CULTURA
Cuando la ley es letra muerta: El elefante blanco de la Comisión Disciplinaria

Miscelánea Deportiva, por Esteban Trelles Meza //
En un país en el que prevalece la corrupción y los intereses creados de los poderosos, jamás nunca tendrá la justicia y la razón de absolutamente nada.
Instituciones como el INE, garante de la democracia de este país en el sufragio de los electores para designar a sus gobernantes, que en este momento están “en el ojo del huracán”, (campañas políticas), que sus actuaciones legales dejan mucho que desear.
La ley no se aplica dejando pasar claros abusos de los gobiernos en turno del color que sea, lo mismo que en el terreno futbolístico.
Amable lector no se equivocaron de lectura en el renglón deportivo de nuestra columna, simple y sencillamente viene al tema de las injusticias que prevalecen en nuestro país, que el futbol como negocio privado maneja también sus propios intereses, repetimos, por encima de la razón y la justicia.
La Comisión Disciplinaria que es “autónoma”, en realidad dependiente de la FEMEXFUT para todos, no actúa en beneficio de la justicia, sino por el contrario, aparte de ser un “elefante blanco”, pasa sin pena ni gloria en sus actuaciones de siempre.
Ejemplos sobran a lo largo de su existencia, no solo en cancha con las medidas de orden y castigo, sino lo más grave tratar de hacer justicia con los poderosos dueños de equipos liderados por la empresa TELEVISA, llámese América.
Recordamos las agresiones físicas de jugadores contra árbitros del “cabezazo” de Pablo Aguilar, paraguayo, a un árbitro, que en automático es un año de castigo para el agresor, la directiva americanista protestó, confabulándose con el equipo Toluca en la misma situación de otro jugador extranjero, pasando por alto la sanción de la Comisión Disciplinaria para asistir a tribunales extranjeros (TAS) en Suiza y dejar un antecedente, que irónicamente les favoreció.
Tratándose de equipos poco influyentes y no estar en el “club de Toby”, como el Querétaro que se ensañaron en un castigo ejemplar excesivo por culpa de sus “barras”, en la descomunal bronca en tribuna y fuera del estadio “La Corregidora” contra la afición del Atlas de Guadalajara, suficiente para vetar al equipo por un año sin aficionados en su cancha, millón y medio de pesos como multa, y por si fuera poco desmantelar la directiva y expulsarla del futbol de primera división.
“Las gracias” impúdicas, vulgares y soeces del jugador colombiano-mexicano Julián Quiñones del América, tocando sus partes nobles contra el público del estadio Azteca, que lejos de censurar y criticar sus incondicionales comentaristas de TELEVISA, tuvieron el descaro y el cinismo de hacer una “encuesta”, preguntando al público televidente si veían como falta esa seña con la mano, que ya se imaginaran amables lectores el “visto bueno” de la afición.
En el estadio Akron de Guadalajara, en un clásico nacional Quiñones realizó la misma seña obscena de sus genitales, dirigiéndose a la porra tapatía, por lo que estos de inmediato reaccionaron con gritos y burla asemejando los sonidos de un gorila.
De inmediato los arrastrados comentaristas de TELEVISA encabezados por Faitelson, Vaca y compañía pedían veto para el estadio Akron por el racismo contra el jugador referido por el color de su piel (nada que ver), que fue la tónica de varios de sus programas de análisis.
El inadaptado del guardameta argentino Nahuel Guzmán de la UANL hizo lo mismo con ademanes con las dos manos propio de ellos en los insultos vulgares contra la progenitora, dirigiéndose al público en el estadio Azteca, y los más grave estando expulsado del encuentro para reingresar y hacer los ademanes descritos, jamás lo castigaron.
En el micro-torneo del intrascendente mundial de clubes que son tres partidos, el último la final, Nahuel lo entrevistaron los medios mexicanos, diciéndole que era importante y trascendente representar al futbol mexicano, a lo que él interrumpió al reportero que él se representaba así mismo junto con los extranjeros que juegan en “Tigres”, que afortunadamente el técnico brasileño “Tuca” Ferreti, le corrigió la plana diciendo que por supuesto eran la representatividad de México de su Liga interna (obvio).
