CULTURA
Los extremos de la pasión y la idolatría: La enajenación en el futbol es globalizada

Miscelánea Deportiva, por Esteban Trelles Meza //
La cultura de un pueblo es parte fundamental para su desarrollo mismo en diferentes rubros y actividades destacando lo político, social, económico, artístico, deportivo etc.
Las grandes potencias mundiales tienen prácticamente todos los rubros y actividades de primer nivel y sus habitantes tienen una preparación intelectual personalizada por encima del nivel promedio globalizado.
El país más poderoso del mundo USA destina para el deporte de alto rendimiento millonadas de dólares al año para ciclos olímpicos y mundiales, tanto individual como de conjunto, que se reflejan en el medallero la supremacía y el poder de este país hermano.
En Europa los gustos refinados forman parte de su cultura que musicalmente aprecian las sinfonías clásicas, ópera, zarzuela, rock, electrónica, etc, en una variedad de gustos y refinamientos de calidad.
Europa tiene en sus respectivos países futbolísticamente mejor nivel intelectual no solo como espectáculo, sino en la afición que se comportan adecuadamente en sus estadios sentados cómodamente de manera civilizada observando los encuentros de futbol, que no tienen mallas ciclónicas, ni barras por lo que ven los encuentros con una visibilidad que le permite captar todos los detalles en cancha.
Inglaterra, Italia, Alemania, Francia, España, Portugal, Bélgica, Austria, Grecia, Países Bajos, Hungría, Republica Checa, Polonia, Rumania, Bulgaria, Dinamarca, Noruega, Suecia, Croacia , Yugoslavia, entre otros países.
Sus Ligas internas son altamente competitivas como lo es su representativo nacional en justas europeas y mundialistas, que si bien en el pasado existieron broncas monumentales, principalmente en Inglaterra con los llamados “Holigans”, que eran verdaderamente brutales y explosivos con saña desmedida armando broncas por doquier, que incluso la finada Reina Isabel II intervino para poner orden puesto que ya era un problema a nivel mundial y un descrédito para su país.
Por supuesto que existieron desmanes en países del centro de Europa dada su colindancia entre ellos que los “hinchas”, viajaban apoyando sus equipos de clubes y de selección nacional que en Bélgica y otros países sufrieron la violencia extrema que afortunadamente lograron controlarla.
Curiosamente en el tema futbolístico la máxima potencia Brasil, que su gente culturalmente no es de buen nivel intelectual, sino por el contrario, existe pobreza extrema en menor medida inundadas por las llamadas fabelas concurridas en demasía, sus conglomerados de familias numerosas con pocos recursos económicos, guarida de maleantes y malvivientes.
En el país de la Samba llegan al fanatismo con su equipo penta campeón, mundialista, considerado el mejor del orbe, que es una mezcla de religión en el que depositan sus sentimientos la mayoría de sus pobladores en su selección nacional que es de las más poderosas del mundo generacionalmente con su “Jogo Bonito”, teniendo a su majestad Pelé el mejor de todos los tiempos.
Argentina, potencia futbolística con cientos de jugadores diseminados en el mundo, trovadores bohemios, gitanos que en comparación de los amazónicos están debajo de ellos, que tienen un mejor nivel sus habitantes político- social más claro y definido, que como siempre las masas populares que imperan en el futbol son fanáticos recalcitrantes, apasionados en extremo con sus barras de locos enajenados que brincan y saltan en todo el encuentro.
EL TEMPLO MARADONIANO
El fenómeno de Diego Armando Maradona va más allá del común denominador en una enajenación que raya en lo patético, en la idolatracion de unao de los máximos exponentes futbolísticos al crear en Argentina una Iglasia Maradoniana que ahora se extiende por todo el mundo, llegando a nuestro país concretamente en San Andrés Cholula en Puebla, a pocos kilómetros de su capital.
Marcelo Buchet, argentino nacionalizado mexicano, es el fundador de este templo referido que se llevó a cabo hace par de años la primera boda entre mexicanos con el “evangelio” del ritual, que se dice en un episodio la “mano de dios”, en referencia al encuentro contra Inglaterra en el México 86 que ganaron los argentinos ese mundial.
