NACIONALES
¿Una fractura más?: El PRI decide la reforma eléctrica y su futuro

Crónica de Pacheco, por Daniel Emilio Pacheco //
Las cosas para el PRI Nacional, en especial para su Presidente Alejandro Moreno, se han complicado al interior, luego que, el Presidente López Obrador envió a la Cámara de Diputados una iniciativa para reformar la Constitución en materia de energía eléctrica.
La reforma energética del lopezobradorismo plantea, según sus datos, el fortalecimiento de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) otorgándole 54% del mercado eléctrico nacional, dejando el restante (46%) a empresas privadas.
La reacción ante la reforma eléctrica de López Obrador, por parte del Presidente nacional del PRI, “Alito”, fue para muchos priistas bastante ambigua y para los integrantes de la coalición opositora “Va por México” un intento de negociar por parte de Alejandro Moreno con el gobierno federal.
“Para determinar si los cambios propuestos por el gobierno federal nos darán mayor bienestar, es necesario analizar de manera pública qué se pretende”.
“No basta con que ellos nos den su verdad, a menudo tienen “otros datos” y con el futuro energético del país no es un tema menor. Puede jugar. Se requiere un diálogo abierto con el gobierno, pero también con especialistas, cámaras empresariales y, en general, con toda la iniciativa privada. Nadie debe de estar excluido de un debate tan relevante para México”.
“El PRI es muy enfático en buscar este diálogo basado en la evidencia técnica. Para ello, habrá que analizar el texto propuesto y el marco regulatorio, así como la realidad del sistema eléctrico nacional a siete años de la adopción de un enfoque pro-competencia en la generación de electricidad”, escribió Alejando Moreno en su columna periodística.
El no haber mostrado un rechazo enfático a la reforma eléctrica que López Obrador propone, ha generado más presión al liderazgo de Alito desde dentro del propio tricolor, algunos priistas ya rechazaron públicamente dar su apoyo a la propuesta presidencial que, significaría eliminar gran parte de la reforma energética realizada por Enrique Peña Nieto en 2013 con el apoyo total del priismo que la presumía como un gran logro.
OPOSICIÓN DE PRIISTAS
Una de las primeras voces priistas criticas es la senadora Claudia Ruiz Massieu, expresidenta del partido y exfuncionaria federal en el gabinete de Peña Nieto; la senadora Ruiz Massieu ya desde la palestra del Senado Mexicano hizo público su rechazo al proyecto del gobierno de la 4T.
“Es un retroceso. No es lo que el país requiere en materia de desarrollo. Vamos a tener apagones, aumento en las tarifas, menos empleo, menos crecimiento económico, además de un cúmulo de litigios de inversionistas y de Estados con los que tenemos acuerdos de libre comercio y de inversión. No es una ley que nosotros podamos respaldar así”, adelantó Claudia Ruiz Massieu.
Luego que se manejara una posible ruptura de la coalición “Va por México” debido al posible apoyo del PRI a la reforma de López Obrador, el coordinador del tricolor en San Lázaro y presidente de la Junta de Coordinación Política, Rubén Moreira, tuvo que salir a asegurar que no existe una división con sus aliados PAN y PRD.
“No (será un rompimiento) porque lo vamos a debatir públicamente, porque además nosotros no hemos dicho que vamos, lo que estamos diciendo es que se debata, que no quede duda, que no se diga como en el pasado que los votos tuvieron la influencia del poder y que no fueron sanos, en lo oscurito”, dijo el viejo político priista.
Moreira aseguró que su partido buscará que todo lo referente a la reforma eléctrica sea tratado por medio de parlamento abierto: “si no hay parlamento abierto, con debate profundo de los actores económicos y políticos de este país, no hay condiciones para llegar a una votación”.
“No se vale que cada sexenio haya una reforma o se intente reformar la Constitución en esto rubros porque ni se garantiza la inversión ni se le da certeza al país, ni los actores políticos quedan conformes, esa es nuestra postura” dijo Rubén Moreira y rechazó algún tipo de acercamiento para negociar con el Gobierno Federal.
La priista más critica hasta el momento es Nallely Gutiérrez, quien enfrenta dos peticiones de expulsión del PRI, una por apoyar a candidatos de otros partidos políticos y otra más por la toma de las instalaciones nacionales del partido.
Para Nallely Ileana Gutiérrez Gijón, las declaraciones de Alejandro Morena que no rechazan abiertamente la reforma eléctrica de López Obrador se preveían, pues desde hace meses “se veía subsumido a Morena”.
Lo que no se debe olvidar es que, la mayoría de los señalados como posibles candidatos a enfrentar la amenaza de procesos penales, tienen fuero.
