NACIONALES
Donación de esperma en México
Bioética, por Omar Becerra //
Los casos de infertilidad en nuestro país, han sido un tema que ha ido aumentando con el paso de los años, así como también la naturalidad frente a las diversas orientaciones sexuales.
En este tipo de casos la donación de esperma es una alternativa viable para miles de mujeres solteras, parejas de mujeres y parejas mujer /hombre, con problemas de infertilidad del lado masculino.
La donación de esperma la podemos definir como un acto altruista en el que un hombre sano y con semen de calidad óptima, cede voluntariamente algunas muestras, para que sean utilizadas por pacientes que buscan tener una hija o hijo.
Aunque nuestro país no cuenta con un marco legal para este tipo de donaciones, sería interesante y con el marco jurídico ya existente, involucrar a los fedatarios públicos en el estado, para dar fe pública de este procedimiento médico, en lo referente a la viabilidad de los datos genéticos de las partes involucradas.
Ahora, con las disposiciones de ley en donde se involucra al fedatario público, como en donaciones de cuerpo para la docencia e investigación, de órganos y de células, estamos siendo visionarios como estado al vincular la medicina, la bioética y la medicina en un mismo rubro, el beneficio social.
En otros países se presentan grandes problemáticas legales en lo referente al donador del esperma y su ADN.
Como por ejemplo es el caso de Inglaterra:
Según el marco regulatorio definido por la Autoridad de Embriología y Fertilización Humana (HFEA), el esperma de un donante sólo puede usarse para un máximo de diez familias en el Reino Unido.
Sin embargo, los bancos de gametos privados exportan el esperma de determinados donantes al extranjero cuando se alcanza el límite de diez familias y con ello se generan ganancias, a través de un acto altruista como lo es la donación de esperma.
Los detalles de la exportación suelen especificarse en documentos legales o en los términos y condiciones del contrato, pero como son otros países, el marco jurídico cambia y realizan el mismo procedimiento no diez veces sino veinticinco veces.
También existen casos como en Noruega, en donde el médico encargado de hacer el procedimiento de fecundación in vitro (FIV) insertaba su esperma en conjunto con su ADN, en vez del donador asignado y así engañaba a las personas involucradas que realizaban el procedimiento médico y tenían la esperanza de tener un bebé.
También lo podemos observar en USA, donde un hombre donó su esperma y fecundó a 20 mujeres teniendo un total de 38 hijos con las mismas, y varios de sus hijos lo demandaron por alimentos caídos.
Valdría la pena considerar que los derechos de los infantes son violados con este tipo de procedimientos, sobre todo en sus derechos de filiación contenidos en varios códigos civiles del país.
Recordemos que, sobre los derechos humanos, no existe otra prerrogativa jurídica más importante.
En este orden de ideas, cada año, muchos bebés son concebidos gracias a la donación de semen, beneficiando especialmente a mujeres solteras y a parejas de mujeres que deciden vivir su maternidad.
Así como también se ha convertido en una gran opción para el caso de arrendamiento de vientre, o maternidad subrogada, tema interesante por la existencia de granjas de mujeres en nuestro país
Recordemos que nuestro país es uno de los países con más turismo médico para realizar este tipo de acciones médicas, que es muy utilizado por parejas extranjeras.
Sería interesante si los legisladores de nuestro país, consideraran un beneficio fiscal para la hacienda pública de nuestro estado.
Es decir, el cobro de impuestos para este tipo de procedimientos para las empresas que lo realizan.
También recordar que muchos de los procedimientos médicos de este tipo, como la donación de órganos ante notario público en nuestro estado, cobran un impuesto estatal.
Por ello encontramos una serie de contradicciones en materia fiscal, donde se supone que son gratuitos para la población, pero no para el fedatario público.
Volviendo al tema la donación de esperma es una excelente opción para el procedimiento de fecundación in vitro, pero es de considerarse y prestarse a malas prácticas, cuando el donante actúa de buena fe, pero la empresa en cuestión hace negocio, con la buena fe de los involucrados.
Recordemos que no toda la población puede llegar a considerar el procedimiento de FIV, ya que es costoso, y solo la población que tiene los recursos económicos puede llegar a pagarlo
Desde la Bioética utilitarista es una opción viable, porque en pocas palabras el fin justifica los medios, pero desde la Bioética personalista, este procedimiento pudiera considerar injusto y manipulable económicamente,
Usted juzgue si es conveniente para la sociedad y/o rentable para el estado este tipo de procedimientos médicos.
