JALISCO
La lucha contra la impunidad en la UdeG: Alumnas de derecho del CUCSH ya no están dispuestas a callar

Por Diego Morales //
“Ya no cuentan con el privilegio de nuestro silencio, ya no estamos dispuestas a callar, a que esto se quede igual que siempre. Ya no es opción, que se vayan acostumbrando, porque esto es solamente el inicio”, es la denuncia que hacen las estudiantes de derecho del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara.
El mensaje lo lanzan, porque llegaron al hartazgo. En los pasillos, en las aulas, incluso en redes sociales, se sienten violentadas por sus compañeros de carrera, profesores y algunos administrativos. Por esta misma razón, prefieren el anonimato, pues en el día a día en su centro universitario, ya comienzan a tener represalias.
“Muchas compañeras están recibiendo amenazas; son personales, nos detienen en los pasillos de parte de los mismos compañeros pero sabemos que hay maestros que dicen que nos van a demandar por difamación aunque ya no exista en el Código Penal. Somos un colectivo que no tiene nombre. Las compañeras se sienten acosadas y con temor a las represalias”, expresa una estudiante de octavo semestre de la carrera de Abogado, quien prefiere no dar su nombre.
En conjunto, diversas mujeres formaron un colectivo, el cual aún no tiene nombre, pero ya se ha manifestado en el plantel, con pancartas, con señalamientos, tratando de generar una mejor condición para llevar a cabo sus labores escolares.
“En el CUCSH lo que estamos viviendo es una apatía totalmente de parte de los administrativos con las quejas que hemos presentado. Desde denuncias, hasta comentarios en la red universitaria general. Tenemos un hartazgo que no se haga nada, incluso los mismos administrativos cuando te armas de valor te dicen que no es para tanto, llegamos a un punto que ya no estamos dispuestas a mantenernos calladas”.
Al presentar las denuncias, no han encontrado eco en las autoridades universitarias, quienes les recomiendan mejor desistir en el camino por lo tardado que puede resultar una investigación de esta magnitud.
“Te recomiendan que quites la denuncia, que lo pienses bien, que será un proceso muy largo, inclusive desde la primera instancia los administrativos te desaniman a que sigas con el proceso. Nos dificulta mucho poner una denuncia. En la División de Estudios Jurídicos es la representación de una sola corriente estudiantil que es Impulso, ellos son los príncipes intocables, sus líderes estudiantiles son gente que tienen bastantes denuncias, entonces no pasa nada, se sabe públicamente que ya hasta tienen un sistema para violentar a las mujeres”.
Además, en un grupo de Facebook, llamado “Abogansters”, los acusados se mofan constantemente de su movimiento, lo cual les genera más impotencia que las cosas no cambien su realidad.
“En el plantel hay un grupo de Facebook, donde está cerca del 90 por ciento del estudiantado, pareciera que es un club de comedia, donde se hacen chistes, memes, desprestigiar nuestro movimiento. En el movimiento de mujeres feministas se vivieron burlas, publicamos una lista de acosadores, que nos han agredido de alguna manera y dicen que es solamente para desprestigiar, pareciera que cualquier movimiento que surge el objetivo es desprestigiarnos”.
Subraya: “Nos dicen que por qué no hacemos denuncias, que dónde están nuestras denuncias. Tenemos un hartazgo generalizado. Para nosotras estamos a punto de enviarlo a la defensoría de derechos universitarios, ya se hizo lo correspondiente y estamos en el proceso en donde ellos pueden limpiar su nombre para defenderse que es lo que tanto quieren. Se está trabajando con los maestros de la universidad para llevar talleres de nuevas masculinidades, necesitamos que esto cambie. Nuestro plan es seguir incomodando, seguir educando”.
LA LUCHA ES DE TODAS LAS TRINCHERAS
Para la Secretaria General de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), Fernanda Ábrica, esta lucha que han arrancado sus compañeras del CUCSH y de otros planteles de la red universitaria es la muestra que están en la misma sintonía de lucha para erradicar la violencia y el acoso en la Universidad de Guadalajara, reiterándoles el apoyo desde su trinchera como líder estudiantil.
“Las mujeres están en todo su derecho de hacer lo que están haciendo. Me siento feliz que las escuelas se manifiesten, es una manera de presionar a las autoridades. Nosotros presionamos desde la parte institucional, ellas desde su trinchera y hacemos un equipo que hace fuerza”.
Agrega: “Se han acercado conmigo varias estudiantes, las hemos acompañado en sus procesos de denuncia, llevarlas a sus escuelas, también se han acercado estudiantes para presionar un poco más y darles seguimiento de manera expedita”.
