Connect with us

JALISCO

Cuando el color del semáforo se convirtió en anecdótico: Le hemos pedido respeto al virus

Publicado

el

Con todo respeto, por Jorge Zul de la Cueva //

¿Se acuerdan al principio de la pandemia? ¿Se acuerdan cuando Jalisco llegó a rojo por primera vez y el Gobernador del Estado retó al Gobierno Federal, mandó a freír espárragos el semáforo y se inventó el botón de pánico?

Creo que es difícil ahora no aceptar que todo eso tuvo razones políticas y no científicas. Al tiempo es fácil reconocer que había una estrategia para posicionar a Alfaro a nivel nacional, que tenía como eje su capacidad de actuar rápido, en contraste con Amlo, a la hora de enfrentar esta amenaza global.

A Él no le temblaron las manos y dio resultados (decían entonces) y por eso tanta confrontación y por lo mismo no era posible aceptar la realidad de que esta pandemia tiene picos y valles y que nadie ha podido realmente someterla y es poco el margen de maniobra de los gobiernos y si me apuran, de la comunidad internacional.

Se pueden solicitar algunos créditos para ayudar a los comercios que sufren y mantener viva la economía. Aquí eso se hizo, aunque no ha habido transparencia en torno a cómo se ha gastado ese dinero; pero al tiempo, inevitablemente, lo sabremos. Eso va a seguir su propio curso.

Se puede generar información, recordar a la gente que debe lavarse las manos, que el peligro no ha pasado. Se pueden activar protocolos de una u otra índole, instalar mesas y todas esas cosas que también tienen que ver con percepción y manejo de crisis política más que sanitaria (con comunicación pues), pero en el fondo no se ha podido generar una estrategia sólida, funcional, ordenada y confiable para contener la pandemia y no hablo de Jalisco, sino del mundo, aunque claro hay quienes lo han hecho mejor porque tienen una sociedad más reclusa, más recursos, instituciones fuertes o pocos habitantes distribuidos en amplio territorio.

El caso es que los gobiernos, en mayor o menor medida, se sacan de la manga protocolos como la fase cero para mantener una cierta ilusión de capacidad de acción. Que si ponemos tapetes sanitizantes (que todo Dios sabe que no sirven para nada salvo para evitar clausuras), que si hacemos mediciones de temperatura cada tres metros en las plazas comerciales y otra serie de protocolos cuya utilidad para contener el virus es nula, marginal o no se puede porque daña la economía.

Claro que el enorme esfuerzo que se hizo cerrando comercios y haciendo la vida de cuadritos a centros culturales y gimnasios tuvo su utilidad, al igual que la reducción de aforo de restaurantes y bares con licencia de restaurante y claro que sin esas medidas la cosa se hubiera puesto bastante peor. El problema es que esto no ha terminado y nosotros parece que ya decidimos darle carpetazo.

Aclaro que no estoy diciendo que no se hizo nada, ni que lo que se hizo no sirvió. Estoy diciendo que es muy difícil hacer cosas eficientes como cerrar centros comerciales, museos, oficinas, fábricas, restaurantes, cines, estadios, salas de concierto y pescaderías por tiempo indefinido en una sociedad basada en el intercambio. El valor de la economía y la importancia de tener para comer no la pone en duda nadie, pero ya nos estamos pasando de indolentes y eso puede llevarnos a un escenario que acabe por complicar de nuevo la economía.

¿Por qué digo que nos estamos pasando de indolentes? Veamos: Jalisco pasó a semáforo naranja el pasado viernes cuando acumulamos (como país) 16 mil 421 nuevos casos de Covid-19 en 24 horas, la cifra más alta desde el 28 de enero y nuevo máximo también en la llamada tercera ola.

Hay diferencias entre la primera y la tercera ola y lo señala bien en redes el doctor Víctor Manuel González Romero (ex rector de la Universidad de Guadalajara (UdeG) e integrante de la Academia Mexicana de Ciencias). 

El doctor hizo una comparación anual de las defunciones, por Covid19, en Jalisco, en la semana 29. En este año, en comparación con 2020 las cosas se ven así: 

Las muertes reportadas son prácticamente a mitad.

La edad promedio de quienes murieron es 5 años menor.