En ese sentido Real Madrid y Barcelona teniendo en su historia los mejores jugadores del mundo extranjeros no tendrían validez sus títulos puesto que no son nativos de España, situación absurda y rídícula, son equipos españoles punto.
Los intereses económicos multimillonarios del negocio llamado futbol está en juego, no solo la plata, sino el ego de sus propietarios, poderosos influyentes don dinero que compran voluntades y servilismo siempre.
Ahora bien, sin tratar de descubrir “el hilo negro”, todos sabemos que Azcárraga Milmo adquirió al equipo América para encumbrarlo por las buenas y las maduras, que por cierto adquirió con el empresario refresquero “Jarritos”, Issac Bessudo por la cantidad de 425 mil pesos en el año de 1959, justamente en la década de la hegemonía del llamado campeonísimo Guadalajara obteniendo 8 títulos anuales, dándose a la tarea de enajenar a través de la pantalla chica a su equipo con la maquinaria mediática de su empresa TELEVISA, medios escritos y radiales.
Toda esta situación la establecemos para demostrar que poderoso don dinero inclina la balanza para los magnates, con todas las argucias legales o ilegales para establecer un proyecto deportivo llamado América en al ánimo de los aficionados, la historia ya la conocen campeones por decreto.
Todos los organismos futbolísticos son dependientes de la FEMEXFUT, queriendo disfrazar la autonomía de las mismas con un ejército de incondicionales, que iniciaron por la fuerza y ahora en estos tiempos existen comentaristas americanistas de hueso colorado diseminados en todas las empresas televisoras con su ADN de prepotencia, vanidad, autoritarismo y penetración por décadas manejadas.
El torneo PRODE efectuado en 1985 sin los seleccionados de sus países (extranjeros) previos al mundial de 1986 en nuestro país, que como se diría fue informal en el que compitieron solamente 8 fechas jugando la final América (DT Miguel Angel “Zurdo” López) vs Tampico Madero ( DT Carlos Reynoso ), que en el partido de ida Tampico goleó 4 a 1 y en el de vuelta en el estadio Azteca “la grandeza” de los americanistas fue manifiesta goleándolos 4 – 0, quedando el global 5 – 4 , que por supuesto los diarios encumbraron al equipo de epopeya con el sospechosísmo manifiesto.
El mayor fraude no solo en los marcadores establecidos, sino que un torneo pequeño, intrascendente lo hicieron oficial de campeonato de Liga en una forma vergonzante, arbitraria y deshonesta.
El autoritarismo y la influencia descarada del equipo América – TELEVISA lo hace único por las buenas o las malas, que estas últimas prevalecen a lo largo de la historia creando un monstruo de mil cabezas, que a su favor se preocupa y ocupa por tener un equipo ganador cien por ciento, que aun así siempre tiene la “ayuda” del arbitraje mexicano, por ello el extremo de unos que lo adoran y otros lo odian.
Para terminar los organismos o instituciones que se dicen autónomas de la FEMEXFUT jamás nunca lo serán.
“Si las cosas que valen la pena se hicieran fácilmente cualquiera las haría” (Anthony Quinn), u otras con imposiciones, es más fácil desarrollarlas y engañar a todos con el poder económico, que compra voluntades y gustos.
E-mail: etrememodelos@hotmail.com
CARTÓN POLÍTICO
Edición 807: Magistrada Fanny Jiménez revoca rechazo de pruebas y defiende Bosque de Los Colomos
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LAS NOTICIAS PRINCIPALES:
Crónica de una semana tensa en la UdeG: La rebelión estudiantil que desafía a la FEU
CULTURA
Premios Ariel, la magia del cine mexicano: Jalisco es epicentro del evento

– Conciencia en la Cultura, por Luis Ignacio Arias
Los Premios Ariel, máximo reconocimiento de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) se entregarán el 20 de septiembre. Por tercer año consecutivo, Jalisco ha sido la sede de los Premios Ariel, en esta ocasión se celebran en Puerto Vallarta.
La AMACC impulsa una política de itinerancia para que los Ariel dejen de celebrarse exclusivamente en la Ciudad de México, buscando y fortalecer la conexión entre la industria cinematográfica nacional y los diversos estados. Jalisco ha mostrado una receptividad notable a esta política, ofreciendo no solo capacidad logística e infraestructura adecuada, sino también apoyo institucional y económico.