En días recientes, Fernanda Ábrica manifestó públicamente que en la Universidad de Guadalajara los espacios de toma de decisiones son exclusivamente de los hombres, lo cual al igual que el acoso y la violencia debe cambiar.
“El mensaje es no dejar de luchar desde el espacio que nos encontremos. Esto es una revolución de conciencias, los espacios son ocupados por hombres, los pasillos están ocupados por hombres, la postura es clara, seguir luchando y empujando la agenda feminista hasta donde sea necesario, porque las mujeres estamos listas, hacer visible que estamos para ocupar los espacios donde se toman decisiones. Es una manera de presionar y no vamos a parar”.
Añade: “Es difícil ver cómo hay hombres que no apoyan la causa, estarles explicando. Es valiosa la participación de las mujeres, con esta cuarta ola que está sucediendo en todo el mundo, la FEU está empezando apenas a tomar los temas, tenemos una deuda histórica, hemos estado realizando trabajos respecto al tema. Gracias a las manifestaciones es menos difícil lograrlo”.
Y aunque sus compañeras de lucha consideran que pudiera haber un doble discurso por la falta de acciones de las autoridades universitarias, Fernanda Ábrica manifiesta que las entiende, pero a la vez, ya se empiezan a generar las condiciones para tener una Universidad de Guadalajara libre de estas prácticas machistas de antaño.
“Con todo respeto creo que la Universidad está rebasada en muchos temas, se lo comenté al rector. No saben las acciones por tomar, creo que apenas se están empezando a cuestionar, apenas se están poniendo alertas, porque están viendo la situación actual y empiezan a tomar cartas en el asunto. Esto pareciera ser un doble discurso, nos dicen que sí habrá protocolos y harán un modelo integral, pero mientras eso sucede siguen sucediendo casos de acoso y violencia porque no hay un mecanismo de procedimiento funcional. Como no hay esa parte, se traduce así en un doble discurso, aunque reconozco los esfuerzos que se están haciendo desde la rectoría”.
Además: “Se instalará una línea de atención en la FEU manejada por expertas en la materia, que estarán acompañando los casos. Se planea poner módulos para dar información, los mecanismos de denuncia y acompañar a las estudiantes. Hay que seguir luchando, presionando, para que sea un modelo de actuación y no se quede en un protocolo. En mi parte seguiré acompañando a las mujeres en todos los espacios, yo les hago un llamado a que de manera pacífica hagamos todo tipo de manifestaciones, acumulemos esfuerzos para canalizar esas denuncias y presionar hasta que sean resueltas”, puntualizó.
JALISCO
¿Se acabó la estabilidad en la UdeG?

– Los Juegos del Poder, por Gabriel Ibarra Bourjac
La Universidad de Guadalajara (UdeG), con más de 360 mil estudiantes, ha sido un pilar de estabilidad en el panorama educativo mexicano durante las últimas décadas, especialmente bajo la influencia de Raúl Padilla López, exrector y figura clave hasta su fallecimiento en 2023.
Sin embargo, las recientes protestas estudiantiles, marcadas por la confrontación y actos de violencia en centros universitarios como el CUCSH, donde encapuchados irrumpieron y dañaron instalaciones de la rectoría, han encendido las alarmas.
¿Estamos ante el fin de esa era de calma que caracterizó a la UdeG? ¿O es este un capítulo pasajero que la rectora Karla Planter, la primera mujer en el cargo, podrá resolver con liderazgo y diálogo?
Las movilizaciones estudiantiles, iniciadas el 10 de septiembre de 2025, recuerdan los turbulentos años 60 y 70, cuando movimientos de izquierda generaron inestabilidad en las universidades mexicanas, marcadas por huelgas, violencia, alta politización y enfrentamientos con autoridades y gobiernos estatales.
Aquella época de confrontación contrastó con el periodo de estabilidad que Raúl Padilla consolidó con su liderazgo, transformando a la UdeG en un referente académico y cultural. Su ausencia ha abierto interrogantes sobre el rumbo de la institución en un contexto de transición y nuevas demandas sociales.
Las protestas recientes, que incluyeron la exigencia de suspender las elecciones del Consejo General Universitario (CGU) y la creación de espacios para el consumo de cannabis, han puesto a prueba la capacidad de la rectora Planter para mantener la gobernabilidad.
En un mensaje claro, emitido este miércoles 17 de septiembre de 2025, la rectora general universitaria respondió con un enfoque conciliador pero firme. Aceptó revisar las demandas legítimas, como mejoras en infraestructura, seguridad y acceso a materias, muchas de las cuales ya están en proceso.
