Connect with us

MUNDO

Las manifestaciones contra el racismo y abuso policiaco: Borrando la historia, el futuro basado en el desorden

Publicado

el

Política Global, por Jorge López Portillo Basave //

En un emotivo y cálido mensaje desde los Campos Elíseos el primer ministro francés Emanuel Macron afrontó los temas más delicados que sacuden a todas las democracias: el COVID19, la crisis económica, el racismo y el anarquismo.

Ante ola de protestas por racismo y abuso policiaco que desde Japón hasta Washington envuelven al mundo reventando las puertas del encierro y de la “Sana Distancia”, el político resumió lo que otros mandatarios y líderes han balbuceado… “no toleraremos racismo, ni discriminación étnica…” pero tampoco “construiremos nuestro futuro basados en el desorden, sin orden republicano no hay ni seguridad ni libertad”.

En la difícil tarea de mediar entre derechos, libertades y las obligaciones, muchos mandatarios enfrentan desafíos que se acrecientan con la presencia de anarquistas violentos quienes aprovechan y secuestran movimientos de protesta para conseguir otros fines usando el nombre de George Floyd o cualquiera que se pueda.

En el tema económico lanzó un mensaje dirigido a Francia a Europa y al mundo en el que aseguró que Francia y Alemania harían todo lo necesario para “recuperar la economía de la Unión Europea”. Un mensaje dirigido a los locales pero también a los italianos que han sido muy críticos de las otras naciones por lo que ellos dicen “la falta de apoyo que pone en riesgo el futuro” de dicha liga de naciones. Italia se ha quejado de haber sido “tratado como leproso durante la pandemia” y coquetea con China, quien ya es dueño de varias instalaciones estratégicas como el puerto de Génova o varias zonas de industria en la cercanías de Milán.

En dicho mensaje Macron dio varias líneas encaminadas a fomentar la unidad nacional y el nacionalismo, llegando al punto de mandar un mensaje de crítica a EUA y a China. “Para salir de esta crisis el camino es simple, trabajar más, producir más para no tener que depender de otros (…) crearemos una nueva independencia europea”. La región sufrió mucho económica y emocionalmente por no tener la capacidad para generar los equipos indispensables cayendo víctima de precios muy altos por artículos que en su mayoría únicamente producía China.

Sobre el tema del COVID19 decidió dar luz verde a las actividades económicas y recreativas e incluso viajó a Inglaterra para promover el turismo, el comercio y la amistad entre ambos países, aprovechando la oportunidad para “agradecer infinitamente” –dijo el mandatario francés-, al pueblo inglés y a la memoria de Churchill por su apoyo en contra de la ocupación nazi de 1940. Recordando que el General D´Gaulle acudió en persona a pedir el apoyo británico y desde Londres “envió un mensaje de aliento a la resistencia francesa que vivía en las sombras al otro lado del Canal de la Mancha”.

En Inglaterra los anarquistas y algunos protestantes con ideología de izquierda que demandan tolerancia e igualdad, atacan y tratan de derrumbar estatuas de personajes como Winston Churchill e incluso Gandhi, lo que enfrenta a grupos de locales de derecha, de independientes y de ultra derecha, quienes buscan defenderlas. Aunque usted no lo crea, ingleses de derecha defienden a Gandhi y por supuesto a Churchill y afroamericanos y liberales atacan monumentos a los libertadores.

PROTESTAS Y DESMANES EN EEUU

En EUA las divisiones son innecesariamente incendiadas por el propio Presidente Trump. El eterno pleito entre él y sus opositores, sirven de sombra para que actos de vandalismo como los saqueos, los grafitis y destrucciones en monumentos de George Washington, Abraham Lincoln y Cristóbal Colon pasen desapercibidos. Eso sin mencionar las balaceras dentro de zonas ocupadas por protestantes que ante la falta de policía causan muertos en Seattle por la obstrucción al paso de vehículos de paramédicos, quienes no pudieron tener acceso a la zona que dichos manifestantes mantienen bloqueada. Lo que cuestiona la propia idea de solidaridad humana de dichos grupos a favor de los heridos.

