CULTURA
Crónicas de un Trotamundo: A Venecia…el mundo sigue girando en su espacio infinito
Por Fernando Zúñiga //
Decidí dormir sobre la amplia banqueta del Correo Mayor. Éramos unos 10 o 12 huéspedes en la fila pegados a la pared. Algunos ya estaban a pleno sueño cuando tendí mis periódicos en la hilera. Era una noche algo fría.
Me levanté como a las 2 de la madrugada para orinar en el canal. Un hombre fumaba sentado al filo de la banqueta muelle.
Jean Pierre me ofreció un Gitanes, lo acepté, en esa época yo fumaba. También me convidó un trago de coñac de su pequeña cantimplora (le comenté que en México le nombramos nalguera).
…nací en Lille, mi madre murió a mis 14 años de edad, fui hijo único, mi padre había luchado en la Resistencia…
…ingresé al seminario a los 16 años. Al principio mantuve cierto grado de escepticismo pero en general la pasaba bien. El ambiente del internado, mis compañeros, los guías espirituales me gustaban. Durante varios años veía a mi padre solo unas semanas al año…
…Un verano, a mis 25 años, pasé 2 semanas en casa de mi papá, que ahora vivía en París desempeñando un puesto en el Gobierno, que se ganó por sus servicios a la Patria durante la Guerra…
…conocí a Paulette, la esposa de mi padre, era unos 10 años mayor que yo…me enamoré rotundamente de ella…
…regresé al seminario y ya no fue lo mismo. Durante un año sufrí en silencio…llamaba a casa de mi padre con frecuencia esperando saber de Paulette o por lo menos escuchar su voz, confirmar que me recordaba, que me tenía presente en sus pensamientos…
…me atormentaba por igual escucharla unos minutos como el que no contestara ella directamente o que mi padre me comunicara que ella no estaba en casa en ese momento…me imaginaba mil cosas que me atormentaban…
…empecé a escribirle cartas que ella respondía casi de inmediato. Un año transcurrió así. A partir de entonces empecé a confesarle mi sentimiento hacia ella. Al principio lo tomó “será algo pasajero“…”la estaba idealizando con la imagen materna”…”la ausencia de alguna mujer en mi vida por los mismos requerimientos de la religión”…
…después ya no contestaba ni el teléfono ni mis cartas…
…platiqué por fin mi sufrimiento con mi guía espiritual, un sacerdote viejo, un hombre sabio, que me aconsejó darme a mí mismo un tiempo y profundizar en la disciplina espiritual con más rigor. Me contactó con un psicólogo amigo suyo y me prometió discreción con los superiores hasta que yo empezara a aclarar y acallar mi alma…
…pasaba el tiempo y el psicólogo no me servía para calmar mi ansiedad…
…empecé a ir a prostíbulos y me desahogaba con alguna mujer, en ocasiones con algo de violencia en el acto sexual…
…me compraba botellas de vino que introducía a mi cuarto en el seminario…
…el Padre Raymod, así se llamaba, me aconsejó ir a París y hablar directamente con la esposa de mi padre…
…Paulette no se encontraba en la ciudad ya que visitaba a su madre y una hermana en *Rouillac, regresaría en 3 días…
…la ocupación de mi padre me permitía verlo solo unos minutos durante el día, además me daba vergüenza encararlo y lo evitaba lo más posible…
…estuve bebiendo, atormentado, la oración no funcionaba, rechacé ir a alguna iglesia, me quedaba en un bar y regresaba ya por la madrugada a casa…
…fingí dormir hasta tarde la mañana que Paulette llegó a casa, esperando que mi padre se retirara a su trabajo…
…unas horas después, sin ducharme sin cuidar mi aspecto y mi vestimenta encontré a Paulette en la mesa de la cocina…la saludé fríamente, me serví una copa de Coñac, le ofrecí una a Paulette que me la aceptó con agrado…aunque yo percibía su extrañeza por mi aspecto descuidado…ella ya estaba enterada, por mi padre, de mi presencia en casa…
…me senté de frente a ella, guardamos silencio durante largos minutos, un silencio tenso para mi…sin embargo en Paulette había cierta calma e incluso calidez…yo la veía bellísima…
…no escuché lo que me dijo, yo estaba aturdido, desconectado…solo recuerdo que rechacé su ofrecimiento de algo, no supe de que…hasta la fecha no sé que me ofreció en aquel momento…
Jean Pierre empezó a vagabundear, su padre le depositaba una renta suficiente para sufragar sus gastos básicos.
Los últimos 10 años de su vida había tenido altibajos; novias que lastimó; pueblos que lo expulsaron; noches de cárcel; tocar fondo; enfermedad venérea; bares; prostíbulos; peleas; Casablanca; Calcuta; Hong Kong; Shangai….barcos, trenes, carreteras…
Había recibido un telegrama de Raymond, el cual nunca contestó.
Colgó el teléfono sin contestar en varias ocasiones que se animó a llamar a casa de Paulette. Hizo lo mismo cuando llamó al Seminario.
A mis espaldas, en fila, pegados a la pared del Correo Mayor de Venecia, dormían varios jóvenes veinteañeros como yo…soñando…ignorando historias de vida como la de Jean Pierre o quizá intuyendo amores y desamores en su futuro…avenir…Zukunft … toekomst … todhchaí …fremtid …mientras elmundosiguegirandoensuespacioinfinito.
TANNNG….TANNNG…..TANNNG….desde la Basílica de San Marcos, amanecía sobre Venecia aquel verano del ´71.
* Rouillac es una ciudad principal del cantón occidental del departamento de Charente, ubicado a 22 km al noreste de Cognac y 22 km al noroeste de Anguleme, a la orilla derecha del río Charente.
FZG GUADALAJARA VIII/2016