La proporción de muertes, correspondientes a personas de 60 y más, se redujo de 69% a 48%, mientras la proporción de muertes, correspondientes a menores de 30 años, aumentó de 0.9% a 1.8%, es decir se duplicó.

Hay más datos y les recomiendo ampliamente seguir al doctor González Romero (@VMGlezR) en Twitter, pero creo que con esto ajusta para inferir que la vacunación está teniendo efectos y que hay un peligro real en que debido a que la población de mayor riesgo ya ha sido vacunada, aquellos que se consideran de menor riesgo por ser jóvenes den rienda suelta a sus actividades lúdicas y de esparcimiento disparando los contagios en ese sector, llevándonos a un escenario al que nadie tiene ganas de llegar.

Lo que toca según yo es un poco de paciencia, y un poco de empuje de las autoridades, pero no se acaba de cristalizar ni una cosa ni la otra. Por un lado el gobernador dice que se va a poner más estricto que Emmanuel Macron en Francia y por otro ya todo está abierto y lleno. En las calles esta pandemia se gestiona sola y no es que el gobierno local sea el peor y el más incapaz, sino que es un asunto de falta de infraestructura, subdesarrollo, situaciones globales ajenas a nuestro control (como la producción y distribución de vacunas) y claro, también algo hay de incapacidad e indolencia de la clase política.  

Basta recordar dónde estamos según los protocolos que se diseñaron cuando esto empezó para ver que le hemos perdido el respeto al virus.

 El semáforo naranja indica alto riesgo y la recomendación (no es obligación) que da el Gobierno Federal es a la letra: 

Además de las actividades económicas esenciales, se permitirá que las empresas de las actividades económicas no esenciales trabajen con el 30% del personal para su funcionamiento, siempre tomando en cuenta las medidas de cuidado máximo para las personas con mayor riesgo de presentar un cuadro grave de COVID-19, se abrirán los espacios públicos abiertos con un aforo reducido.

Esto no está pasando ni va a pasar, el semáforo es anecdótico y nosotros como sociedad hemos decidido pasarnos el alto. Espero que esto no implique ser impactados por un tren.

Cuídense mucho que esto no se acaba hasta que se acaba.

Continuar Leyendo
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

JALISCO

Bárbara se degrada a tormenta tropical, pero seguirá provocando lluvias en la costa del Pacífico

Publicado

el

Por Redacción Conciencia Pública con información del SMN y NHC //

La tormenta Bárbara, que inicialmente se había convertido en el primer huracán de la temporada en el Pacífico mexicano, se degradó a tormenta tropical la noche del lunes, según reportó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).

La noche de ayer el fenómeno se localizaba a 370 kilómetros al oeste de Manzanillo, con vientos sostenidos de 110 km/h, y se espera que se debilite aún más en los próximos días hasta convertirse en un remanente bajo para el miércoles.

La mañana del lunes, Bárbara había alcanzado la categoría 1 en la escala de huracanes, con vientos cercanos a los 120 km/h.  El NHC también informó que la tormenta tropical Cosme avanza a unos 1.000 kilómetros de la península de Baja California con vientos sostenidos de 100 kilómetros por hora y con probabilidades de convertirse en huracán este lunes.

Se espera que ambos meteoros se mantengan lejos de la costa de México en su trayectoria por el Pacífico para empezar a perder fuerza a partir del martes.

El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que las bandas nubosas de Bárbara están provocando lluvias intensas en las costas de Jalisco, Colima y Michoacán. Esta situación es parte del patrón anual de ciclones que afectan al país entre mayo y noviembre, tanto en el litoral del Pacífico como en el Atlántico, debido a su ubicación geográfica.

En años recientes, México ha sido severamente impactado por huracanes. En octubre de 2023, Otis devastó el puerto de Acapulco como huracán categoría 5, dejando decenas de muertos y desaparecidos.

En septiembre de 2024, el huracán John golpeó dos veces la costa sur del Pacífico, con un saldo de al menos 15 fallecidos. Según expertos, el calentamiento global ha contribuido a que estas tormentas sean cada vez más impredecibles y violentas.