EUA está dividido entre los que quieren desaparecer a las instituciones y desaparecer a la policía –¿les suena conocido?-, y los que piensan que todo está bien. Con un Presidente impulsivo en pleno auto-sabotaje, que fue avergonzado y puesto en su lugar esta semana por la Suprema Corte de Justicia, quien desechó el argumento que elaboró el equipo jurídico del Departamento de Seguridad Nacional para eliminar el programa DACA porque -según La Corte-, dicho proyecto no cumple ni explica detalladamente las razones para terminarlo o las consecuencias a los afectados. La resolución da la posibilidad para que dicha petición sea presentada nuevamente y debidamente justificada lo que prolonga la incertidumbre.

500 MIL MEXICANOS “DREAMERS”

Dentro de las divisiones y problemas semanales, más de 500 mil mexicanos que fueron llevados por sus padres a EUA cuando eran menores de edad sin documentación migratoria, lograron ganar tiempo… que es tan valioso. El programa conocido como DACA, decretado por el Presidente Obama en 2012, da a esos inmigrantes la posibilidad de obtener documentos para estudiar y trabajar en el país del tío Sam sin ser deportados, pero no les resuelve la migración definitiva. Los beneficiarios de dicho plan son unos 700 mil latinoamericanos –básicamente- de los cuales el 74% son mexicanos. Mientras que el status quo no cambie, los “dreamers” podrán estar tranquilos sin ser deportados, pero ellos y sus padres indocumentados en EUA seguirán siendo botín político de Demócratas y Republicanos.

AVANCE GLOBAL CHINO

China aprovechó muy bien estos atípicos meses del 2020, pero puede que esté abriendo muchos frentes esperanzado en su dominio comercial y ahora cibernético en redes sociales que le permiten influir en las conversaciones populares de los países democráticos y tratar de cargar la balanza según le convenga, incluso en elecciones.

Naturalmente cuenta con Rusia, Irán y Corea del Norte como aliados. Con quienes coordina acciones globales o regionales militares, comerciales y diplomáticas, pero no todo es miel sobre hojuelas, Twitter canceló recientemente más de 170 mil cuentas que difundían desde esos países, datos falsos o con agendas de división.

El pasado viernes los integrantes de la Unión Europea –UE- acordaron acciones con un mensaje claro que hoy se repitió en la cumbre virtual China-UE : No se tolerarán las violaciones a los derechos políticos en Hong Kong ni en contra de los musulmanes encerrados en campos de “reeducación” en China continental. El Presidente de la UE dijo claramente que para hacer efectivo su acuerdo, “los países europeos tienen muchas herramientas”.

El Presidente Xi Jinping ha tenido una semana complicada desde el enfrentamiento a golpes y pedradas –sí a golpes y con piedras-, entre soldados de China e India en la frontera que divide a los países, ocasionando 20 hindúes muertos y 40 chinos –sin confirmar-. El territorio inhóspito es clave para dar acceso hacia Oriente Medio y el Tíbet, después de todo, India dio asilo político al Dalai Lama cuando huyó de su hogar por la ocupación China en marzo de 1959 cruzando por esa zona del Himalaya.

Después del enfrentamiento el Gobierno de la India bloqueó 52 Apps acusando a Beijing de usar dichas tecnologías para recabar información confidencial de ciudadanos y gobiernos e influir en decisiones políticas de otros países. Las aplicaciones incluyen nombres populares como Zoom y WeChat. En el pasado Zoom justificó la intervención de comunicaciones como parte de las leyes que rigen en el lugar en el que están basadas sus operaciones y equipos, es decir China.

A las afueras de la embajada China en Tokio, un grupo de manifestantes realizaron protestas contra del régimen comunista por los cambios a la ley básica de Hong Kong que pretende criminalizar la libertad de expresión.