La reforma eléctrica que pretende el Presidente López Obrador, por tratarse de una reforma a la Constitución, requiere ser aprobada por mayoría calificada de votos, es decir, necesitan la aprobación de al menos 333 diputados federales y 85 Senadores; entonces, a Morena le faltan 56 votos en la Cámara baja y 18 en el Senado para asegurar la aprobación de la propuesta referida.
Estamos pues, ante la primera gran batalla política del sexenio de López Obrador, para conseguir la aprobación de su reforma eléctrica, el presidente debe negociar los apoyos que necesita, pues ya no es más el hombre fuerte de hace unos meses.
Aquí es donde el PRI puede lograr en verdad mostrar su influencia como partido de oposición, pues privilegiar el voto en contra le aporta más que un voto dividido.
La presión vía gobernadores priistas no será significativa, pues solo tiene cuatro gobernadores Oaxaca, Estado de México, Hidalgo y Coahuila.
El gobernador de Coahuila, con 8 diputados, ya se manifestó en contra de la reforma, el gobernador de Oaxaca, con 2 diputados, apoyará la reforma lopezobradorista, los otros dos están por decidir, pero solo el Estado de México tiene una bancada significativa con 14 diputados, Hidalgo con 4 diputados.
Uno de los pocos logros del PRI en las pasadas elecciones, fue la recuperación de diputaciones federales pasó de 40 a 71 diputados, para ello, su oferta política fue la de ser un contrapeso del gobierno a través de una coalición opositora.
Las voces dentro de la coalición opositora “Va por México” están presionando para que el PRI decida y rechace la reforma eléctrica.
Jesús Zambrano, líder nacional del PRD, considera que el Presidente López Obrador busca fracturar al PRI y hacerlo doblegar en sus compromisos como oposición.
“El PRI habrá de decidir, por supuesto autónomamente, cuál va a ser su posición. Nosotros desde el PRD y desde la coalición legislativa Va por México esperaríamos que el PRI se mantuviera firme y no doblara las manos y no se dejara presionar.
Hicimos un compromiso para ir juntos, la gente votó por esta coalición y yo espero que el PRI honre a la colación y a los partidos que la suscriben”, sentenció Zambrano.
Para Héctor Larios, el secretario general en funciones de presidente en el PAN, el PRI, dirigido por Alejandro Moreno, debe actuar en congruencia con la reforma constitucional que ellos mismos promovieron y apoyaron en 2014.
“Hasta ahorita no ha habido una posición clara del PRI. Me parece que hacerlo (aprobar la reforma) los haría quedar bien con el presidente pero mal con el resto del país porque las consecuencias serían regresivas.
Si el PRI decide apuntalar la reforma del presidente es totalmente absurdo iluso intentar mantener un acuerdo con ellos”, señaló Héctor Larios.
Así pues, dividido internamente y muy mermado en su poder territorial, el PRI tendrá que decidir con su apoyo o rechazo a la propuesta eléctrica de López Obrador, no solo el futuro eléctrico del país, sino también su futuro político como partido.
En Twitter: @DEPACHECOS
NACIONALES
México busca frenar autos asiáticos con arancel del 50%

– Por Redacción Conciencia Pública
El Gobierno de México anunció su intención de imponer un arancel del 50 por ciento a los automóviles importados de países asiáticos sin tratados de libre comercio, como China, India, Corea del Sur, Tailandia e Indonesia.
La medida, que representa un salto desde el 20 por ciento actual, busca frenar la entrada masiva de vehículos de bajo costo que, según autoridades federales, ponen en riesgo la competitividad de la industria automotriz nacional.
El anuncio forma parte de un paquete de reformas arancelarias que pretende abarcar importaciones por alrededor de 52 mil millones de dólares.
Además de los automóviles, se contempla aplicar nuevos gravámenes de entre el 10 y 50 por ciento a productos como acero, textiles, motocicletas y juguetes. De acuerdo con la Secretaría de Economía, la estrategia busca proteger más de 325 mil empleos vinculados directamente con el sector automotriz y manufacturero en el país.
La iniciativa surge en un contexto de presiones internacionales. Estados Unidos ha insistido en que México reduzca su dependencia comercial de China, en el marco de la revisión del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC). Washington considera que el ingreso creciente de autos eléctricos chinos, ensamblados a precios muy por debajo del mercado, amenaza con desestabilizar la cadena de valor regional que sostiene al acuerdo trilateral.
El Gobierno de México justifica la medida en el terreno de la defensa comercial, argumentando que los vehículos provenientes de Asia están siendo vendidos por debajo de los precios de referencia, lo cual constituye una práctica desleal.
El arancel del 50 por ciento es el máximo permitido por la Organización Mundial de Comercio (OMC) y colocaría a México como uno de los países más restrictivos frente a las importaciones automotrices chinas.
