CULTURA
A Villa del Carbón…un futuro lleno de pasado

Crónicas de un Trotamundo, por Fernando Zúñiga //
Amelia era mi vecina, lo fue durante los 2 años que renté una pequeña casa para mi oficina en ese fraccionamiento en donde ella residía en Zapopan. Una tarde lluviosa de agosto me invitó a su casa. Me preparó una taza de Nescafé.
Le pregunté por su esposo, al cual yo había visto ocasionalmente, cuando coincidíamos por la mañana temprano que el salía rumbo a su trabajo y yo abría el despacho.
Amelia también tenía un hijo al que yo había visto quizá una par de ocasiones en el pasado.
Amelia tenía 30 años de edad pero aparentaba más. No tenía un solo rasgo que yo pudiera calificar como atractivo. Sin embargo no era propiamente una mujer fea.
…el hombre con el que vivo no es mi esposo. Llevamos una vida de pareja desde hace 4 años. Trabaja para una empresa de Traslado de Valores, algunas noches no llega a casa…
…lo conocí en el burdel donde yo trabajaba…él recién había enviudado y asistía algunos fines de semana y contrataba mis servicios…a veces solo me pedía que platicáramos mientras bebíamos unas copas…
…un día me pidió que viviera con él…tiene 2 hijos que viven con sus abuelos…se llama Raúl…me brindó la oportunidad de tener esta casa, la primera vez en mi vida desde que tuve a mi hijo…
…es cariñoso y amable conmigo, no me falta nada en lo material…lo llena mi atención para él y mi manera de satisfacerlo sexualmente…
…nací y crecí en Villa del Carbón, vivía con mi mamá y mi abuela…
…en mi camino diario a la Secundaria un día me contactó un hombre mayor, era un Dr. mas o menos conocido en el pueblo, era casado y tenía hijos…
… me convenció con su trato amable, amistoso…me hacía de vez en cuando un pequeño regalo…un día me llevó en su auto al campo…caminamos hasta un pequeño lugar…me violó…quedé embarazada…
…mi mamá y mi abuela me corrieron de la casa…sin ninguna opción para mí ya que no tenía ningún otro familiar conocido en el pueblo…
…un hombre joven del pueblo me invitó a acompañarlo, manejaba un tráiler e iba a llevar una mercancía hasta Tijuana y regresaríamos en unos 7 días y entonces me ayudaría a buscar donde vivir y en qué trabajar…
…viajamos día y noche…yo le hacía el favor sexual y él me compraba algo de comida…me dijo que le gustaría que viviéramos juntos…
…estuvimos varios días en Tijuana mientras cargaba su tráiler…
…yo me sentí muy mal y a veces devolvía el estómago, comía muy poco, empecé enflacar…
…me dejó, sin avisarme, sin dejarme ni siquiera un peso…regresó a Villa del Carbón o quien sabe a dónde, sin mi…
…uno de los encargados de la bodega en Tijuana me dejaba dormir en su pequeño cuartito a cambio de sexo cada noche, por la mañanas me compartía algo del lonche que traía de su casa, solo me pedía que durante el día no estuviera allí…
…yo caminaba por la ciudad buscando algún trabajo para ganarme algo de dinero, pero no traía ninguna identificación y mi ropa cada día estaba más desastrosa y yo cada vez más deteriorada…de seguro me veían enferma…regresaba por la noche a la bodega…
…un trailero me ofreció viajar con él a Guadalajara…igual le daba sexo cada vez que él quería…
…en Guadalajara empecé a vagar, haciendo trabajos en la calle o en alguna cantina… lo que era difícil porque me veían mal ya que comía muy poco, menor de edad y sin ningún documento que me identificara…
…dormía donde podía…mi panza empezó a crecer…algunas veces me sentía muy mal…
…cierto día me caí en plena calle…un Sr. me llevó al hospital civil…allí nació Luis Ángel…
…el Sr. que me había ayudado pagó los gastos de mi atención, me llevó a una vecindad muy pobre y le pagó a la dueña la renta de un mes, además de que me compró algo de comida, la receta para mi bebé y me dejó dinero…nunca más lo volví a ver…
… a los pocos días empecé a salir a buscar trabajo…me daban algo de dinero y comida en los burdeles por la Central Camionera a cambio de limpiar los baños…
…un hombre que vivía en la vecindad me empezó a buscar y terminé viviendo con él…al principio todo iba bien…pero me empezó a pedir que regalara o dejara en algún lugar a mi pequeño hijo…a pesar de que él nunca daba lata de ningún tipo…
…después me pidió que fichara en un burdel muy barato…después trajo a una mujer a vivir con nosotros y me empezó a hacer a un lado y a exigir dinero. A veces me golpeaba si no traía la cantidad que me exigía…una ocasión me acusó de robo con la policía, que eran sus amigos, me llevaron a la cárcel y estuve 3 días sin saber de mi hijo… Nunca quise levantar una acusación contra él…