Continuar Leyendo

JALISCO

Los retos de Verónica Delgadillo y el futuro de Guadalajara

Publicado

el

Los Juegos del Poder, por Gabriel Ibarra Bourjac //

El pasado viernes, en un encuentro sin precedentes con directivos de medios y líderes de opinión, la alcaldesa de Guadalajara, Verónica Delgadillo, ofreció un vistazo crudo a los desafíos que enfrenta su administración, particularmente la crisis hídrica y la precariedad financiera municipal.

Este tercer diálogo abierto en ocho meses de gestión—un ejercicio de transparencia ausente en otros alcaldes tapatíos—permitió abordar temas clave con franqueza. En mi intervención le recordé su compromiso de campaña, destacado en el primer debate de Quiero TV en mayo del 2024, de renovar el 20% de los 2,500 kilómetros de tuberías de Guadalajara de manera gradual, minimizando afectaciones, ante la grave escasez de agua en la Zona Metropolitana. Su respuesta, aunque esperanzadora, revela las limitaciones estructurales que obstaculizan su cumplimiento.

Delgadillo reconoció la urgencia de reemplazar redes de agua de 80 a 100 años, algunas con asbesto y otras reducidas a canaletas obsoletas, un desafío que exige 76,000 millones de pesos para una renovación integral o 13,000 millones para un mantenimiento básico.

Con un presupuesto de 12,500 millones, la alcaldesa recurrió a la metáfora de Oye Bartola de Chava Flores—“ahí te dejo esos dos pesos para la renta, el teléfono y la luz”—para ilustrar cómo los recursos apenas cubren servicios básicos, salarios de 12,000 empleados y emergencias, dejando poco para infraestructura crítica. “No hay lana para todo”, admitió, apostando por una colaboración multidecenal con el Gobierno del Estado, que prometió 8,000 millones, y citando los 12,500 millones invertidos por la administración anterior, cuya efectividad se cuestiona al no percibir resultados visibles.

Esta dependencia externa pone en duda la viabilidad de su plan. La promesa de renovación hídrica, aunque ambiciosa, choca con la realidad fiscal heredada y la falta de autonomía municipal. Delgadillo denunció una injusticia redistributiva: Guadalajara atiende a tres millones de personas—1.385 millones registrados y una población flotante—con solo 48,000 hogares pagando impuestos, logrando un 95% de recaudación, superior a Zapopan (78%) y Tlaquepaque (45%).

Sin embargo, la eliminación del Ramo 33 y Fortaseg por el gobierno federal de López Obrador ha agravado la situación, forzándola a buscar apoyo vía la Asociación de Ciudades Capitales. Su llamado a “lana extra” para recibir visitantes nacionales e internacionales (Como los que generará el Mundial de Futbol) resalta la necesidad de un cambio sistémico, pero su estrategia depende excesivamente de voluntades externas.

El símil de Bartola no es solo humor; es una crítica implícita a un modelo donde Guadalajara, motor económico de occidente, queda desprotegida. La alcaldesa puede impulsar alianzas público-privadas con incentivos fiscales y cabildeo con el Estado y la Federación, pero sin una reforma fiscal local que amplíe la base tributaria o modernice el catastro, estas medidas podrían quedar en promesas. La inversión previa en redes hidráulicas de 12,500 millones de pesos, parece haber “pasado de noche”, sugiriendo ineficiencias o mala planeación que Delgadillo debe aclarar.

Su enfoque en transparencia ofrece esperanza. Anunció un plan anticorrupción para meses próximos, con digitalización de licencias, controles y la destitución de un funcionario por irregularidades, además de multas de 2,200 pesos desde agosto para la basura, con opción a servicio comunitario. “No es recaudatorio, queremos una ciudad limpia”, enfatizó, alineando sanciones con educación cívica.

Sin embargo, estas iniciativas, aunque valiosas, palidecen ante la magnitud del reto financiero. Sin recursos frescos, el riesgo es que proyectos como la red hídrica sigan “durmiendo el sueño de los justos”.

Comparativamente, la gestión de Delgadillo enfrenta un dilema clásico: gobernar requiere más que promesas de campaña. Mientras candidatos como ella pintan escenarios optimistas, la realidad administrativa revela un rompecabezas de prioridades y limitaciones. La canción de Bartola refleja esta tensión: con “dos pesos” simbólicos, ¿cómo equilibrar nómina, servicios y obra pública?

