuanta basura nos pasan por televisión”, juego de palabras que describen la personalidad de las tres generaciones de los magnates de TELEVISA.
El comentario viene para demostrar que la humildad y la sencillez hacen a los grandes personajes que en ese sentido son también triunfadores y la afición los ve de buena manera.
El Club Deportivo Guadalajara fue de los primeros con sus socios accionistas en su Club, con visión social con la creación de su Club en una zona privilegiada de plusvalía al poniente de la ciudad (que el finado Jorge Vergara destruyó), que a diferencia de los rojinegros su Club en El Paradero en una zona proletaria al oriente de la Perla tapatía, que presumían estirpe de burguesía, que al paso del tiempo recuperaron su posición con su elegante y majestuoso Atlas Colomos.
Todo este entorno establece el compromiso social de equipos grandes comprometidos con su afición y ciudad en fomentar los valores de familia, a través del futbol.
América con toda su prosapia y grandeza no tiene un Club Deportivo del tamaño de los tapatíos superados todos por la Universidad de Guadalajara y su espléndido Club Deportivo con hotel y cabañas llamado “La Primavera” por estar asentado en parte del bosque del mismo nombre,
Por cierto, el Club Deportivo de Leones Negros es el más grande de América Latina, que la membresía de sus socios tienen también en Villa Montecarlo en Chapala, en la rivera del lago con acceso a sus pequeñas instalaciones de hotel, alberca termal, gym, sauna y restaurante gourmet.
Toda esta situación obedece a los equipos grandes comprometidos no solo con su afición, sino la sociedad civil misma en el que no existe odio hacia ellos sino el reconocimiento de una visión humanista, en el beneficio de todos.
Uno se preguntaría, al final de qué sirve el futbol como espectáculo, que sus estadios son las cantinas más grandes del país, que los menores de edad tienen acceso sin control alguno, que al apasionamiento y fanatismo les gana y arman broncas descomunales.
América, UANL, Monterrey las manejan empresas privadas millonarias incluyendo Cruz Azul y Toluca, que lo único que les interesa son obtener campeonatos, sin importar un comino la proyección positiva que puedan tener para la afición como Pachuca y Guadalajara si la tienen.
Bienvenida la Liguilla que hace brindarse al máximo todos los equipos, que como espectáculo es maravilloso y se ven los mejores encuentros siempre.
E-mail: etrememodelos@hotmail.com