A través de la Secretaría de Turismo y FILMA Jalisco, el estado ha otorgado incentivos para atraer producciones, políticas públicas de cine y recursos concretos para la realización de la ceremonia, como los más de 10 millones de pesos destinados a la producción del evento 2025. Además, la elección de Puerto Vallarta como sede se vincula con un interés estratégico por consolidar un polo cinematográfico dentro del estado.
Con apoyos como el “cash rebate”, la comisión de filmaciones y la existencia de festivales de cine consolidados como el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), demuestra que puede ofrecer garantías logísticas y técnicas para eventos de gran magnitud, al mismo tiempo que refuerza su visibilidad cultural y turística.
El gobierno del estado ha buscado que los Ariel sirvan también como plataforma de promoción turística, vinculando cine, cultura y visitantes; la cobertura mediática que genera el evento, junto con los atractivos turísticos de Puerto Vallarta, amplifica la proyección del estado en el ámbito nacional e internacional.
Esta política contempla además la diversificación dentro del propio territorio jalisciense: si bien los premios se han celebrado en Guadalajara y ahora en Puerto Vallarta, la intención es rotar la sede dentro del estado en futuras ediciones, mostrando así la variedad de escenarios y consolidando a Jalisco como un punto neurálgico del cine mexicano contemporáneo.
Entre las películas nominadas, Pedro Páramo de Rodrigo Prieto se consolidó como una de las favoritas, obteniendo 17 nominaciones. La ópera prima de Prieto es una adaptación de la emblemática novela de Juan Rulfo que fusiona el realismo mágico con una estética cinematográfica contemporánea, aprovechando la experiencia del director como director de fotografía.
Su propuesta visual busca capturar la atmósfera surrealista de la obra literaria, y cada encuadre, cada composición lumínica, remite a la memoria de un México lleno de fantasmas y ecos del pasado. Prieto logra, con sorprendente soltura para un debut en la dirección, trasladar la intensidad emocional y la ambigüedad de los personajes a la pantalla, mostrando un cine que dialoga tanto con la tradición literaria como con el lenguaje cinematográfico moderno.
La Cocina, dirigida por Alonso Ruizpalacios, también acaparó la atención de la crítica y del público, con 15 nominaciones en diversas categorías. Ruizpalacios, conocido por su capacidad de mezclar humor, crítica social y frescura narrativa, invita a explorar las dinámicas de poder y género en un contexto culinario, donde la cocina se convierte en un microcosmos de tensiones, aspiraciones y secretos.
La dirección de Ruizpalacios se distingue por su ritmo ágil, su atención al detalle y la manera en que los personajes se despliegan en un espacio aparentemente cotidiano, transformando lo familiar en un escenario de reflexión sobre la sociedad contemporánea mexicana.
Sujo, codirigida por Fernanda Valadez y Astrid Rondero, recibió 13 nominaciones y ofrece una mirada íntima y profunda a la búsqueda de identidad de una joven que enfrenta los retos de la migración y la pertenencia. Valadez y Rondero despliegan un estilo cinematográfico sensible, que combina la narrativa íntima con un fuerte compromiso social.
La película se mueve entre el drama personal y la denuncia de condiciones sociales, logrando un equilibrio entre emoción y reflexión, mientras invita al espectador a contemplar los dilemas humanos y la construcción de la identidad frente a contextos adversos.
Corina, de Úrsula Barba Hopfner, con 9 nominaciones, centra su historia en las complejidades de las relaciones humanas y la búsqueda de la verdad en la interacción entre sus personajes. Hopfner demuestra un manejo refinado de la introspección dramática y una capacidad notable para capturar la esencia de cada individuo, explorando cómo los deseos, miedos y secretos moldean las decisiones y la convivencia. Su dirección, delicada y precisa, pone en primer plano la psicología de los personajes y transforma la narrativa en un examen de la condición humana contemporánea.