Su apuesta por el Estado y la Federación es lógica, pero insuficiente sin presión sostenida. La Asociación de Ciudades Capitales podría ser un aliado clave, exigiendo un esquema redistributivo justo, mientras la atracción de inversión privada—por ejemplo, para redes hidráulicas—podría aliviar la carga, aunque requiere incentivos claros.

El diagnóstico de Delgadillo es acertado: Guadalajara merece más recursos por su rol nodal. Sin embargo, su justificación depende demasiado de apoyos externos, dejando en segundo plano la necesidad de autonomía fiscal. Una modernización tributaria, combinada con auditorías rigurosas y proyectos autofinanciables como el “webping Guadalajara” para recargos, podría empoderar al municipio. De lo contrario, la ciudad quedará atrapada en un ciclo de insuficiencia, donde la visión de Delgadillo—honesta pero limitada—se diluirá ante la falta de “lana”. Este análisis invita a reflexionar: ¿es suficiente culpar al sistema, o debe la alcaldesa liderar una transformación interna para desbloquear el potencial de Guadalajara?

En conclusión, la alcaldesa enfrenta un desafío monumental que trasciende su gestión. Su compromiso con la transparencia y la colaboración estatal es un paso adelante, pero la solución exige un replanteamiento nacional. Sin autonomía financiera y recursos adecuados, los rezagos hídricos y urbanos persistirán, y la metáfora de Bartola seguirá resonando como un eco de promesas incumplidas. La pelota está en su cancha y en la de los gobiernos superiores: o se actúa con estrategia, o Guadalajara seguirá siendo un gigante económico con pies de barro.

 

 

 

 

Continuar Leyendo

ENTREVISTAS

Juan Pablo Colín: El PAN en Jalisco no hará alianzas con el gobierno de Pablo Lemus

Publicado

el

Por Gabriel Ibarra Bourjac //

Para los próximos tres años, la visión de Juan Pablo Colín es transformar y convertir al Partido Acción Nacional en Jalisco en una opción rentable para el 2027, capaz de competir frente a un escenario dominado por Movimiento Ciudadano y Morena en un contexto político marcado por la polarización y los retos estructurales.

Algo tiene claro el nuevo presidente estatal del PAN: “No seremos aliados del gobierno, como lo fueron otros en el pasado. Nuestra responsabilidad es con los ciudadanos que nos votaron y con la historia del PAN en Jalisco, siendo una oposición dura, responsable y con propuestas”.

Con siete meses al frente, Colín ha enfocado su gestión en reconectar con la militancia y fortalecer la vinculación con la ciudadanía, apostando por un PAN que recupere su esencia como defensor de valores tradicionales y opción viable para el futuro político del estado. Su visión, centrada en la congruencia y la oposición responsable, busca posicionar al PAN como un contrapeso sólido frente a las dinámicas de poder actuales.

Desde su llegada al liderazgo en febrero de 2024, primero como interino y luego como presidente electo en noviembre, Colín ha trabajado en la reconstrucción interna del PAN, un partido que encontró con desafíos estructurales y de percepción ciudadana.

A pesar de estos obstáculos, destaca el ánimo renovado de la militancia, reflejado en los resultados electorales de 2024, donde el PAN recuperó distritos clave como el 8, el 10 y el 15 a nivel federal. Este impulso, según Colín, responde a una estrategia que combina la reestructuración de las bases, la modernización del partido y un discurso coherente que resuena con las demandas de los jaliscienses.

Para los próximos tres años, la visión de Colín es clara: transformar al PAN en una opción «rentable» para 2027, capaz de competir frente a un escenario dominado por Movimiento Ciudadano y Morena. Con un enfoque en la unidad interna, el fortalecimiento de estructuras y la defensa de valores como la familia, la vida y la seguridad, el PAN busca diferenciarse como una oposición firme pero propositiva.

En esta entrevista con Conciencia Pública, Colín detalla los ejes de su plan, los problemas que enfrenta Jalisco y su compromiso por recuperar la confianza de los ciudadanos, especialmente de los jóvenes, en un partido con 85 años de historia que se renueva para enfrentar los retos del presente.