No obstante, la propuesta aún debe pasar por el Congreso de la Unión, donde se espera un intenso debate entre los defensores de la industria nacional y quienes advierten que un aumento de esta magnitud podría repercutir en la inflación y en el bolsillo de los consumidores.
Aunque el partido en el poder cuenta con mayoría, especialistas prevén que habrá presiones de distintos sectores empresariales antes de que se concrete la votación.
De aprobarse, los nuevos aranceles modificarían de manera sustancial el mercado automotriz en México, elevando los precios de las marcas asiáticas y obligando a las armadoras a replantear sus estrategias de inversión y distribución.
Para el gobierno, se trata de una medida necesaria para proteger a la industria nacional; para los críticos, una apuesta arriesgada que podría tener costos económicos y políticos de gran alcance.
MUNDO
TMEC enfrenta nubarrones económicos: riesgo de estanflación en la región

– Por Redacción Conciencia Pública
La economía de los países del TMEC —Estados Unidos, México y Canadá— atraviesa un escenario de creciente incertidumbre marcado por la desaceleración del crecimiento y las presiones inflacionarias.
Aunque ninguno de los tres socios comerciales ha entrado oficialmente en un proceso de estanflación, los riesgos de caer en este fenómeno se han intensificado en los últimos meses debido a las tensiones comerciales, las tarifas arancelarias y el enfriamiento de la actividad productiva.
En el caso de Estados Unidos, analistas y organismos internacionales han señalado la presencia de un entorno conocido como “stagflation-lite”: una versión leve de estanflación caracterizada por inflación persistente y crecimiento económico débil.
Las tarifas impuestas a México, Canadá y otros socios han encarecido bienes y servicios, lo que eleva los precios al tiempo que limita la competitividad. La Reserva Federal ha reconocido la complejidad del momento, pero evita hablar de una estanflación plena como la de los años setenta.
Canadá enfrenta también un panorama complicado. Su crecimiento económico se ha frenado y diversos sectores productivos anticipan pérdidas importantes debido a los aranceles de Washington. Medidas de emergencia como el programa “Buy Canada” buscan proteger empleos y mitigar el impacto en la industria automotriz y energética, aunque las proyecciones apuntan a la posible pérdida de decenas de miles de empleos si las tensiones comerciales se prolongan. La inflación no ha escalado con la misma fuerza que en Estados Unidos, pero el riesgo de estanflación no se descarta.
México, por su parte, lidia con un crecimiento prácticamente nulo, con estimaciones de apenas 0.4 % del PIB en 2025, lo que coloca al país al borde de la recesión. A diferencia de sus socios, la inflación mexicana se ha mantenido moderada, en torno al 3.5 % anual, dentro del rango objetivo del Banco de México.
No obstante, la combinación de bajo dinamismo económico y presiones externas genera preocupación. El banco central ha optado por recortar tasas de interés en un intento de estimular la economía sin perder el control inflacionario.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y otros organismos han advertido que la política de tarifas en Estados Unidos está generando un “shock de oferta” que afecta no solo al propio mercado estadounidense, sino también a Canadá y México.
El encarecimiento de insumos y bienes intermedios repercute en las cadenas de suministro de la región, golpeando la inversión y elevando los costos para las empresas y consumidores.
En conjunto, el TMEC enfrenta un escenario de alto riesgo: crecimiento bajo, tensiones comerciales y presiones inflacionarias que ponen en entredicho la estabilidad económica regional.
Aunque la estanflación no se ha instalado de manera formal, la combinación de factores actuales mantiene a los tres países al filo de este fenómeno, lo que obliga a sus gobiernos y bancos centrales a buscar estrategias coordinadas que eviten repetir una crisis como la de los años setenta.
👉 Este cuadro ayuda a visualizar rápido que ninguno de los tres socios está formalmente en estanflación, pero todos enfrentan presiones distintas: EE. UU. por inflación, México por bajo crecimiento y Canadá por el impacto de las tarifas arancelarias impuestas por Donald Trump:
JALISCO
El gobernador Pablo Lemus y los alcaldes de Tlaquepaque y Tlajomulco acuden a reunión de seguridad en Palacio Nacional

-Por Redacción Conciencia Pública
El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro; el titular de la Secretaría de Seguridad, Juan Pablo Hernández; el Fiscal del Estado Salvador González de los Santos; así como el alcalde de Tlajomulco Gerardo Quirino y la alcaldesa de Tlaquepaque Laura Imelda Pérez, estuvieron presentes esta mañana en Palacio Nacional para compartir las acciones que se han venido implementando en el estado en materia de seguridad.
Lemus compartió en un video que: «En coordinación con los tres niveles de gobierno, Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, seguimos trabajando para que las y los jaliscienses tengan una entidad con mayor seguridad y un tejido social reforzado».