Sin embargo, fue contundente al rechazar propuestas que considera inviables o perjudiciales, como la suspensión de las elecciones del Consejo General Universitario (CGU), que calificó de ilegal por violar los derechos de la comunidad universitaria, y la tolerancia al consumo de cannabis en los campus, argumentando que la universidad debe priorizar la salud y el bienestar de los estudiantes.
Además, Planter advirtió contra la intervención de actores externos que podrían estar manipulando las protestas para fines políticos, un riesgo que ella se comprometió a evitar. “No permitiremos que actores ajenos se aprovechen de las causas legítimas de nuestros estudiantes”, afirmó, subrayando su compromiso con un diálogo abierto, pero dentro del marco normativo de la UdeG.
Esta postura refleja una intención de equilibrar la apertura a las demandas estudiantiles con la defensa de la autonomía y la estabilidad institucional. El manejo de esta crisis será determinante para el futuro de la UdeG.
La rectora, quien asumió el cargo el 1 de abril de 2025, se ha destacado por su trayectoria académica y su enfoque en la igualdad y la inclusión. Su elección marcó un hito al ser la primera mujer en liderar la institución en sus 232 años de historia, y ahora enfrenta el desafío de consolidar su liderazgo en un momento de tensión.
Las protestas, aunque legítimas en algunos puntos, han incluido episodios de violencia, como los ocurridos en el CUCSH, que podrían escalar si no se gestionan con cuidado. La pregunta central es si estas movilizaciones son un síntoma pasajero o el preludio de una inestabilidad prolongada, similar a la de décadas pasadas registradas en otras universidades del país, donde los paros y las huelgas generaron mucho daño a la educación superior de México.
La respuesta dependerá de varios factores: la capacidad de Planter para canalizar las demandas viables, la voluntad de los estudiantes para dialogar dentro de los cauces institucionales y la habilidad de la universidad para evitar que intereses externos desestabilicen su comunidad.
La UdeG no es ajena a los retos, pero su historia reciente demuestra que puede superarlos con liderazgo firme y un compromiso con su misión educativa.
UN FUTURO EN JUEGO
La UdeG está en una encrucijada. Las declaraciones de Karla Planter muestran una disposición al diálogo, pero también una línea clara contra propuestas que comprometan la integridad de la institución. Si las demandas estudiantiles encuentran eco en soluciones concretas y la comunidad universitaria opta por la vía pacífica, la estabilidad que ha caracterizado a la UdeG podría mantenerse.
De lo contrario, el riesgo de una escalada de tensiones amenaza con revivir los fantasmas de las épocas de confrontación. La rectora, con su visión de una universidad más igualitaria e incluyente, tiene la oportunidad de forjar un nuevo capítulo de unidad.
JALISCO
Entregan la presea “La Paz hecha a mano”

– Por Francisco Junco
En el marco del Sexto Congreso de Cultura de Paz, celebrado en el Congreso del Estado de Jalisco, la asociación civil Conciencia y Acción México, Educación para la Paz, que preside Dolores Patricia Alvarado, entregó la presea La Paz hecha a mano.
El reconocimiento busca visibilizar proyectos comunitarios que fomentan la convivencia pacífica, la dignidad humana y la construcción de una sociedad más justa.
Entre las galardonadas se encuentra Cointa Sotomayor Reyna, distinguida por su proyecto Clan de Abus Excursionistas de Jalisco, iniciativa que promueve el derecho al esparcimiento y la vida plena de mujeres adultas mayores mediante viajes y actividades culturales, fortaleciendo con ello la convivencia pacífica y la participación activa.
También fue reconocida Josefina Acosta Rivera por su proyecto de arte por la paz Bodypaint en mujeres y hombres que luchan contra el cáncer de mama.
La iniciativa utiliza el arte corporal como herramienta de resiliencia, dignificando la vida de las personas que enfrentan esta enfermedad y proyectando un mensaje de esperanza y fortaleza.
La presea fue entregada igualmente a Liliana Pascual Bautista por su contribución a la paz a través de la confección del rebozo, símbolo de identidad, resistencia y memoria colectiva.
Su trabajo rescata la tradición textil mexicana como vehículo de cultura, dignidad y esperanza.
Otra de las galardonadas fue Epifanía Rosas Antonio, quien impulsa el proyecto Huipiles de mi pueblo. Esta propuesta resalta el arte textil indígena como un acto de resistencia e identidad, al tiempo que fortalece la economía de las artesanas y empodera a las comunidades a través de la revaloración de su patrimonio cultural.
También, el artista Enrique Chiu recibió el galardón por su proyecto Corazón Migrante, una obra de arte por la paz que busca recordar que la humanidad trasciende fronteras.
