NACIONALES
Soberbia y errores preelectorales
Opinión, por Miguel Ángel Anaya Martínez //
La soberbia se define como aquel sentimiento de superioridad frente a los demás que provoca un trato distante o despreciativo hacia ellos; las personas arrogantes tienen una autoimagen sobreestimada o una percepción inflada sobre sí mismas. Al final todo se reduce a un tema de ego. Es común que personas con un cierto grado de poder se conviertan en personas egocéntricas.
Alguna vez escuché decir que, en política, solo se comete un error, lo demás son consecuencias. Una de las principales causas que nos conducen al error es precisamente, la soberbia y, es la lucha de egos, la que nos evita corregir el camino.
El panorama político nacional se comienza a aclarar y el local parece enredarse cada vez más. Morena tiene prácticamente definida su elección y es que por más movimientos que se hagan, la gran mayoría de las encuestas arrojan una amplia ventaja de las preferencias hacia la única mujer que compite, seguramente la elección reflejará lo que dicen las encuestas.
Las diferencias internas en la elección de Morena han salido a flote, lo más probable es que encontrarán el camino de la reconciliación cuando realicen la operación cicatriz y se llegue a acuerdos con los que no fueron favorecidos, pero, si la soberbia y la pelea de egos hacen su papel, podrían causar división y costar votos cuando salgan a competir contra la oposición.
Por su parte, la oposición debería tener su elección clara. Xóchitl es por mucho, la candidata más competitiva. Optar por Beatriz sería refrendar a un personaje que tiene su séquito de seguidores al interior del PRI pero que en la sociedad genera más negativos que positivos, cometer este error sería el suicidio político del Frente Amplio, aunque seguramente beneficiaría a ciertos dirigentes políticos que buscan defender sus intereses personales antes de competir por la presidencia.
Hablando de soberbia, el presidente del PRI sorprende con sus declaraciones diciendo que, si Movimiento Ciudadano no se une a su causa, seguramente, perderá el registro. Si bien MC no es un partido que en este momento cuente con presencia en todo el país, la realidad es que gobierna más ciudadanos que el PRI y probablemente consiga más votos que el partidazo de antaño.
Por su parte, MC tiene sus propias problemáticas que no son pocas. A nivel local los mensajes que han dado los que gobiernan bajo sus siglas han sido muy confusos. Es más que claro que el presidente y fundador de ese partido no apoyará al Frente Amplio y saldrá a competir solo para la elección del próximo 2024, esto porque espera subir el valor de la marca, por meter un mayor número de legisladores en las cámaras y porque seguramente, hay un trasfondo que no se conoce del todo.
Aquí confluyen dos visiones. Si bien es cierto que Movimiento Ciudadano tiene su fuerza real en Jalisco, donde abandera al ejecutivo estatal, gobierna los principales municipios, tiene mayoría en el congreso local y ha logrado una estructura territorial importante, también es verdad que el partido existía antes y lo seguirá haciendo con o sin la presencia de los actores políticos locales; el dueño de la marca ha tomado su decisión y habrá que ver quien cede algo en sus posicionamientos.
Al final, a todos, -Morena, Frente Amplio y Movimiento Ciudadano- les queda claro que necesitan de unidad y decisiones bien pensadas para aspirar a lograr los resultados que esperan. Si Morena no concilia pone en riesgo una elección presidencial que parece más o menos definida; si el Frente no elige a la mejor candidata que tiene, pierde la posibilidad de competir y sus partidos integrantes podrían quedar relegados; si MC no sale en unidad pondrá el riesgo la oportunidad de ser una opción interesante en el mediano plazo y su futuro en Jalisco será incierto.
Las consecuencias de las decisiones tomadas se seguirán dando, son inevitables, pero quien logre controlar la soberbia y tenga la templanza para dominar sus egos podrá aspirar a un mejor resultado; quienes cegados por la soberbia sigan avanzando, seguramente tropezarán en el camino.