El Creador en esencia es espiritualmente correcto donde no cabe la trampa y el ardid, puesto que la mano realizada por Maradona incurrió de manera “tramposa”, para anotar un gol, que el árbitro no observó y dio por bueno, dando al traste parte de la iniciación de marido y mujer en un tema religioso fuera de contexto.
Vicente Avendaño Fernández, director técnico espiritual de la iglesia maradoniana, pidió a los novios quererse y respetarse en los mementos buenos o malos que ocurren en los estadios.
El novio aseguró estar emocionado y nunca olvidar esta ceremonia aunque saliendo de esta celebración realizaron la boda civil y la católica tradicional.
El único requisito que tiene esta iglesia es donación de víveres o algún aparato ortopédico que serán donados a familias de escasos recursos.
Para cerrar el tema argentino, este dato es más que suficiente en la enajenación de lo que es el futbol y su entorno de manera apasionada y fanática.
Uruguay, la tercera potencia en Sudamérica, tiene un poco más de tres millones y medio de habitantes con jugadores de futbol también diseminados en el mundo con calidad de excelencia que tiene en su haber al igual que Argentina dos campeonatos mundiales.
La fanaticada en general de los países en Sudamérica son apasionados al máximo, con broncas descomunales entre ellos en su liga interna, sus jugadores se “dopan” frecuentemente en el entretiempo con un té milagroso, que el propio Carlos Reynoso, chileno y antes de él, Luis Grill, argentino también hacía lo propio con sus jugadores denunciados en su momento por ellos mismos.
México, como se diría, “se cuece aparte”, coloquialmente para definir lo que es como país futbolero que no tiene identidad propia (solo aquella del “chiquiti bum a la bim bom ba”), su afición copiando a los Sudamericanos que gracias al técnico argentino André Fassi que importo una barra de locos enajenados de su país brincando y gritando todo el encuentro con frases hechas “yo si le voy, a….”, o el “ dale , dale, daleeeee”, frases que todos los equipos con su barras repiten sin mayor ingenio solo como dice el mexicano, para “echar desmadre”.
Alemania inventa, USA patentiza, Japón reduce y México “chotea”, lo mencionamos para ratificar nuestro dicho anteriormente que el mexicano carece de ingenio y personalidad para expresar sus sentimientos en las graderías de los estadios como otros países sí lo hacen, con excepción del grito homofóbico de todos conocidos “Heeeeee …..pu…”, que es ya un problema para FIFA que cuesta a selección nacional multas millonarias por el mal comportamiento de pseudo aficionados.
La equidad de género tan promocionada en nuestro país tiene la incursión del futbol femenino que a pasos agigantados y con calidad tienen participación en la Liga MX profesional, que tenemos satisfacciones a nivel de selección nacional en justas internacionales, que cada vez crece más en nuestro entorno, que paulatinamente tiene su propia afición con otro enfoque de orden y disciplina.
Por ultimo, destacar que en este país el tema político, religioso y futbolístico es de encono e incluso como se diría en el viejo oeste “sacan sus armas”, para envalentonarse y defender situaciones que no dependen de uno mismo con pleitos y descalificaciones que hablan de la idiosincrasia del mexicano en su cultura misma.
E-mail: etrememodelos@hotmail.com
CARTÓN POLÍTICO
Edición 807: Magistrada Fanny Jiménez revoca rechazo de pruebas y defiende Bosque de Los Colomos
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LAS CINCO PRINCIPALES:
CULTURA
Premios Ariel, la magia del cine mexicano: Jalisco es epicentro del evento

– Conciencia en la Cultura, por Luis Ignacio Arias
Los Premios Ariel, máximo reconocimiento de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) se entregarán el 20 de septiembre. Por tercer año consecutivo, Jalisco ha sido la sede de los Premios Ariel, en esta ocasión se celebran en Puerto Vallarta.
La AMACC impulsa una política de itinerancia para que los Ariel dejen de celebrarse exclusivamente en la Ciudad de México, buscando y fortalecer la conexión entre la industria cinematográfica nacional y los diversos estados. Jalisco ha mostrado una receptividad notable a esta política, ofreciendo no solo capacidad logística e infraestructura adecuada, sino también apoyo institucional y económico.
