JALISCO
De Alfaro a Lemus: De la soberbia a la humildad
– Los Juegos del Poder, por Gabriel Ibarra Bourjac
¿Qué resaltar del Primer Informe de Pablo Lemus como gobernador de Jalisco?
Me voy por el aspecto humano, el de ser sensible y empático con el dolor que deja la ausencia de un ser cercano que un día de buenas a primeras ya no volvimos a ver, un sufrimiento que han vivido y viven miles de familias en Jalisco en los últimos años.
Al cumplirse once meses de haber asumido la alta responsabilidad de gobernar Jalisco, con el Hospicio Cabañas como escenario de fondo, Lemus Navarro, inició su mensaje reconociendo de inmediato la crisis humanitaria de las desapariciones en Jalisco —el estado con el mayor número de casos en México, superando las 15,000 personas no localizadas según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas (RNPD) al cierre de 2024.
Este gesto inicial, no fue retórico: presentó a líderes de colectivos como Luz y Esperanza, FUNDEJ y por Amor a Ellas, con quienes su administración ha establecido mesas de trabajo permanentes. «Solos no podíamos», admitió Lemus, enfatizando la colaboración como pilar de su gestión.
Esta inclusión contrasta con eventos que distinguieron la actitud de Alfaro como gobernador y su relación de confrontación con familiares de desaparecidos, donde las protestas de estos eran minimizadas o incluso reprimidas, como en el apagón de luces durante manifestaciones en Casa Jalisco en 2022, interpretado como un intento de «incomodar» a los inconformes.
Un acierto de Lemus al calificar al aceptar públicamente la magnitud del problema y la deuda histórica que se tiene con las familias de desaparecidos, un gesto de humildad que no es muy propio en los políticos de ayer y de hoy al no evadir la realidad —»es el problema más grave que vive Jalisco y está aún lejos de resolverse»—, sino que la asumió con empatía, reiterando disculpas a las familias y comprometiéndose a «pagar una deuda histórica».
En un estado marcado por la violencia del narcotráfico, esta vulnerabilidad pública genera legitimidad, especialmente ante un público diverso que reconoció y aplaudió el gesto.
CONTRASTE CON ENRIQUE ALFARO
Es importante hacer un paralelismo entre Alfaro y Lemus en torno a la posición de ambos sobre esta terrible y dolorosa herida que tiene Jalisco. El antecesor en Casa Jalisco acumuló críticas por su intolerancia al disenso.
Mientras Lemus dialoga, Alfaro «se ofuscaba» ante protestas, recriminando a las víctimas como «personas movidas» por intereses externos y negando la magnitud de las desapariciones —en marzo de 2022, suspendió reportes al RNPD, borrando más de 1,200 casos para «corregir cifras nacionales», lo que académicos como el exrector de la UdeG, Víctor Manuel González Romero, denunciaron como manipulación.
Bajo Alfaro, Jalisco reportó oficialmente 6,721 desaparecidos, pero registros internos indican 9,329 no localizados, con un pico de 1,123 casos solo en los primeros cuatro meses de 2025, heredados a Lemus.
Esta «arrogancia» no solo erosionó la confianza social, sino que polarizó al gobierno con la federación. Lemus, en cambio, proyecta una «actitud positiva aunque sencilla y fresca», priorizando el diálogo sobre la defensiva.
El informe, aunque largo (duró cerca de dos horas), fluyó con naturalidad, evitando los monólogos interminables de informes pasados.
RECURSOS Y REFORMAS PARA LA JUSTICIA Y LA SEGURIDAD
Si las palabras no van acompañadas por la acción, es discurso barato y en este contexto en esta administración hay un incremento presupuestal del 172% para 2026 en el Sistema Forense de Búsqueda e Identificación de Personas Desaparecidas, la creación de la Secretaría de Inteligencia y Búsqueda, incluyendo apoyo al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), la Comisión de Búsqueda y la Fiscalía Especializada. Estos recursos —anunciados con transparencia— responden a demandas de colectivos y marcan un avance tangible: en los primeros 11 meses de Lemus, se identificaron 200 restos humanos, un 30% más que en el mismo periodo de 2024.
Además, el Congreso local, a petición del gobernador, reconoció a los familiares como «grupo vulnerable», facilitando acceso a apoyos sociales.
En seguridad, Lemus respaldó sus afirmaciones con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP): reducción del 62% en homicidios dolosos (de septiembre 2024 a 2025), 70% en robo de vehículos y 85% en robo de carga.
Aunque críticos señalan que las desapariciones persisten (570 casos en los primeros tres meses de 2025, con solo 31 reportados federalmente), como estos logros en delitos patrimoniales reflejan una coordinación efectiva con municipios y la federación, posicionando a Jalisco como «menos inseguro» que hace un año.
LLAMADOS A LA UNIDAD
El informe trascendió lo local con mensajes estratégicos. Lemus lanzó un «llamado respetuoso» a las fuerzas políticas en el Congreso estatal para aprovechar la reforma judicial federal y crear «el mejor poder judicial del país», un guiño a la agenda de Claudia Sheinbaum que fue aplaudido por todos los bandos.
En lo federal, Lemus celebró la «buena relación» con Sheinbaum, destacando a César Yáñez (subsecretario de Gobernación) como «gran interlocutor». Jalisco, con su peso económico (tercer PIB estatal), ha recibido respuestas positivas en salud (apertura de IMSS-Bienestar) y movilidad (avances en la Línea 4 del Tren Ligero, retrasada dos años bajo Alfaro).
Lemus pidió transmitir a la presidenta: «Jalisco está listo para trabajar en unidad, porque no solo Jalisco merece unidad, México la necesita».
Este tono conciliador fortalece la posición de MC en un contexto nacional dominado por Morena.
UN ESTILO DE HUMILDAD Y RESULTADOS
La esencia de un informe que, más que un recuento de logros, es un acto de recomposición social. Lemus, con su «sencillez y frescura», no solo busca cerrar heridas abiertas por la era Alfaro —de negación y confrontación—, sino que siembra bases para una gobernanza inclusiva.
Sin embargo, el verdadero desafío radica en traducir la humildad en resultados sostenibles: erradicar las desapariciones requiere más que presupuestos; exige justicia sistémica y erradicación de la impunidad.
En un Jalisco polarizado, este informe emerge como un faro de esperanza, pero su éxito se medirá en el terreno, no en el aplauso. Es de valorar y subrayar lo importante es recomponer gobernando con humildad y sencillez.