…me empecé a enfermar, una chica del burdel me invitó a irme a vivir a su casita y ella me atendía los días que no iba a trabajar…
…pasé unas semanas en el Hospital Civil, muy grave, me salvaron la vida…
…cuando salí del Hospital mi amiga me avisó que se iría a vivir con su familia a Villa Hermosa…
…me arriesgaba a dejar solo a mi hijo…y seguía trabajando de prostituta…empecé a ganar mejor dinero…me enseñaron los trucos para que mi vagina pareciera más cerrada como le gusta a los hombres…ya podía vivir mejor…
…empecé a sufrir mucho, lloraba, me maldecía, no era lo que yo había pensado para mi vida y ahora con mi hijo…
…Raúl empezó a frecuentar el burdel y me buscaba para ir a comer o al cine…yo no me enamoré, pero me ofreció una vida más tranquila…
…todavía de vez en cuando voy al burdel a saludar a la dueña…siento cierta tentación de ganar mi propio dinero, pero pienso lo que tengo con Raúl y cancelo el pensamiento…
…quiero trabajar en algo, independizarme y tener conmigo todo el tiempo a Luis Ángel, pero no tengo papeles de ningún tipo y si acaso me ofrecen por unos días en la limpieza de baños….voy en horarios que no está Raúl…
Amelia me confesó que Luis Ángel se ausentaba muchos días de casa ya que Raúl no lo quería en casa…el trato era solo con ella…ambos no hacían algo por ganarse el cariño mutuo.
Amelia vivía la encrucijada; su vida de cierta seguridad o la presencia permanente de su hijo.
Ella no amaba a Raúl aunque reconocía su apoyo…vivía con miedo a un futuro lleno de pasado.
FZG Guadalajara VII/2016
CULTURA
Tastoanes, fiesta espectacular en Zapopan y Tonalá

-Por Mario Ávila
La tradicional Fiesta de los Tastoanes, una tradición cultural y religiosa arraigada en varios municipios de Jalisco, se vive de manera especial y espectacular en los municipios de Tonalá y Zapopan, en el marco de la celebración del día de Santo Santiago Apóstol, cada 25 de julio.
La palabra «Tastoan» proviene del náhuatl tlatoani, que significa «señor» o «gobernante» . La danza de los Tastoanes rememora las batallas entre los indígenas caxcanes y los conquistadores españoles durante la Guerra del Mixtón en el siglo XVI, especialmente en el Cerro del Mixtón, ubicado en lo que hoy es Zacatecas .
Con ella se conmemora la resistencia de los pueblos indígenas contra la conquista española; una fiesta de tradición que involucra danzas, máscaras y trajes elaborados, así como música y cantos, representando la batalla entre los indígenas y los conquistadores, donde los Tastoanes simbolizan a los guerreros indígenas y Santo Santiago, al conquistador español.
Las máscaras de los danzantes incluyen elementos como colmillos y representaciones de enfermedades traídas por los españoles, como la viruela.
Concretamente, la fiesta colorida de bailes, lucha aparente y latigazos que resuenan contra el piso con furia se vive en el Cerro de la Reina, en el municipio de Tonalá; mientras que en el caso de Zapopan, la festividad se vive con mucha pasión en las comunidades de Tesistán, San Juan Ocotán y Nextipac.
CULTURA
Obsesión y admiración literaria: El guardián entre el centeno, la censura y el culto

-Conciencia en la Cultura, por Luis Ignacio Arias
Jerome David Salinger publicó “El guardián entre el centeno” en julio de 1951, de ese día a la fecha, John Hinckley Jr. intentó asesinar al expresidente Ronald Reagan, en la habitación de Hinckley fue encontrado un ejemplar de la novela, Robert John Bardo asesinó a la actriz Rebecca Schaeffer y Mark David Chapman a John Lennon, ambos tenían una copia de El guardián entre el centeno al momento de cometer su crimen.
Además, fue prohibida en múltiples escuelas y bibliotecas de Estados Unidos por sus referencias sobre sexo, alcohol, blasfemias y cuestionamiento de la autoridad. En 2009, el sueco Fredrik Colting publicó la segunda parte de la novela, sin la autorización de J.D. Salinger, lo que llevó a una demanda que redefinió el tema de derechos de autor.
¿Qué hay en la obra de Salinger que genera obsesión o admiración? Holden Caulfield, de 16 años, tiene un desencanto por el mundo, el mundo de los adultos, con sus reglas y normas que carecen de sentido para él. Al ser expulsado del colegio, se escapa a Nueva York, en la ciudad se siente en un ambiente de soledad, de incapacidad de conectar de manera profunda con otra persona, generándole una angustia por la existencia, por el mañana.