A través de la Secretaría de Turismo y FILMA Jalisco, el estado ha otorgado incentivos para atraer producciones, políticas públicas de cine y recursos concretos para la realización de la ceremonia, como los más de 10 millones de pesos destinados a la producción del evento 2025. Además, la elección de Puerto Vallarta como sede se vincula con un interés estratégico por consolidar un polo cinematográfico dentro del estado.
Con apoyos como el “cash rebate”, la comisión de filmaciones y la existencia de festivales de cine consolidados como el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), demuestra que puede ofrecer garantías logísticas y técnicas para eventos de gran magnitud, al mismo tiempo que refuerza su visibilidad cultural y turística.
El gobierno del estado ha buscado que los Ariel sirvan también como plataforma de promoción turística, vinculando cine, cultura y visitantes; la cobertura mediática que genera el evento, junto con los atractivos turísticos de Puerto Vallarta, amplifica la proyección del estado en el ámbito nacional e internacional.
Esta política contempla además la diversificación dentro del propio territorio jalisciense: si bien los premios se han celebrado en Guadalajara y ahora en Puerto Vallarta, la intención es rotar la sede dentro del estado en futuras ediciones, mostrando así la variedad de escenarios y consolidando a Jalisco como un punto neurálgico del cine mexicano contemporáneo.
Entre las películas nominadas, Pedro Páramo de Rodrigo Prieto se consolidó como una de las favoritas, obteniendo 17 nominaciones. La ópera prima de Prieto es una adaptación de la emblemática novela de Juan Rulfo que fusiona el realismo mágico con una estética cinematográfica contemporánea, aprovechando la experiencia del director como director de fotografía.
Su propuesta visual busca capturar la atmósfera surrealista de la obra literaria, y cada encuadre, cada composición lumínica, remite a la memoria de un México lleno de fantasmas y ecos del pasado. Prieto logra, con sorprendente soltura para un debut en la dirección, trasladar la intensidad emocional y la ambigüedad de los personajes a la pantalla, mostrando un cine que dialoga tanto con la tradición literaria como con el lenguaje cinematográfico moderno.
La Cocina, dirigida por Alonso Ruizpalacios, también acaparó la atención de la crítica y del público, con 15 nominaciones en diversas categorías. Ruizpalacios, conocido por su capacidad de mezclar humor, crítica social y frescura narrativa, invita a explorar las dinámicas de poder y género en un contexto culinario, donde la cocina se convierte en un microcosmos de tensiones, aspiraciones y secretos.
La dirección de Ruizpalacios se distingue por su ritmo ágil, su atención al detalle y la manera en que los personajes se despliegan en un espacio aparentemente cotidiano, transformando lo familiar en un escenario de reflexión sobre la sociedad contemporánea mexicana.
Sujo, codirigida por Fernanda Valadez y Astrid Rondero, recibió 13 nominaciones y ofrece una mirada íntima y profunda a la búsqueda de identidad de una joven que enfrenta los retos de la migración y la pertenencia. Valadez y Rondero despliegan un estilo cinematográfico sensible, que combina la narrativa íntima con un fuerte compromiso social.
La película se mueve entre el drama personal y la denuncia de condiciones sociales, logrando un equilibrio entre emoción y reflexión, mientras invita al espectador a contemplar los dilemas humanos y la construcción de la identidad frente a contextos adversos.
Corina, de Úrsula Barba Hopfner, con 9 nominaciones, centra su historia en las complejidades de las relaciones humanas y la búsqueda de la verdad en la interacción entre sus personajes. Hopfner demuestra un manejo refinado de la introspección dramática y una capacidad notable para capturar la esencia de cada individuo, explorando cómo los deseos, miedos y secretos moldean las decisiones y la convivencia. Su dirección, delicada y precisa, pone en primer plano la psicología de los personajes y transforma la narrativa en un examen de la condición humana contemporánea.