En EUA se publicó una Ley que sanciona financieramente a los políticos chinos que estén relacionados con los “campamentos de asimilación cultural”. Reportes de organismos internacionales del 2017 al 2019, 1.5 millones de musulmanes han sido “reeducados” en dichos campamentos incluyendo a más de 500 mil menores de edad. Ante el dividido proceso electoral que vive nuestro vecino del norte, poco preocupa a China lo que diga o deje de decir Washington, al menos durante los próximos 3 meses. Recordemos que Joe Biden ha dicho que “China no es una amenaza”.

Después de 18 meses de espera, el jueves la fiscalía china acusó formalmente a dos ciudadanos canadienses por actos de espionaje; ellos fueron detenidos el 10 de diciembre del 2018, coincidiendo con la detención en Canadá de la directora financiera de Huawei, detenida apenas cinco días antes, a solicitud de EUA por violaciones a tratados financieros internacionales. La acusación formal causó fuertes declaraciones por parte del Primer Ministro Trudeau, quien ve este asunto como un “mensaje” de Beijing para provocar un intercambio digamos un “toma y daca”. La diferencia más obvia entre ambos casos es que los canadienses están casi incomunicados, incluso sus abogados y familiares acusan las condiciones de la detención, mientras que en Vancouver la ciudadana de China goza de libertad condicional y de un nivel de vida cómodo como se ve en sus paseos y entrevistas.

Ya entrados en el envío de “mensajes” extra diplomáticos, el viernes por la mañana el Primer Ministro Scott Morrison informó que varias instalaciones estratégicas y servicios tanto públicos como privados, estaban siendo víctimas de un “sofisticado ataque cibernético”…“coordinado por un gobierno extranjero”, apuntando al Gobierno de China con quien han tenido diferencias y tensiones muy importantes en fechas recientes por el Comercio Exterior, el COVID19 y los bandazos de la OMS que cada semana cambia las recomendaciones y les “recuerda a los protestantes que quieren tirar estatuas que en Australia no hubo esclavitud”.

En el 2015 la Agencia de Seguridad Cibernética del país austral, señaló que China habría “hackeado” cuentas de correo electrónico y comunicaciones del propio parlamento y partidos políticos australianos.

El camino a la cumbre es escabroso y Xi Jinping está dispuesto a pagar el costo, mientras las otras potencias avivan peleas intestinas y se asustan de su propia imagen. “Cuando tu enemigo se equivoca, no lo interrumpas”.

Continuar Leyendo
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

MUNDO

El nacionalismo de Donald Trump: ¿Una solución o un riesgo?

Publicado

el

Opinión, por Samantha Contreras Guerrero //

La victoria de Donald Trump, basada en un mensaje de fuerte nacionalismo, marca un cambio que impactará tanto a Estados Unidos como al resto del mundo. Sus promesas de traer empleos de vuelta y proteger la economía estadounidense responden al descontento de muchos de sus votantes.

Su idea de “América Primero” busca hacer que Estados Unidos sea más independiente y fuerte, pero en un mundo tan conectado, esta visión enfrenta muchos retos y posibles problemas.

Para los estadounidenses, en un mercado donde casi todo se produce a través de cadenas internacionales, enfocarse en lo nacional podría hacer que los precios aumenten y haya menos opciones para los consumidores. Este tipo de enfoque proteccionista no solo implica costos altos para las empresas, sino que podría dar una falsa idea de seguridad económica, ya que el crecimiento estaría limitado solo al mercado interno, dejando de lado oportunidades con otros países.

En el ámbito internacional, el enfoque nacionalista de Estados Unidos genera preocupación entre sus aliados. Países como México, que dependen en gran medida del comercio y la inversión estadounidense, ven en riesgo la posibilidad de mantener relaciones estables e igualitarias.

El decremento en sectores como el nearshoring —donde América Latina ha visto una oportunidad de crecimiento— podrían ser afectados con este tipo de políticas. Además, al alejarse de acuerdos internacionales, Estados Unidos podría debilitar el sistema de cooperación global, necesario para enfrentar problemas complejos como el conflicto en Oriente Medio o la crisis climática.

