PRI Jalisco vincula el legado revolucionario con la crisis actual del país

Por Francisco Junco

En la conmemoración del 115 aniversario de la Revolución Mexicana, el PRI Jalisco reunió a dirigencias municipales, sectores, organizaciones y militantes para lanzar un mensaje firme ante la crisis nacional.

La presidenta estatal, Laura Haro Ramírez, recordó que la Revolución nació como respuesta a la desigualdad y al abuso del poder, y advirtió que hoy México enfrenta una realidad que, aunque distinta, mantiene paralelos preocupantes.

Afirmó que el país vive un aumento de violencia y una creciente polarización impulsada desde el gobierno. “El PRI”, dijo, “debe sostenerse con carácter, valentía y claridad, porque la ciudadanía necesita voces firmes que no callen ante los abusos y que defiendan la verdad”.

Laura Haro señaló que en sus recorridos por Jalisco ha encontrado comunidades enteras marcadas por la vulnerabilidad, pero también una militancia que mantiene su compromiso intacto.

Para ella, “hacer revolución hoy” significa caminar las calles, defender libertades, denunciar injusticias y construir instituciones sólidas.

Destacó además que el partido ha resuelto 117 de los 125 procesos de renovación municipal, un paso que describió como esencial para fortalecer al PRI en el estado.

La regidora Regina Martínez González, delegada en funciones de presidenta de la Red de Jóvenes por México, afirmó que la Revolución Mexicana fue un despertar social que reafirmó el derecho a vivir con dignidad.

Sostuvo que ese espíritu sigue vivo en las juventudes, quienes se movilizan, cuestionan y construyen desde las aulas, las calles y las redes.

Reivindicó a los jóvenes priistas como una nueva fuerza que no pretende repetir la historia, sino escribir una donde la política recupere su propósito y disentir no implique un riesgo.

Por su parte, la diputada Alondra Fausto subrayó que el liderazgo de mujeres y jóvenes dentro del PRI refleja una visión moderna y necesaria para el país.

Aseguró que México vive un momento de tensión social que demanda ética y valentía, y que el partido debe mantenerse del lado de quienes piden instituciones fuertes y gobiernos que escuchen.

Recalcó que gobernar implica corregir y servir, no perseguir al disenso, y que el PRI debe actuar como contrapeso en defensa de la democracia.

El acto concluyó con un mensaje de unidad y compromiso: el PRI Jalisco reafirmó su voluntad de seguir construyendo, desde el territorio y con su militancia, un proyecto sólido que reivindique los valores revolucionarios en un contexto nacional lleno de desafíos.