JALISCO
Cruz Verde ha atendido a más de 560 personas por picaduras de alacrán
– Por Francisco Junco
La temporada de alacranes sigue activa en Guadalajara y su área metropolitana. Desde enero a la fecha, la Cruz Verde ha atendido a 568 personas por picaduras, informó Héctor Ramírez Cordero, médico encargado del área de Epidemiología de los Servicios Médicos Municipales de Guadalajara.
Aunque la mayoría de los casos se han presentado en un nivel controlable, algunos pacientes llegaron en estado más grave, sin que hasta el momento se haya registrado alguna defunción.
La unidad con mayor número de atenciones es la Cruz Verde Ernesto Arias, que concentra 397 casos y cuenta con el Centro Regional de Información y Atención Toxicológica (CRIAT), mientras que la Ruiz Sánchez suma 58 pacientes.
Ramírez Cordero subrayó que todas las unidades municipales disponen del suero necesario para contrarrestar el veneno, lo que garantiza atención inmediata a quienes lo requieran.
El especialista recordó que los meses con mayor incidencia son de marzo a junio, aunque las condiciones de este año han prolongado los reportes. En las últimas dos semanas se han registrado 77 picaduras, lo que refleja la importancia de que la ciudadanía mantenga medidas preventivas.
“El alacrán busca refugio en zonas secas y se alimenta de cucarachas y otros insectos. Si eliminamos esos focos de alimento, reducimos el riesgo en nuestros hogares”, señaló.
Entre las recomendaciones destacan mantener patios, azoteas y habitaciones libres de objetos acumulados, revisar calzado y ropa antes de usarlos, así como sacudir las camas antes de dormir.
Ramírez Cordero advirtió que niños y adultos mayores son los más vulnerables, por lo que deben extremar cuidados.
También recomendó pintar las paredes con colores claros para identificar más fácilmente a los alacranes dentro de la vivienda.
En caso de una picadura, el llamado es no automedicarse ni recurrir a remedios caseros. Lo correcto es lavar la zona afectada, mantener la calma y acudir de inmediato a la unidad médica más cercana.
“Entre más se altere la persona, más rápido se disemina el veneno”, apuntó el especialista, quien reiteró que la prevención y la limpieza del hogar son las mejores herramientas para reducir riesgos.