La gran pregunta es si este regreso al proteccionismo es una solución real a los problemas económicos actuales. La inflación y la desigualdad están en aumento en todo el mundo, y Estados Unidos no es la excepción. En lugar de cerrarse, podría beneficiarse de una política que tome en cuenta las necesidades de todos sus sectores, buscando reducir las diferencias internas como la acumulación de riquezas, sin renunciar a los beneficios del comercio global.

El nacionalismo de Trump es una reacción a los problemas de un sistema económico que ha dejado atrás a muchas personas en Estados Unidos. Sin embargo, en un mundo hiperconectado, el aislamiento no puede evitar generar preocupación. Aunque la intención de proteger a los ciudadanos es válida, esta ideología corre el riesgo de afectar a largo plazo a aquellos mismos sectores que busca ayudar, reduciendo la capacidad de Estados Unidos para influir y crecer en la economía global.

E-mail: samcg2002@gmail.com

Continuar Leyendo

MUNDO

Querámoslo o no, Donald Trump ha vuelto

Publicado

el

Desde los campos del poder, por Benjamín Mora Gómez //

Lo recuerdo, era mi cumpleaños 20 y también domingo, y corría el año de 1973, y mi padre me regalaba “El Gran Gatsby”, la muy apasionante novela de F. Scott Fitzgerald, dos de sus ejes contenidos me cautivaron: La alienación y el impulso de Jay Gatsby por sentirse aceptado por una alta sociedad segregante, aun y a pesar de ser inmensamente rico, realidad que quizá se expresa más claramente en una frase de la obra: “La vida es una lucha de apariencias, una lucha de lograr y de tener más de lo que uno merece”.

Donald Trump es un claro ejemplo, muy actual y presente en el mundo, de la fuerza del impulso de tenerlo todo: Poder económico y poder político. Donal Trump está entre los hombres más ricos de Estados Unidos, y fue el 45º y será el 47º presidente de aquella nación.

Donald, quien perdió en 2020 ante Joe Biden al buscar reelegirse como presidente de Estados Unidos, cuatro años después descarriló a Biden en su también anhelada reelección, obligándolo a abandonar la carrera presidencial, y derrotó ampliamente a Kamala Harris, la relevo en el Partido Demócrata.

Donald Trump ha vuelto al poder más fuerte de lo jamás imaginado para cumplir con sus planes de preeminencia y grandeza norteamericana e imponer su visión conservadora de Estados Unidos ante sí mismo y ante el mundo. Trump es un hombre transparente; jamás deja nada a la imaginación y dudas de sus seguidores y detractores. Así, por ejemplo, para él, la Teoría de Género tiene los días contados en EEUU y sus promotores sabrán que tienen ante sí a su peor pesadilla.

El presidente Donald Trump, a partir del 20 de enero próximo, actuará con todo el poder para poner orden en su frontera con México en dos temas fundamentales, las acciones de los cárteles de la droga, declarándolos terroristas, y el tráfico humano, ambos vistos como gravísimas omisiones del expresidente Andrés Manuel López Obrador. Marco Rubio, próximo secretario de Estado norteamericano, lo ha acusado públicamente, y nos lo recordará todos los días. Rubio es de palabra dura y mano aún más dura. Para Trump y Rubio los narcotraficantes son terroristas y los perseguirá con toda la fuerza del Estado norteamericano.

La esperanza nunca debería sustentarse en la venganza. No entiendo a quiénes cifran la satisfacción de su venganza hacia López Obrador en Marco Rubio. Sea cual fuere el resultado de la dureza del nuevo secretario de Estado norteamericano, es mi deseo que México vuelva, de mutuo propio, al orden y la paz, y que el gobierno y el congreso mexicanos no nos convoquen a rasgarnos las vestiduras ante las exigencias norteamericanas. Son justas.

