CULTURA
Comparecencia abre debate sobre los retos culturales de Jalisco
– Por Francisco Junco
La comparecencia del secretario de Cultura de Jalisco, Luis Gerardo Ascencio Rubio, ante la Comisión de Educación, Cultura, Deporte y Juventud, trascendió la simple presentación de cifras y se convirtió en un examen político y social sobre el rumbo cultural del estado.
Mientras el funcionario destacó avances y una agenda que llegó a los 125 municipios, los legisladores enfocaron sus cuestionamientos en las carencias estructurales, el rezago presupuestal y la falta de mecanismos eficaces para atender a las comunidades más vulnerables.
El presidente de la Comisión, el diputado Enrique Velázquez González, abrió el debate con un dato contundente: el presupuesto destinado a cultura representa apenas el 0.43% del gasto estatal.
Una cifra que, dijo, refleja abandono histórico y dificulta la recuperación de bibliotecas, museos y espacios de formación tras el impacto de la pandemia. A su juicio, cualquier política cultural queda incompleta cuando la inversión continúa concentrándose en la zona metropolitana.
Ascencio Rubio defendió la descentralización como el eje central de su administración. Señaló que la Secretaría realizó 13 mil 284 actividades con la participación de 978 mil personas, y que el 70% de estas ocurrieron fuera del Área Metropolitana de Guadalajara.
Mencionó la expansión del programa ECOS, la creación de nuevas orquestas y la llegada de producciones como El Orgullo de Jalisco y Caballería Rusticana a municipios como Ciudad Guzmán, Mazamitla, Lagos de Moreno y el Barrio de Analco. Según afirmó, la cultura funciona como “motor de desarrollo social”.
El contraste entre discurso y realidad lo marcó la diputada Verónica Jiménez, quien evidenció la rigidez burocrática que afecta a comunidades indígenas. Su crítica expuso un problema concreto: “¿Quién les va a facturar un borrego en la sierra?”.
Denunció que los lineamientos actuales obligan a estas comunidades a cumplir requisitos incompatibles con sus usos y costumbres para justificar ceremonias y rituales. El secretario reconoció que se trata de un tema complejo que debe revisarse.
Desde otra perspectiva, el diputado Miguel de la Rosa cuestionó la falta de coordinación con dependencias que sí tienen presencia relevante en zonas marginadas.
Consideró esencial articular a Cultura con la Secretaría de Educación y con el programa Colmenas para evitar que la descentralización se quede solo en el discurso.
En respuesta, Ascencio Rubio aseguró que ya existe trabajo conjunto con Educación para fortalecer el programa ECOS y adelantó que Colmenas se integrará a una estrategia ampliada para regiones de alta vulnerabilidad.
El informe presentado incluyó también los principales logros institucionales del año: 384 mil visitas a museos estatales, 19.8 millones de pesos otorgados en estímulos como Proyecta, Pecda y Pacmyc, más de 9 mil personas atendidas a través del Ecosistema de Formación Permanente y 2 mil 300 estudiantes en la Escuela de Artes Jalisco.
Además, se destacaron iniciativas itinerantes como la Caravana Artesanal, Escena en Tránsito, el crecimiento de las Vías Verdes y los 43 conciertos de la Orquesta Filarmónica de Jalisco. El panorama mostró un estado activo, aunque aún marcado por la desigualdad.
Los legisladores solicitaron mayor claridad sobre los proyectos de regionalización, infraestructura cultural prevista para 2026, fortalecimiento de bibliotecas, estrategias de cultura de paz y uso de inteligencia artificial en la oferta cultural pública.
La comisión insistió en la urgencia de asignar recursos permanentes y mantenimiento adecuado a las casas de la cultura en el interior del estado.
Velázquez aseguró que el Congreso respaldará los esfuerzos para garantizar el acceso pleno a la cultura, pero enfatizó que el Ejecutivo debe asumir con responsabilidad el compromiso presupuestal que exige el sector.