La obra destacó por el uso de un lenguaje informal, que no buscaba la prosa bella o elegante, no tiene pretensiones estéticas, es como una confesión directa y honesta, al grado que puede llegar a ser muy crudo o fuera de lo aceptado y que en su época fue visto como muy atrevido. Algo que parece comprensible para alguien de esa edad encontró eco en lectores jóvenes y adultos que, al igual que Holden, no encontraban relación o vínculos con la sociedad en la que vivían.
La pérdida de la inocencia, la búsqueda de identidad, los problemas de crecer en un mundo que se percibe como falso son los temas centrales de la novela. En ella no se encuentra una luz de esperanza al final del túnel; no es un proceso de autodescubrimiento hasta llegar a la madurez y la aceptación de mundo, se trata de la lucha de Holden Caulfield por mantener su identidad, por preservar la inocencia y la autenticidad, no solo en él, sino en todos los que busca proteger.
Salinger escribió esta novela después de haber servido en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial, su experiencia en la guerra lo llevó a ser hospitalizado por estrés postraumático. Aunque no se trata de una novela autobiográfica, se piensa que los temas tratados en ella son la consecuencia de lo vivido en la guerra.
Aunque la novela había sido publicada en serie por diferentes revistas, la publicación en libro fue rechazada por varias editoriales debido a los temas, el lenguaje y la forma en la que retrata la adolescencia, hasta que fue aceptada en Little, Brown and Company. Desde entonces El guardián entre el centeno es considerada una de las novelas más influyentes del siglo XX, siendo inspiración de escritores, pintores, músicos y, como ya se mencionó, de todo tipo de lectores.
A causa del éxito logrado con la novela, Salinger se mudó de Nueva York a una casa aislada en Cornish, Nuevo Hampshire, escapando de los medios, las entrevistas, los fans y la fama en general. Así se mantuvo, aislado de todo lo relacionado a su obra y con esporádicas o forzadas apariciones públicas, como la ocurrida en 2009 reapareciendo para demandar a Fredrik Colting, quien decidió publicar una segunda parte del guardián, llamada 60 años después: Cruzando el campo de centeno.
Fredrik Colting tomó al personaje, el ambiente y otras referencias y lanzó la obra sin el consentimiento de Salinger, quien demando por plagio y derechos de autor. En principio, Salinger ganó la demanda, pero Colting contrademandó alegando que se atentaba contra su libertad de prensa y expresión. J. D. Salinger murió en 2010; la demanda se solucionó fuera de los juzgados, 60 años después: Cruzando el campo de centeno no puede publicarse ni venderse en EEUU, pero sí en el resto del mundo. Abriendo el debate sobre el derecho del autor sobre su obra intelectual y la libertad de prensa de otro autor para tomar inspiración o referencias.
¿Qué es lo que hace que personajes como Hinckley, Bardo o Chapman, se declaren grandes fans de la novela y la lleven consigo incluso al cometer el crimen, o que Colting se aventure a tomar al protagonista de otro autor y hacer una secuela no autorizada que claramente terminaría en una demanda? La respuesta está en cada lector que se enrede a través de El guardián entre el centeno.
CULTURA
«Melancolía» de Salvador Santana: Un viaje introspectivo que cautiva a Guadalajara

-Por Enrique Manterola
El maestro tapatío Salvador Santana vuelve a mostrar su gran talento creativo como protagonista indiscutible del arte contemporáneo en Guadalajara con la inauguración de Melancolía, su exposición individual en Víctor Haro Gallery, ubicada en el Hotel Fiesta Americana.
Esta muestra, que explora la profundidad emocional a través de la figura femenina, marcó un hito cultural bajo la dirección de Víctor Haro y con el respaldo de patrocinadores como Tequila Taja de la Mora, Tequila Tucillo y Amigos del Mezcal.
La velada, amenizada por la guitarra de Choche, reunió a artistas, medios y amantes del arte, quienes celebraron la trayectoria de Santana y la fuerza expresiva de su obra, presentada con el apoyo del padrino José Luis Malo y la representante de la galería, Claudia Ángeles. Santana, un artista forjado en la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Guadalajara y enriquecido por sus viajes a Europa, ha consolidado un lenguaje propio que combina técnica y emoción.
Melancolía no es solo una exposición; es un autorretrato emocional donde las figuras femeninas, adornadas con coronas espinosas y perlas que evocan lágrimas, reflejan una melancolía universal, no como padecimiento, sino como esencia humana.
“Sus pinceladas, reminiscentes del expresionismo, son un diálogo íntimo que invita al espectador a conocer su alma”, destacó José Luis Malo, amigo de Santana por más de 25 años, en un discurso que capturó la relevancia de la muestra.