En México, muchos de quienes estaban a favor de Kamala Harris, hoy se muestran muy a favor de Donald Trump. Su nacionalismo se mantiene muy firme; sin embargo, aceptan que ya es tiempo de poner en orden las cosas en México pues el estado mexicano, sin duda, está doblegado y resquebrajado ante los cárteles de la droga. Claudia Sheinbaum no ha demostrado estar dispuesta a cumplir a cabalidad con su mandato presidencial en materia de seguridad a pesar de los buenos oficios de Omar García Harfuch pues, peor, no desea tomar el mando que aun detenta López Obrador.

Sheinbaum deberá entender que solo tiene de dos sopas, o se arma de valor ante los cárteles y los traficantes de gente y los combate con toda la fuerza del Estado mexicano, o los gringos cumplirán con esa su obligación constitucional, interviniendo aun en nuestro territorio. Que de nada le valdrán las bravatas de Marcelo Ebrard en materia económica ante los gobiernos norteamericano y canadiense.

Que esto nos es pleito entre escolapios en donde uno echará al otro a su padre que es bombero y lo mojará con su manguera, y el otro a su padre que es policía y lo llevará a la cárcel. Que en cosas de gobierno se actúa conforme a la ley y se cumple con los tratados internacionales. Que Naciones Unidas tiene un centro en contra del terrorismo que a México obliga.

Un adelanto de la presión internacional que el gobierno de México enfrentará en los años próximos ya lo recibimos en esta semana. La calificadora Moody’s cambió de estable a negativa la perspectiva económica de México por el debilitamiento de nuestro Estado de derecho por la reforma judicial y el deteriorado entorno institucional gubernamental, el esperado aumento en el costo de la deuda internacional de México y la mayor rigidez del gasto público, que podrían socavar nuestros resultados fiscales y económicos.

Tanto Moody’s, como los principales analistas de los futuros económicos en el mundo, coinciden en calificar como de muy alto riesgo la reciente reforma aprobada por Morena, PT y Verde al Poder Judicial. Sheinbaum, obedeciendo a López Obrador, ha decidido alterar los controles y equilibrios del poder político y económico en México, y eso se le, se nos, cobrará muy caro.

Quiero invitarte a pensar en que Trump no está para salvarnos, ni Rubio para vengarnos. Ellos tienen sus tareas más allá del Rio Bravo. De este lado, todo depende de nosotros. Vamos, ni Sheinbaum hará nada para salvarnos; a ella solo le interesa obedecer a López.

Continuar Leyendo

MUNDO

En riesgo la hegemonía estadounidense: El retorno de Donald Trump; retos económicos y sociales

Publicado

el

Actualidad, por Alberto Gómez R. //

En los últimos cuatro años, la economía y la cohesión social de Estados Unidos han enfrentado un deterioro significativo, marcando uno de los periodos más complicados en su historia reciente.

La administración de Joe Biden, aunque intentó implementar políticas para estimular la recuperación tras la pandemia de COVID-19, dejó profundas brechas económicas y sociales que ahora desafían al presidente electo Donald Trump. Con un escenario global en transformación y un entorno interno polarizado, Estados Unidos se encuentra en un momento crítico de redefinición de su papel como potencia mundial.

LA ECONOMÍA BAJO LA ADMINISTRACIÓN DE BIDEN

La inflación se convirtió en uno de los mayores retos durante la administración Biden. La epidemia de Covid-19 dejó tras de sí trastornos económicos; en junio de 2022, la inflación alcanzó un pico histórico del 9.1%, las tasas más altas que los estadounidenses han experimentado en 40 años, según la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) lo que, por supuesto, en la práctica suponía un recorte salarial. La explosión del gasto militar para apoyar las guerras en Ucrania y Gaza también ha alimentado la inflación.

Como resultado, el nivel de vida de las y los trabajadores estadounidenses ha disminuido bajo la administración Biden, mientras que el auge del mercado de valores ha ayudado a las y los estadounidenses más ricos a hacerlo bastante bien. Este fenómeno, impulsado por interrupciones en las cadenas de suministro globales, estímulos fiscales masivos y el aumento de los precios de la energía, erosionó el poder adquisitivo de las familias estadounidenses. Aunque las medidas de la Reserva Federal lograron reducir la inflación a un 3.7% al cierre de 2024, esta cifra seguía por encima del objetivo del 2%, lo que refleja un entorno económico aún frágil.