HACIA LA RECONSTRUCCIÓN DEL PAN

Pregunta. ¿Cuántos meses llevas como presidente del PAN en Jalisco?
Respuesta. Desde febrero de 2024, primero como interino, y electo en noviembre. Son siete meses de trabajo intenso, reencontrándonos con la militancia tras un proceso electoral complejo en la Alianza y con candidaturas federales. Hemos procurado una reconstrucción cercana con los militantes, logrando buena sintonía, sin descuidar la vinculación con la ciudadanía, la sociedad civil organizada, el empresariado y otras organizaciones que han enriquecido nuestro trabajo.

Pregunta. ¿Cuál es tu visión como dirigente para el PAN en los próximos tres años?
Respuesta. La visión es clara: un PAN con enfoque ciudadano, despojado de las «cobijas» que lo han limitado, para ser una opción rentable para Jalisco y el país en 2027. Esto implica fortalecer la cercanía con la militancia, renovar estructuras, consolidar un discurso congruente y defender valores como la vida, la familia, la seguridad y una economía sólida. Queremos que los jaliscienses vean al PAN como el partido que cumple lo que promete, con una oposición responsable y propositiva.

Pregunta. ¿Cómo encontraste al PAN al asumir la presidencia?
Respuesta. Con dificultades estructurales y de percepción. Hay una generación que no conoce al PAN ni como oposición ni como gobierno, pero encontré un partido con mucho ánimo para la elección de 2024. Esto se reflejó en la recuperación de distritos clave como el 8, el 10 y el 15, y en la competitividad en otros como el 2. El PAN demostró ser la única oposición real frente a la 4T, lo que nos dio un impulso anímico y numérico.

FIN DE LAS ALIANZAS CON EL GOBIERNO DE MC

Pregunta. ¿Es el PAN oposición en Jalisco hoy?
Respuesta. Sí, y lo seguirá siendo. Antes, las alianzas con el gobierno y en el legislativo diluyeron esa postura, pero ahora, con Movimiento Ciudadano y Morena tejiendo acuerdos que benefician al Ejecutivo, el PAN se consolida como oposición. No seremos aliados del gobierno, como lo fueron otros en el pasado. Nuestra responsabilidad es con los ciudadanos que nos votaron y con la historia del PAN en Jalisco, siendo una oposición dura, responsable y con propuestas.

Pregunta. ¿Habrá alianzas legislativas en esta legislatura?
Respuesta. No las hay ni las habrá. Movimiento Ciudadano y Morena mantienen una dinámica de acuerdos en el Congreso que no compartimos. El PAN trabajará por Jalisco, pero siempre respetando nuestros valores y la dignidad de los jaliscienses. No hay espacio para alianzas legislativas ni electorales con un gobierno que se alía con Morena.

SER UNA OPOSICIÓN RESPONSABLE

Pregunta. ¿Cuáles son los principales ejes de tu plan para fortalecer el PAN de cara a 2024-2027?
Respuesta. Primero, renovar las estructuras con perfiles nuevos. Segundo, fortalecer la vinculación con la sociedad civil organizada. Tercero, ser una oposición responsable con propuestas. Estas tres líneas nos permiten llevar a las calles un PAN que se reconoce como buen opositor y como un partido humanista que sabe gobernar en beneficio de los ciudadanos. Queremos ser la única oposición real frente a la 4T, con una estrategia clara de reconexión ciudadana.

Pregunta. Hablas de un PAN renovado sin renunciar a sus valores humanistas. ¿Qué cambios propones para modernizarlo?
Respuesta. Además de adoptar herramientas tecnológicas, debemos entender que Jalisco ha cambiado social, cultural y tecnológicamente. No es el mismo estado que gobernamos antes. Hay una descomposición social y una normalización del crimen organizado que no podemos permitir. El PAN debe ser un bastión contra el autoritarismo de la 4T y un ejemplo de buen gobierno, defendiendo a las familias y combatiendo el estigma de la inseguridad.

REMARCA EL FIN DE LA ALIANZA CON MC

Pregunta. ¿No habrá alianza con el gobierno de Pablo Lemus?
Respuesta. No, debido a su cercanía con Morena, evidente en el Congreso. Las alianzas electorales y legislativas con Movimiento Ciudadano se acabaron. El PAN tiene un compromiso con los ciudadanos, no con el poder. Queremos ser una opción rentable para 2027, siendo congruentes y sin ceder ante el gobierno.

