JALISCO
Afinación, sí, verificación, no
Agenda Política, por Alberto Tejeda //
Este es el lema de miles de personas que han demostrado su rechazo a la medida implementada por el Gobierno de Jalisco que pretende que todos los automotores de uso particular que circulan en el estado cumplan con este trámite, que por cierto ha causado molestia en la inmensa mayoría de propietarios de vehículos, no solo por el hecho de tener que ir a verificar su coche, sino por lo engorroso y hasta absurdo que resulta el proceso en los centros de verificación para realizar el trámite.
Por que en realidad la gente no se niega a realizar el tramite con todo lo que implica, pagar, pedir permiso para faltar unas horas a sus trabajos para esas mismas horas perderlas en los centros de verificación, para al final les digan que su coche no paso. Así de frustrante resulta.
Si bien es cierto que la calidad del aire en la ciudad va empeorando cada vez más, también lo es que la solución no es la verificación, pues los vehículos particulares no son en su mayoría el principal factor de la mala calidad del aire, si son los de mayor volumen porque son mayoría, pero no los más contaminantes, quienes mas contaminan son autobuses de transporte público y tráileres de carga, pero también y aun mas las industrias asentadas en la ciudad, por ejemplo las que se encuentran en la zona de Miravalle, sin mencionar el álamo industrial.
Pareciera que de nuevo, como ha sucedido por décadas la verificación es solo un pretexto para justificar la recaudación en nombre de la ecología, solo que ahora es mas agresivo para con los ciudadanos, en anteriores sexenios la verificación se realizaba en talleres autorizados, donde estos tenían que ser certificados por el Gobierno de Jalisco, adquirir equipos de medición de emisiones, realizar las pruebas y si el coche no pasaba la prueba de emisiones se le hacia saber al propietario la falla y la posible solución, misma que se podía realizar en ese mismo taller o en el de preferencia del propietario de la unidad, pero esto también trajo problemas y fue que algunos pocos malos dueños de estos talleres autorizados vendían los hologramas sin realizar las pruebas correspondientes y esto derivo en diversas investigaciones y clausuras. Con el tiempo el programa fue olvidado se le dio tranquilidad económica a los automovilistas.
Se retomo en este sexenio de forma acelerada, pero con otro modelo, uno totalmente totalitario, donde a diferencia de modelos anteriores donde se autorizaba a talleres certificados para realizar las pruebas, ahora es solo una empresa la que realiza dichas pruebas. Esto no solo creo un monopolio de control sobre este rubro sino que además la saturación obvia de estos centros al ser los únicos autorizados por la bendición del gobierno de Jalisco para realizar las pruebas. Como dice la frase “gracioso, pero no gracioso de risa, gracioso de raro”.
Según han denunciado quienes han acudido a realizar la verificación de su vehículo mencionan que primero comienza una “revisión visual”, así nomás, a ojo de buen cubero, si el coche en cuestión le parece a simple vista que esta en buen estado a quien realiza esta prueba, pasa al siguiente nivel, ahí viene lo difícil, una revisión minuciosa, revisan todo, peor que como si lo fueras a vender a una persona altamente exigente, pero en ningún momento realizan la prueba para lo que están ahí, la prueba de emisión de gases. Solo descartan coches por criterio propio y eso es lo que ha generado molestia entre contribuyentes pues es imposible pasar una prueba así. Hasta coches nuevos y premium no han pasado la prueba. Es totalmente absurdo.
¿Que van a hacer con los coches que no pasen la verificación que son la inmensa mayoría? Deberían autorizar para que talleres certificados realicen pruebas de verificación y no sea solo una empresa quien lo haga monopolizando el tema. ¿A donde va a parar el dinero de la verificación, al casco de checo Pérez? Porque a la primavera queda claro que no.
Si el Gobierno de Jalisco realmente quiere hacer algo por la ecología y el medio ambiente deberían entonces meter en cintura a las empresas que contaminan el aire y el rio Santiago, un problema añejo, pero también exigir que unidades de transporte publico sean actualizadas, por eléctricas, ya que además se les subsidia con dinero público. El GobJal, debería de reducir su flotilla vehicular en un 90% reduciendo costos además, pero sobre todo deberían de prohibir nuevos fraccionamientos y desarrollos en el bosque de la primavera que cada año se quema por casualidad. Es un tema de voluntad política, pero la verificación es un tema de recaudación. afinación, Si. verificación, No!
