Connect with us

OPINIÓN

Estabilidad para mejorar

Publicado

el

Opinión, por Miguel Ángel Anaya Martínez //

Para lograr un buen nivel de vida y sobre todo la realización personal, cada individuo tiene su camino, sus ideales y sus circunstancias, sin embargo, una condición básica para lograrla es la estabilidad.

La estabilidad la podemos entender en distintos ámbitos, estabilidad emocional es la capacidad de gestionar los sentimientos, emociones y vivencias diarias de una manera positiva; estabilidad financiera se entiende como la solvencia económica en el corto y largo plazo; la estabilidad familiar se refiere a que el núcleo social en el que nos desenvolvemos promueva el bienestar de sus miembros y así podemos seguir.

Si esto aplica en la individualidad es evidente que la receta para lograr el desarrollo social debe incluir el ingrediente de la estabilidad y aquí es donde se comienza a complicar el asunto.

Según el filósofo Zygmunt Bauman vivimos en una sociedad líquida, donde todo es pasajero, donde los valores se modifican y las ideas, gustos e intereses cambian de un momento a otro y fluyen en distintas direcciones, en una actualidad así es complejo encontrar la estabilidad.

La estabilidad social se pierde por distintas razones, primeramente, observemos el pilar de la sociedad: la familia. Más allá de la definición de una familia tradicional o moderna, se tiene que observar que en muchos casos el tejido de las familias mexicanas se encuentra roto, ya sea por la ausencia del padre o madre o por la necesidad de que el jefe o jefa de familia tengan que trabajar todo el día, dejando la educación de los hijos en segundo plano, los educadores entonces se vuelven las redes sociales y las plataformas de internet con todo tipo de contenido. Los referentes de los menores se convierten en aquello que los menores puedan observar desde la pantalla de la televisión o celular.

Hablando de empleo habrá que decir que los mexicanos trabajamos y trabajamos mucho, pero esto no quiere decir que el mexicano promedio tenga estabilidad financiera. Diversos estudios señalan que los trabajadores de este país no están preparados financieramente para enfrentar algún imprevisto, la mayoría viven al día y una contingencia de salud o una afectación material hacen desequilibrar al 80% de los mexicanos, por consecuencia se pone en predicamento el bienestar familiar pues la falta de ingresos lleva a menores a buscar empleo a muy temprana edad, abandonado sus estudios por trabajos mal remunerados o sin seguridad social, este tema es muy preocupante.

Para los que somos millennials el único tema estable que hemos vivido ha sido el de la crisis económica, las crisis financieras nos han acompañado desde que tenemos uso de razón, recordamos la crisis del 94 con el famoso error de diciembre, el FOBAPROA unos años después, la crisis financiera internacional del 2008 y actualmente la recesión que se avecina después de casi tres años de la aparición del COVID, con estas condiciones a una persona de clase media o baja le resulta prácticamente imposible hacerse de una casa o bienes que le otorguen tranquilidad, así el círculo de la inestabilidad se hace más y más grande.

La inestabilidad social y las crisis económica nos han llevado a un nivel de violencia inimaginado, a normalizar actos atroces y por consecuencia a bajar drásticamente el nivel de vida de los mexicanos. La única salida posible de este círculo vicioso es que México genere condiciones que le permitan a las y los ciudadanos retomar la unión familiar, cuidar ciertos valores, cultivarse, educarse y generar nuevas condiciones para los que hoy estamos y para los que vienen.

Para lograr lo anterior hay cosas que les corresponden al gobierno como brindar servicios de salud pública de calidad, transporte eficiente para aminorar tiempos de traslados de los estudiantes y trabajadores, procurar trámites eficientes para fomentar la inversión, etc.

Pero, como ciudadanos debemos activarnos más, exigir mejores condiciones laborales y mayor seguridad, crear comunidades que nos permitan generar redes de apoyo con valores entendidos que sean puntos de encuentro para todos, involucrarnos, ser empáticos con los demás, no abusar de las necesidades del otro. Si fomentamos estas acciones encontraremos cierto equilibrio social que nos permita avanzar como comunidad, de otra manera será prácticamente imposible retomar el rumbo.

Continuar Leyendo
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Copyright © 2020 Conciencia Pública // Este sitio web utiliza cookies para personalizar el contenido y los anuncios, para proporcionar funciones de redes sociales y para analizar nuestro tráfico. También compartimos información sobre el uso que usted hace de nuestro sitio con nuestros socios de redes sociales, publicidad y análisis, que pueden combinarla con otra información que usted les haya proporcionado o que hayan recopilado de su uso de sus servicios. Usted acepta nuestras cookies si continúa utilizando nuestro sitio web.