Pregunta. ¿Cuáles son los principales problemas de Jalisco y cómo los enfrenta el gobierno de Pablo Lemus?
Respuesta. Los problemas principales son la inseguridad, que genera un estigma y ahuyenta inversión, y la descomposición social. Económicamente, Jalisco no tiene el auge de antes por la falta de estado de derecho. Movimiento Ciudadano carece de identidad, adoptando posturas según la moda, sin una agenda sólida. Otros problemas son el transporte público, con más de mil camiones faltantes, y el abastecimiento de agua, con un SIAPA ineficiente y propuestas de aumentos de tarifas del 12% que castigan a los ciudadanos.

Pregunta. ¿Qué hacer con el SIAPA?
Respuesta. Reestructurarlo económicamente, auditarlo para identificar fugas financieras y de agua, y transparentar su gestión. El SIAPA no puede seguir siendo un bastión político. La deuda de más de 15 mil millones de pesos y la falta de calidad en el agua son problemas graves. El gobierno debe asumir su ineficiencia y no trasladar el costo a los ciudadanos.

DIÁLOGO CON EX GOBERNADORES

Pregunta. ¿Cómo está la unidad dentro del PAN, considerando el divisionismo del pasado?
Respuesta. Hoy tengo diálogo con los exgobernadores Alberto Cárdenas, Francisco Ramírez Acuña y Emilio González. La campaña de Ramírez Acuña al Senado fue un éxito. La unidad es fundamental para sobrevivir como opción ciudadana. Esta dirigencia ha reactivado a los panistas, poniendo al partido al servicio de los ciudadanos y en contra de un gobierno con el que no coincidimos. No segregamos a nadie; buscamos a todo el panismo para trabajar juntos.

Pregunta. ¿Qué estrategias impulsan para recuperar la confianza de los jóvenes?
Respuesta. Involucrar a los jóvenes en la acción política, llevándolos a las calles a escuchar a los ciudadanos, y renovar estructuras con perfiles jóvenes de 22 y 23 años. El PAN debe ser un partido moderno, sin estigmas, que promueva libertades y sea atractivo para las juventudes. Los jóvenes y las mujeres son clave para recuperar la esfera de gobierno.

Pregunta. Representas una nueva generación política. ¿Cuántos como tú han llegado al PAN?
Respuesta. Empecé en el PAN a los 21 años; hoy, a los 43, represento una generación que aprendió de ser gobierno y oposición. No disfrutamos las bondades del poder, pero enfrentamos gobiernos que buscan aplastarnos. Esta generación tiene la capacidad de llegar al gobierno con aprendizaje y responsabilidad histórica. Estamos captando a nuevas generaciones, yendo a universidades y espacios públicos, hablando su idioma y promoviendo una política humanista.

Pregunta. ¿Cómo se verá el PAN en año y medio, de cara al proceso electoral intermedio?
Respuesta. Sólido, con una estructura fuerte y candidaturas sólidas. Estamos trabajando desde ahora en acuerdos políticos y buscando líderes sociales congruentes con las necesidades de Jalisco. Seremos una oposición potente que se opone a decisiones contrarias a los ciudadanos y propone soluciones humanistas, consolidándonos como la opción real para 2027 y 2030.

¿Está usted de acuerdo en la decisión de la dirigencia del PAN Jalisco, de no hacer alianzas con Lemus?

  • De acuerdo (67%, 2 Votos)
  • En contra (33%, 1 Votos)
  • Me da igual (0%, 0 Votos)

Votantes totales: 3

Cargando ... Cargando ...

 

Continuar Leyendo

Tendencias

Copyright © 2020 Conciencia Pública // Este sitio web utiliza cookies para personalizar el contenido y los anuncios, para proporcionar funciones de redes sociales y para analizar nuestro tráfico. También compartimos información sobre el uso que usted hace de nuestro sitio con nuestros socios de redes sociales, publicidad y análisis, que pueden combinarla con otra información que usted les haya proporcionado o que hayan recopilado de su uso de sus servicios. Usted acepta nuestras cookies si continúa utilizando nuestro sitio web.