El aumento del costo de vida se manifestó en productos esenciales. Según la Administración de Información Energética (EIA), el precio promedio de la gasolina aumentó un 40% entre 2020 y 2024. Asimismo, los alimentos básicos experimentaron un incremento promedio del 25%, afectando especialmente a las familias de ingresos medios y bajos. Esta situación exacerbó la desigualdad, ya que los salarios reales apenas crecieron un 3% durante el mismo periodo, según el Economic Policy Institute.

DÉFICIT FISCAL Y DEUDA PÚBLICA

El déficit fiscal alcanzó los $1.7 billones en 2024, mientras que la deuda pública superó los $36 billones, según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), un incremento alarmante respecto a los $27 billones reportados al inicio de la administración Biden. Este nivel de endeudamiento, alimentado por programas de estímulo económico y políticas de infraestructura, limita la capacidad del gobierno para responder a futuras crisis económicas. Además, el creciente costo del servicio de la deuda, derivado del aumento de las tasas de interés, se ha convertido en una carga significativa para el presupuesto federal.

La brecha económica continuó ampliándose durante la administración Biden. El 1% más rico de la población concentró el 38% de la riqueza total en 2023, mientras que los sectores más vulnerables enfrentaron mayores dificultades para acceder a empleos estables, y apenas aumentaron un 4% en términos reales, según un informe de la Oficina del Censo. Según el Departamento de Trabajo, el empleo precario representó el 30% de los nuevos puestos creados entre 2020 y 2024, con un aumento notable en los contratos temporales y trabajos a tiempo parcial. Esto ha exacerbado la pobreza en comunidades vulnerables, con un índice de pobreza que aumentó del 11.4% en 2020 al 14.7% en 2024.

En 2016, Hillary Clinton demostró su desprecio por los partidarios de Trump, entonces abrumadoramente blancos, etiquetándolos como “los deplorables”, en lugar de tratar de reconocer la fuente de su ira: la gran desigualdad en el statu quo económico. Ocho años después, con un apoyo a Trump mayor en prácticamente todos los grupos demográficos, es imposible ignorar la desesperación económica que alejó del Partido Demócrata a las y los electores, cuando Biden seguía presumiendo de que la economía estadounidense durante su mandato es “la más fuerte del mundo”.

FACTORES SOCIALES: POLARIZACIÓN Y RADICALIZACIÓN

La polarización política se ha intensificado, dando lugar a movimientos separatistas que, aunque minoritarios, representan una amenaza para la unidad del país. Uno de los fenómenos más alarmantes es el resurgimiento de movimientos secesionistas en estados como Texas y California.

Líderes locales y organizaciones políticas han planteado referendos para separarse de la unión federal, alegando incompatibilidades políticas y económicas. Aunque estos movimientos no tienen un apoyo mayoritario, su existencia refleja una fragmentación preocupante en la unidad nacional. Grupos como «Texit», que abogan por la independencia de Texas, han ganado tracción en sectores conservadores descontentos con las políticas federales. Estas iniciativas reflejan el creciente desencanto con el sistema político.

La radicalización ideológica también se ha intensificado. Los crímenes de odio aumentaron un 18% entre 2020 y 2024, según el FBI, afectando principalmente a comunidades afroamericanas, asiáticas, judías y musulmanas. Este aumento está vinculado al resurgimiento de grupos extremistas y al uso de las redes sociales como plataformas para propagar discursos de odio.

RETOS ECONÓMICOS Y SOCIALES

Con la reelección de Donald Trump, Estados Unidos se adentra en un periodo de grandes desafíos. Su promesa de «recuperar la grandeza estadounidense» enfrenta múltiples obstáculos, tanto internos como externos.

