JALISCO
Entre refundadores y reformadores: Como dos gotas de agua
Con todo respeto, por Jorge Zul de la Cueva //
Refundar es sinónimo político de transformar. Estar atrapado entre la Refundación y la 4T es muy limitado en materia de opciones, porque la refundación y la transformación son espejos con ciertas diferencias y muchas equivalencias.
Los refundadores se quejan de que los defensores de la 4Tno son capaces de ver la realidad y los acusan de ser seguidores ciegos, miembros convencidos de un culto que no entiende razones y con el que no se puede dialogar. En esto tienen algo de razón, pero ¿ha usted intentado dialogar con un refundacionista sobre el pacto fiscal? ¿Sobre la inseguridad en Jalisco? ¿Sobre las desapariciones forzadas del 4, 5 y 6 de junio de 2020, la crisis del agua, la situación de la Cuenca Chapala, Temacapulín, la presa del Zapotillo o la Fiscalía Infiltrada?
Si lo hace, descubrirá rápidamente que la Refundación no tiene la culpa de nada, que es una víctima de grupos desestabilizadores, oscuros sótanos del poder y malos tratos por parte de la Federación. Aquí todo lo hacemos bien aunque los resultados sean malos porque la realidad rebasa la esfera de nuestras responsabilidades y punto.
En ese sentido, es empate retórico con la 4T que es una pared a la hora de hablar de Bartlett, la línea 12, la Guardia Nacional y la militarización del país, el combate al crimen organizado, el General Cienfuegos (de quién nadie habla) o lo que sea que pase que pueda ser cuestionado a nivel nacional.
Los refundadores se quejan de lo que consideran el delirio de intentar revivir PEMEX pero mantienen una ruta discursiva sobre salir del Pacto Fiscal sin ningún empacho o sostienen que están haciendo un trabajo maravilloso en materia de seguridad porque los delitos patrimoniales van a la baja y esto no ayuda en nada a su causa, porque son discursos delirantes.
Dicen que la Consulta de Amlo sobre el juicio a Ex Presidentes es una gastadera inútil y tienen razón, pero luego hacen una consulta, también inútil, sobre si el Congreso de Jalisco debería revisar nuestra adherencia fiscal a la federación y esa a sus ojos es completamente aceptable, un gasto necesario y un requerimiento histórico. Digo, pos ¿así cómo tomarlos en serio?
Se quejan de la poderosísima maquinaria mediática que son las mañaneras, pero hacen infomerciales de diez minutos con un gobernador que rara vez se presenta de manera abierta ante los miembros de la prensa y que todo lo suyo son entrevistas a modo y mensajes grabados sin cuestionamientos posibles y que regaña y fustiga a los medios tanto o más que el propio Presidente de la República en las mañanas.
Unos hablan de conservadores y fifís, otros de chairos y gente que quiere dañar a Jalisco.
Unos hablan del Reforma, de Loret, otros de medios basura, de periodiquitos.
Clemente Castañeda exige que se trabaje a nivel nacional para ampliar la agenda de libertades pero en Jalisco, donde MC controla el Gobierno del Estado, no se aprueba el matrimonio igualitario.
Se quejan de que el presidente tiene una corte pero el Gobernador no permitió que uno solo de sus secretarios fuese vocero de algo salvo de las pifias ya inmanejables. La Refundación es una Transformación aspiracional, es una versión más de lo mismo y acaso por eso se confrontan tanto, porque los extremos se tocan.
Creo que esta coyuntura es especialmente benéfica para los proyectos localistas, que sean capaces de tejer un discurso que haga sentido a sus comunidades y que puedan construir una agenda que no sea espejo ni contraste de la Refundación ni de la Transformación sino una cosa propia que sea capaz de existir por sí misma y no en antagonismo de algo más.