La ceremonia inaugural resaltó el compromiso de la Galería Víctor Haro con el arte tapatío y se le agradeció tanto a Víctor Haro, como al Hotel Fiesta Americana, a su director Diego Bustamante por su gestión y a las marcas de tequila que dieron un toque local al evento.
La Melancolía como Esencia Humana
José Luis Malo, en un emotivo discurso, trazó la trayectoria de Salvador Santana, desde sus inicios aprendiendo técnicas de su padre, Víctor, hasta sus exposiciones en espacios icónicos como el Exconvento del Carmen, el Palacio de Gobierno y la Galería Juan Soriano. “Desde 2004, Salvador ha investigado paletas de color y un lenguaje propio, consolidándose en certámenes y exposiciones colectivas”, explicó.
En Melancolía, las figuras femeninas, con posturas de recogimiento y elementos simbólicos como flores y detalles hipnóticos, invitan a una reflexión profunda. “No pinta mujeres; pinta su propia psicología y personalidad. Ver sus piezas es conocerlo a él, un impresionismo que se autorretrata a través del arte”, afirmó Malo, comparando la obra con el expresionismo por su maestría en el uso del pincel y los colores.
La Humanidad detrás del Arte
Claudia Ángeles, amiga y colaboradora de Santana, destacó la humanidad que impregna su trabajo. “Conocer sus luchas personales, económicas y sociales enriquece la experiencia de ver sus obras, que van desde miniaturas hasta murales. Es un honor apoyar su talento y llevarlo a Europa, un proceso lento pero valioso”, expresó.
Ángeles instó a los asistentes a valorar el esfuerzo de los artistas y adquirir las piezas, subrayando su relevancia cultural y emocional como un legado para Guadalajara.
La Voz de Salvador Santana
Con humildad y gratitud, el artista de la noche tomó la palabra pese a las adversidades climáticas que desafiaron la asistencia. “Melancolía es una expresión de sentimientos profundos, colores y mi técnica de ‘embarrar’ la pintura. Busco una obra con contundencia expresiva que mueva emociones, siguiendo el hilo conductor de artistas como Orozco”, compartió.
Su objetivo es conectar con el público, dejando un mensaje de esperanza a través de pinceladas que, según él, “hablan más que palabras”. La muestra, aseguró, es un reflejo de su alma y una invitación a la introspección.
Un Espacio para la Cultura Tapatía
Víctor Haro, director de la galería, cerró la noche elogiando a Santana. “Su obra es un reflejo de amor y dedicación, un valor que trasciende lo económico. Es un honor presentar a un grande como él”, expresó.
Haro resaltó el papel del Hotel Fiesta Americana como un espacio que va más allá de lo comercial, consolidando a la galería como un epicentro cultural. La colaboración de patrocinadores y la pasión de los organizadores dieron un marco inolvidable a la velada, marcada por la calidez tapatía y la música en vivo.
Un Hito en el Arte de Guadalajara
Melancolía trasciende como una experiencia artística que combina técnica, simbolismo y emoción. Las figuras femeninas de Santana, cargadas de vulnerabilidad y fuerza, reflejan una melancolía que conecta con la condición humana. Su capacidad para transmitir su mundo interior a través del pincel lo posiciona como uno de los grandes talentos tapatíos.
La Galería Víctor Haro, con esta muestra, reafirma su compromiso con la promoción del arte local, ofreciendo un espacio donde la creatividad y la identidad de Guadalajara se entrelazan.
La exposición permanecerá abierta al público, invitando a los tapatíos a sumergirse en esta propuesta introspectiva. Melancolía no solo celebra la trayectoria de Salvador Santana, sino que reafirma el poder del arte para unir, emocionar y transformar. En palabras de Malo, “ver estas obras es conocer al artista y, a través de él, a nosotros mismos”.
La inauguración de la exposición del artista Salvador Santana encabezada por el maestro José Luis Malo.
La velada, amenizada por la guitarra de Choche, reunió a artistas, medios y amantes del arte.
El maestro José Luis Malo al dirigir un emotivo discurso, trazó la trayectoria de Salvador Santana, desde sus inicios aprendiendo técnicas de su padre, Víctor.
Claudia Ángeles, amiga y colaboradora de Santana, destacó la humanidad que impregna su trabajo.
El artista Salvador Santana, muy emocionado, comentó que la muestra es un reflejo de su alma y una invitación a la introspección.
Víctor Haro, director de la galería, cerró la noche elogiando a Santana. “Su obra es un reflejo de amor y dedicación, un valor que trasciende lo económico. Es un honor presentar a un grande como él”, dijo.
En Melancolía, las figuras femeninas, con posturas de recogimiento y elementos simbólicos como flores y detalles hipnóticos, invitan a una reflexión profunda.
“Melancolía es una expresión de sentimientos profundos, colores y mi técnica de ‘embarrar’ la pintura”, muy emocionado resaltó el artista Salvador Santana.