Finalmente, Un actor malo, que obtuvo 5 nominaciones, se destaca por su reflexión sobre la identidad, la percepción pública y los conflictos entre la vida personal y la fama. La película combina elementos de comedia y drama con un estilo original y arriesgado, mostrando cómo la construcción de la imagen propia y la exposición ante los demás pueden convertirse en territorio de exploración artística y social. Su dirección, creativa y audaz, logra mantener la tensión entre humor, ironía y crítica, permitiendo al espectador identificarse con los dilemas del protagonista y reflexionar sobre el espectáculo de la vida pública.
El conjunto de estas películas refleja la diversidad y riqueza del cine mexicano contemporáneo. Cada una de ellas ofrece una perspectiva única sobre temas universales como la identidad, el poder, la migración y las relaciones humanas, evidenciando la capacidad del cine nacional para dialogar con su contexto histórico y social. La crítica y la audiencia han reconocido que, más allá de la técnica y la narrativa, estas producciones invitan a la reflexión y al cuestionamiento, ofreciendo miradas que son tanto íntimas como colectivas, particulares y universales.
Los nominados a los Premios Ariel ponen de manifiesto la evolución y el dinamismo de la industria mexicana. Las películas y sus directores son la muestra de que el cine mexicano continúa siendo un espacio de innovación, reflexión y expresión artística que resuena dentro y fuera del país, consolidando su relevancia en el panorama global.
CULTURA
México celebra el Día Nacional del Charro: tradición, deporte y orgullo patrio

– Por Redacción Conciencia Pública
Cada 14 de septiembre México rinde homenaje a una de sus tradiciones más representativas: la charrería.
El Día Nacional del Charro fue instaurado en 1934 como una manera de reconocer al charro como figura central de la identidad mexicana y al mismo tiempo consolidar este deporte ecuestre como una práctica cultural de enorme arraigo.
Esta celebración se vive en todo el país, desde los lienzos charros hasta las plazas públicas, con un ambiente que enlaza historia, destreza y orgullo patrio.
En redes sociales, la fecha adquiere una fuerza particular. Hashtags como #DíaDelCharro y #DíaNacionalDelCharro agrupan miles de publicaciones en X, Facebook, TikTok e Instagram.
Usuarios comparten fotos de trajes bordados, sombreros de ala ancha, montas de caballos y suertes espectaculares como manganas, coleaderos o el paso de la muerte.
También abundan los mensajes de autoridades, artistas y asociaciones que felicitan a los charros y escaramuzas, exaltando el valor de mantener vivas las costumbres.
La Federación Mexicana de Charrería y la Asociación Nacional de Charros son protagonistas en la promoción de actividades conmemorativas.
Desde sus cuentas oficiales en internet se difunden la agenda de charreadas, congresos y campeonatos que se desarrollan en distintos estados del país.
Las escaramuzas, grupos femeninos que ejecutan rutinas a caballo con precisión y estética, se han vuelto además un símbolo de inclusión y disciplina dentro de esta disciplina reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial desde 2016.
En municipios y capitales estatales (Guadalajara no es la excepción), el Día del Charro se acompaña de desfiles, exhibiciones y actos solemnes. No faltarán hoy los honores a la bandera ni los espectáculos ecuestres que refuerzan el vínculo entre tradición y mexicanidad.
La fecha, además, se sitúa estratégicamente en la antesala de las Fiestas Patrias, lo que le otorga un carácter doblemente simbólico: recordar el legado charro y enmarcar la conmemoración de la Independencia.
En la esfera digital, las publicaciones destacan tanto la herencia familiar como la profesionalización del deporte.
Muchos jóvenes charros y escaramuzas utilizan hoy en día redes TikTok e Instagram para mostrar rutinas, vestimentas y entrenamientos, contribuyendo a que nuevas generaciones se acerquen a la charrería.
Esa combinación entre tradición e innovación ha hecho que la conversación en línea sea particularmente activa, alcanzando públicos que van más allá de los asistentes habituales a los lienzos.
Así, el Día Nacional del Charro se mantiene como una de las celebraciones más singulares del calendario mexicano: una fusión de historia, arte ecuestre y pasión comunitaria.
La charrería no solo sigue viva, sino que se adapta a los tiempos modernos sin perder su esencia.
En cada suerte, en cada traje de gala y en cada caballo brioso, resuena el eco de una tradición que México reconoce como suya y que proyecta al mundo como parte de su identidad.