Con su propuesta, promueve el diálogo y la solidaridad, subrayando la necesidad de construir un mundo más justo e inclusivo.
JALISCO
Realizan Sexto Congreso de Cultura de Paz, reúne voces por la justicia y la igualdad en Jalisco

– Por Francisco Junco
El Sexto Congreso de Cultura de Paz, celebrado en el Congreso del Estado de Jalisco bajo el lema “Cosmovisión, Justicia y Paz”, reunió a autoridades, representantes de pueblos originarios, defensores de derechos humanos y sociedad civil, quienes coincidieron en que la paz no es sólo ausencia de violencia, sino un proceso colectivo basado en justicia, igualdad, respeto y diálogo, donde cada acción individual contribuye a transformar comunidades y construir un México más humano y solidario.
El Congreso de Jalisco, fue sede de este encuentro, organizado por la asociación civil Conciencia y Acción México, Educación para la Paz, donde representantes de instituciones, autoridades y sociedad civil coincidieron en la necesidad de construir un país más justo, humano y solidario.
Bianca América Enríquez, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, destacó que el evento buscó generar un espacio de igualdad simbólica entre todos los asistentes.
“Lo importante no son los cargos o reconocimientos, sino la dignidad de cada individuo”, señaló.
Subrayó también los avances en materia de derechos sociales alcanzados a nivel nacional, como el derecho universal a la salud y la educación, así como el reconocimiento legal de los pueblos y comunidades indígenas.
Bianca América Enríquez recordó la cosmovisión wixárika al hablar de paz como un valor comunitario transmitido desde la infancia, donde se enseña a respetar la palabra de los abuelos, los acuerdos colectivos y la naturaleza.
Añadió que desde el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas se impulsan proyectos para fortalecer la identidad, lengua y patrimonio cultural de los pueblos originarios, al tiempo que llamó a la sociedad a reconocer y respetar sus distintas formas de vida.
Por su parte, Luz del Carmen Godínez González, presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco, advirtió sobre los retrocesos en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU hacia 2030.
“Si tenemos el marco normativo y los presupuestos, ¿qué es lo que está fallando al ser humano? Lo que está fallando es volver a retomar la esencia del ser humano”, expresó, al tiempo que instó a reconocer la dignidad de cada persona y trabajar desde lo cotidiano para transformar la sociedad.
Godínez González enfatizó la importancia de la responsabilidad individual y colectiva en la construcción de paz, al señalar que cada acción puede generar un efecto multiplicador en familias, comunidades y municipios.
“Los buenos somos más, tenemos que hacer de verdad ese frente común”, afirmó, subrayando el compromiso de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de trabajar de manera conjunta con la sociedad civil.
En su intervención, Dolores Patricia Alvarado Corona, presidenta de Conciencia y Acción México, y encargada de inaugurar este encuentro, recordó que México enfrenta graves problemáticas como desapariciones, violaciones a derechos humanos y violencia estructural. Aún así, insistió en que la paz es un proceso activo que implica diálogo, justicia, libertad y respeto.
“La paz se construye en colectivo, no la podemos construir solitas ni solitos”, expresó y concluyó que este congreso busca no solo reflexionar, sino actuar en favor de una cultura de paz que se construya en lo cotidiano, desde decisiones individuales hasta transformaciones colectivas.
“La paz no es un destino lejano, la paz está aquí, cerquita de nosotros”, afirmó, invitando a los participantes a convertirse en promotores de un México más justo, equitativo y pacífico.
JALISCO
Mensaje a comunidad de la UdeG: Dentro del marco legal se respetará la libre expresión y se atenderán necesidades, Karla Planter

– Por Redacción Conciencia Pública
En un mensaje en video dirigido a toda la comunidad universitaria, la rectora de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Karla Planter, enfatiza el compromiso de la institución con la libertad de expresión y el respeto a la diversidad de opiniones dentro de la comunidad universitaria.
Destaca la importancia de escuchar las inquietudes de estudiantes, maestros y trabajadores, pero garantizando un ambiente de convivencia democrática y en forma pacífica, dentro del marco normativo vigente.
Anuncia que dirigen todos sus esfuerzos para atender las necesidades de infraestructura y bienestar social que han sido expresadas por comunidad universitaria, mientras mantiene una postura firme en contra de propuestas que comprometan la integridad y la autonomía de la universidad. Su liderazgo se fundamenta en la colaboración, el diálogo y la defensa de los derechos universitarios.
Planter reafirma la legalidad del proceso electoral del Consejo General Universitario, el cual representa la voz de una comunidad de más de 360,000 personas. Cancelar este proceso sería una violación de los derechos de la comunidad universitaria y de la normatividad vigente.