ENTREVISTAS
CICEJ: Antes de hablar de montos e inversión se debe crear «catastro» de redes de drenaje, primer paso para prevenir socavones
Por Mario Ávila //
Tras reconocer que durante varias décadas no se ha hecho nada en la Zona Metropolitana de Guadalajara para resolver o remediar el problema de lo obsoleto de la red de colectores, Luis Enrique Barboza Niño, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Jalisco, estimó que el primer paso que debe darse es realizar un catastro de redes en la zona urbana.
Admitió que el estado que guarda la infraestructura hidráulica y sanitaria de la ciudad, de verdad que necesita una intervención urgente, de acuerdo a lo que en las últimas semanas hemos visto, realidades que luego tienen afectación muy importante para la vida cotidiana de las personas, como lo han sido los socavones que se han presentado en las vías más transitadas de la ciudad.
Indicó que las causas más comunes de los socavones y de los hundimientos que se registran en la ciudad, es a consecuencia de las fallas que hay en infraestructura hidráulica, “porque estas fugas de la red de agua que no se detectan a tiempo, luego se convierten en afectaciones a la infraestructura a la estructura del suelo, que se manifiestan en las fallas que salen a la luz sobre las vialidades más transitadas de la metrópoli”.
Por ello consideró que «antes de pensar en la cantidad de kilómetros de la red de drenaje a renovar, lo primero que se tiene que hacer para poder hablar de manera certera, primero se debe hablar de un catastro de redes en la ciudad, que por cierto no existe, aunque sí lo tienen otros organismos operadores del país.
«Ese sería -dijo-, el primer paso, porque no se puede hablar ni de montos, ni de cantidades, ni de zonas a restaurar, en cuanto no tengas un censo de todas las redes de la ciudad y puedas hacer una comparativa contra lo que se ha ido sustituyendo, los planes de renovación de algunos polígonos, por ejemplo, del centro de la ciudad, entonces el tener el total del catastro y descontarle a los que ya se ha intervenido».
Cuando se hacen intervenciones en las calles de la ciudad -abundó-, también le entran a la parte de la infraestructura hidrosanitaria, eso nos hablaría de la cantidad en este momento y lo digo porque nosotros hemos verificado con el organismo operador cómo se lleva el registro de las intervenciones que están teniendo los municipios, cuando hacen renovación urbana y la verdad es que no hay un sistema, se lleva todavía en el papel, entonces para poder trabajar en la sustitución, primero se tiene que trabajar el catastro, para de ahí determinar exactamente cuántos kilómetros, de qué diámetros, de qué materiales se tienen que sustituir cada una de las líneas de las que estamos hablando.
El ingeniero Luis Enrique Barboza expuso que no hay datos de estimaciones o de necesidades de inversión, solamente se ha mencionado como un dato aislado del que habló en una comparecencia en el Congreso del Estado, del director del organismo operador del agua, Carlos Enrique Torres Lugo, que entre las líneas de conducción y las tomas domiciliarias, se ha estimado que se requería de una inversión de 8 mil millones de pesos.
Sobre lo que el presidente del CCIJ, Barboza Niño planteó: “Nosotros coincidimos que es una buena cifra para empezar y al final, cuando se tenga el catastro, se podrá hacer la comparativa si esta estimación es suficiente para resolver el problema en el área metropolitana de Guadalajara”.
Al mismo tiempo recordó que en la administración federal que está por terminar, desapareció recursos de un fondo que eran para el Consejo Metropolitano, “que fue un fondo muy importante, que tenía recursos bastante interesantes que podían haber servido para empujar este tipo de intervenciones necesarias a nivel metropolitano; pero con la extinción de los fideicomisos, que desde nuestro punto de vista fue muy desatinado del Gobierno Federal, ahora la responsabilidad completa cae en el organismo operador (Siapa), pero también hay polígonos de la ciudad que son atendidos por los propios ayuntamientos a través de sus direcciones de Agua Potable”.
Al final -admitió-, se trata de la prestación de un servicio básico y ese corresponde a los municipios, bueno aquí tenemos un organismo intermunicipal que lo administra el Estado, pero también los ayuntamientos son responsables de la gestión hídrica de nuestros recursos y lo voy a poner en este contexto, algunos socavones como el que vimos hace algunas semanas en López Mateos, tiene que ver con escurrimientos por las zonas que se han urbanizado aguas arriba y que han ido disminuyendo infiltración y retención, y eso sí es facultad de los municipios.
Y la otra parte -agregó-, la que tiene que ver con el incumplimiento del impacto hidrológico cero, es decir cada construcción que se autoriza a nivel municipal tendría que ir acompañada de las acciones necesarias para reducir el impacto hidrológico de la huella que ocupan las nuevas edificaciones y esto tiene que ver con obras de infiltración, de retención o de captación de agua.
La verdad -remató-, es que se hace muy poco, solo en construcciones ya muy grandes es cuando se obliga a los desarrolladores o a los inversionistas, a cumplir con esta normatividad, pero la Ley de Aguas del Estado de Jalisco y sus Municipios establece quien sea el responsable, ya sea el organismo operador como puede ser el Siapa o los propios municipios, tienen que garantizar que los desarrolladores o los constructores, cumplan con las acciones para reducir el impacto hidrológico de los edificios y las obras que se están haciendo.
Finalmente, sobre el papel que podría jugar el Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Jalisco, su presidente Luis Enrique Barboza Niño, expuso: “Aquí nosotros nos regimos por especialidades y aquí hay un área que tiene que ver con recursos hídricos y aquí se pueden elaborar todos los proyectos que sean necesarios, es decir si un inversionista va a desarrollar una nave industrial, un parque industrial, un edificio, pues bueno tendría que presentar toda su documentación para que cuando le aprueben la licencia de construcción, ya vengan incluidas las acciones necesarias para garantizar el impacto hidrológico cero, pero muchas veces como estas obras cuestan y prestan un servicio que no es digamos tan rentable para el tipo de inversión que van a hacer, las omiten y lo que sucede es que las autoridades ya sea municipales o del organismo operador, les aprueban las licencias y aquí les podemos ayudar a elaborar todos los estudios y proponerles las soluciones que se requieren para que sus construcciones cumplan con lo que establece la ley”.