Finalmente, Un actor malo, que obtuvo 5 nominaciones, se destaca por su reflexión sobre la identidad, la percepción pública y los conflictos entre la vida personal y la fama. La película combina elementos de comedia y drama con un estilo original y arriesgado, mostrando cómo la construcción de la imagen propia y la exposición ante los demás pueden convertirse en territorio de exploración artística y social. Su dirección, creativa y audaz, logra mantener la tensión entre humor, ironía y crítica, permitiendo al espectador identificarse con los dilemas del protagonista y reflexionar sobre el espectáculo de la vida pública.
El conjunto de estas películas refleja la diversidad y riqueza del cine mexicano contemporáneo. Cada una de ellas ofrece una perspectiva única sobre temas universales como la identidad, el poder, la migración y las relaciones humanas, evidenciando la capacidad del cine nacional para dialogar con su contexto histórico y social. La crítica y la audiencia han reconocido que, más allá de la técnica y la narrativa, estas producciones invitan a la reflexión y al cuestionamiento, ofreciendo miradas que son tanto íntimas como colectivas, particulares y universales.
Los nominados a los Premios Ariel ponen de manifiesto la evolución y el dinamismo de la industria mexicana. Las películas y sus directores son la muestra de que el cine mexicano continúa siendo un espacio de innovación, reflexión y expresión artística que resuena dentro y fuera del país, consolidando su relevancia en el panorama global.
CULTURA
México celebra el Día Nacional del Charro: tradición, deporte y orgullo patrio

– Por Redacción Conciencia Pública
Cada 14 de septiembre México rinde homenaje a una de sus tradiciones más representativas: la charrería.
El Día Nacional del Charro fue instaurado en 1934 como una manera de reconocer al charro como figura central de la identidad mexicana y al mismo tiempo consolidar este deporte ecuestre como una práctica cultural de enorme arraigo.
Esta celebración se vive en todo el país, desde los lienzos charros hasta las plazas públicas, con un ambiente que enlaza historia, destreza y orgullo patrio.
En redes sociales, la fecha adquiere una fuerza particular. Hashtags como #DíaDelCharro y #DíaNacionalDelCharro agrupan miles de publicaciones en X, Facebook, TikTok e Instagram.
Usuarios comparten fotos de trajes bordados, sombreros de ala ancha, montas de caballos y suertes espectaculares como manganas, coleaderos o el paso de la muerte.
También abundan los mensajes de autoridades, artistas y asociaciones que felicitan a los charros y escaramuzas, exaltando el valor de mantener vivas las costumbres.
La Federación Mexicana de Charrería y la Asociación Nacional de Charros son protagonistas en la promoción de actividades conmemorativas.
Desde sus cuentas oficiales en internet se difunden la agenda de charreadas, congresos y campeonatos que se desarrollan en distintos estados del país.
Las escaramuzas, grupos femeninos que ejecutan rutinas a caballo con precisión y estética, se han vuelto además un símbolo de inclusión y disciplina dentro de esta disciplina reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial desde 2016.
En municipios y capitales estatales (Guadalajara no es la excepción), el Día del Charro se acompaña de desfiles, exhibiciones y actos solemnes. No faltarán hoy los honores a la bandera ni los espectáculos ecuestres que refuerzan el vínculo entre tradición y mexicanidad.
La fecha, además, se sitúa estratégicamente en la antesala de las Fiestas Patrias, lo que le otorga un carácter doblemente simbólico: recordar el legado charro y enmarcar la conmemoración de la Independencia.
En la esfera digital, las publicaciones destacan tanto la herencia familiar como la profesionalización del deporte.
Muchos jóvenes charros y escaramuzas utilizan hoy en día redes TikTok e Instagram para mostrar rutinas, vestimentas y entrenamientos, contribuyendo a que nuevas generaciones se acerquen a la charrería.
Esa combinación entre tradición e innovación ha hecho que la conversación en línea sea particularmente activa, alcanzando públicos que van más allá de los asistentes habituales a los lienzos.
Así, el Día Nacional del Charro se mantiene como una de las celebraciones más singulares del calendario mexicano: una fusión de historia, arte ecuestre y pasión comunitaria.
La charrería no solo sigue viva, sino que se adapta a los tiempos modernos sin perder su esencia.
En cada suerte, en cada traje de gala y en cada caballo brioso, resuena el eco de una tradición que México reconoce como suya y que proyecta al mundo como parte de su identidad.