Trump ha anunciado un ambicioso plan para reindustrializar Estados Unidos y reducir la dependencia de las cadenas de suministro globales. Sin embargo, implementar esta estrategia requerirá superar barreras como la resistencia de aliados comerciales y la necesidad de inversiones masivas en infraestructura. También deberá manejar las tensiones con China, el principal socio comercial de Estados Unidos, en un momento en que las relaciones bilaterales están en su punto más bajo en décadas.

El presidente electo ha prometido recortes de impuestos para estimular el crecimiento económico, pero esta medida podría agravar el déficit fiscal si no se acompaña de reducciones en el gasto público. Además, la capacidad de implementar estas políticas dependerá de su habilidad para negociar con un Congreso dividido, donde los demócratas probablemente resistirán cualquier iniciativa que reduzca programas sociales.

El enfoque de Trump en políticas ultraderechistas, incluida la restricción de la inmigración y la eliminación de regulaciones ambientales, podría generar más divisiones. Aunque estas medidas cuentan con el apoyo de su base electoral, enfrentan la oposición de sectores progresistas y moderados, lo que podría derivar en mayores tensiones sociales.

EL FIN DE LA HEGEMONÍA ESTADOUNIDENSE

El bloque BRICS+ ha emergido como un desafío significativo para la hegemonía estadounidense. Con la inclusión de nuevos miembros como Arabia Saudita, este grupo busca crear un sistema financiero alternativo que reduzca la dependencia del dólar. Según el Banco Mundial, el comercio intrabloque creció un 15% anual durante los últimos cuatro años, fortaleciendo su influencia económica y política.

El dólar, pilar del sistema financiero internacional, está perdiendo su posición dominante. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la proporción de reservas globales en dólares cayó del 61% en 2020 al 55% en 2024. Este descenso refleja una creciente diversificación hacia monedas como el yuan chino y el euro, impulsada por iniciativas del BRICS+ y otros bloques emergentes.

En el ámbito militar y geopolítico, Estados Unidos enfrenta el ascenso de China como potencia dominante en el Pacífico y la reactivación de Rusia en Europa del Este. Además, la influencia de potencias regionales como Irán y Arabia Saudita en el Medio Oriente limita la capacidad de Estados Unidos para mantener su dominio en esta región estratégica.

El futuro socioeconómico de Estados Unidos dependerá en gran medida de la capacidad de la administración Trump para manejar una economía debilitada, una deuda insostenible y una sociedad fracturada. La reconciliación política y la creación de un camino inclusivo para el desarrollo serán cruciales para evitar una crisis prolongada.

Aunque Trump tiene un historial de promover el crecimiento económico, los riesgos asociados con su estilo confrontacional y sus políticas divisivas no pueden ser ignorados. El equilibrio entre reformar el status quo y evitar una mayor radicalización será la prueba definitiva para su liderazgo.

Estados Unidos enfrenta uno de los periodos más complejos de su historia contemporánea. La administración Biden dejó un legado de desafíos económicos y sociales que el presidente electo Donald Trump deberá abordar en un contexto de polarización interna y competencia internacional.

El éxito o fracaso de las políticas de Trump determinará no solo el rumbo de Estados Unidos, sino también el equilibrio de poder en el mundo. Sin embargo, para superar estos retos, será necesario un liderazgo que trascienda la retórica divisiva y busque soluciones inclusivas y sostenibles. En un mundo cada vez más multipolar, el destino de Estados Unidos dependerá de su capacidad para adaptarse a las nuevas realidades globales sin perder de vista los principios democráticos y la cohesión interna que alguna vez lo definieron como nación.

Continuar Leyendo

Tendencias

Copyright © 2020 Conciencia Pública // Este sitio web utiliza cookies para personalizar el contenido y los anuncios, para proporcionar funciones de redes sociales y para analizar nuestro tráfico. También compartimos información sobre el uso que usted hace de nuestro sitio con nuestros socios de redes sociales, publicidad y análisis, que pueden combinarla con otra información que usted les haya proporcionado o que hayan recopilado de su uso de sus servicios. Usted acepta nuestras cookies si continúa utilizando nuestro sitio web.