ENTREVISTAS
La misión de Damasco A.C.: Darles alimentos a la gente enferma
Por Diego Morales Heredia //
Dicen que no hay mejor dicho que panza llena, corazón contento. Esa es su meta, que todo ser humano tenga un plato de comida y cumplir con la agenda 2030 de cero hambre. Es la noble labor que hacen en “Damasco”, organización fundada por Edgar Emiliano Chávez, que significa dar más con el corazón.
Esta organización civil sin fines de lucro apunta a los sectores más desprotegidos, por ello, entre sus actividades está el llevar alimento a los familiares de los pacientes de los hospitales civiles de Guadalajara, lo cual han ido aumentando los apoyos gracias a las voluntades que se unen a la causa.
“Estamos enfocados a la agenda 2030 en la cual consiste en cero hambre, una de nuestras labores es darles alimento a personas enfermas y sus familiares en el Hospital Civil de Guadalajara. Esa es nuestra misión de todos los días, para que esto suceda, tenemos otros apoyos los cuales consisten en la homeopatía, psicología, trabajo social, ropa, entre otros servicios que van saliendo. La mayor parte de la población son personas foráneas, que muchas son de comunidades indígenas”, dice Edgar Emiliano Chávez.
Subraya: “Nuestro comedor funciona a base de voluntariado. Hay persona en cocina, en salud, en lo social, depende las cualidades y habilidades de los voluntarios es donde se integran al programa. Nosotros no tenemos empleados, porque buscamos que su mayor número de veces el apoyo sea en especie, en manos y corazón, traes el apoyo en especie o si quieres apoyar con tu tiempo en nuestro espacio, vienes a nuestra asociación y le destinas el tiempo a esta labor social”.
Para el fundador y representante legal de Damasco, Edgar Emiliano Chávez, es importante generar una red de apoyo, por eso resalta las alianzas que han logrado con otras asociaciones civiles para darles más ayuda a los más desprotegidos.
«Contamos con algunas alianzas, una de las más grandes es la casa hogar para niños huérfanos, rescatados de algún núcleo familiar, que sus padres viven alguna condena en la cárcel, madres prostitutas o que la calidad del infante no es la óptima, es de las alianzas fuertes, donde apoyamos con psicólogos, homeópatas, voluntarios que preparan alimento».
«También tenemos la alianza con mujeres con cáncer, como el 10 de mayo, donde cada padrino lleva a una mujer con cáncer a un restaurante, se sienta con ella, está el mariachi, los regalos, el pastel, hay personas que en todo su tratamiento no pueden tener acceso a este tipo de cosas y hacemos que pasen un grato momento».
El noble proyecto nace con la experiencia adquirida en otros países y aunque se hacen diversas actividades como apoyo a comunidades, la base está en que ningún ser humano padezca hambre, considerándolo como un derecho humano básico y elemental.
“Esto nace viendo la necesidad de las personas que vienen a los hospitales civiles de Guadalajara. Se tuvo una experiencia previa en Colombia, Perú y Chile, conociendo la forma en cómo trabajaban otros albergues, esta sociedad en cuanto a poder subsanar las necesidades en el área de salud. Como tal, yo como fundador, viví un tiempo en Perú, ahí nace la inquietud, conozco otra asociación civil en Guadalajara, apoyo por un tiempo y así hice algo diferente, que la gente no se quede sin comer, así llega al comedor comunitario, considero que es un derecho importante del ser humano tener alimento diario, más aun tratándose de un enfermo”.
Agrega: “Se han ido uniendo voluntarios, en redes sociales, en cocina, en trabajo social, psicología, viendo que no hay trabajadores, esto es más grande, es dar con el corazón. Así se van formando los servicios. No nace de sentarnos a planear algo, van llegando voluntarios, gente con buena voluntad, por eso creamos un lugar para que la gente tenga que comer todos los días”.
LA MEJOR AYUDA ES UNIÉNDOSE CON SU CORAZÓN
En la asociación civil están abiertos a todo tipo de donativos, sin embargo, para Edgar Emiliano Chávez el más importante es cuando se unen con sus manos y su corazón, lo cual es clave en esta labor.
“La mejor ayuda es uniéndote con sus manos y con su corazón, que conozcan, una vez dándose cuenta de la importancia, no hay un donativo en especial, lo que pedimos es despensa básica, si me preguntan lo que más se requiere son los básicos, aceite, huevo, café y azúcar, los cuales nosotros todos los días preparamos estos productos, es nuestra forma de salir adelante. Pueden donar todo lo que consideren que cabe en cocina o en un menú”.
De lo más satisfactorio que deja esta actividad, Edgar Emiliano Chávez resalta el agradecimiento que tienen las personas a las cuales les brindan el apoyo y ver que cada vez con más personas las que se interesan en temas de apoyo social en la ciudad.
“Hay cosas que me llenan de alegría, cuando una persona sale del hospital, el familiar que comió el tiempo con nosotros viene y nos dice gracias, eso es lo mejor, es muy padre. Hay otra sensación, pero es triste, cuando el familiar fallece, y vienen al comedor es algo que te llena el corazón, por todas estas personas que prevalecen aun con dolor en el corazón, vale la pena continuar en este camino. No hay nada más satisfactorio que ver corazones felices”.
La gran misión a largo plazo es cumplir con la agenda de que ningún humano no tenga alimentos en su día a día, por ello, en Damasco se hace un llamado a la sociedad a unirse cada quien desde su trinchera para abonar en esta noble labor.
“Una de las misiones que tenemos a largo plazo es cero hambre, lo que más nos gustaría, que por fin haya más proyectos con personas en la sociedad para cumplir esta agenda. Queremos que se puedan abrir más comedores para que la gente tenga todos los días un plato de comida, que no sea una preocupación más aparte de sus familiares hospitalizados”, puntualizó.
