NACIONALES
López Obrador: Negación y delirio

De Frente al Poder, por Óscar Ábrego //
“Eres lo que con violencia afirmas que no eres”
Alejandro Jodorowsky
Una de las premisas básicas de quien se adentra en el estudio del comportamiento humano es saber que la palabra “no” suele ser ignorada por la mente subconsciente.
Me explico con un ejemplo.
Cuando una persona afirma “no soy mentiroso”, es muy probable que lo sea. En cambio, si alguien dice “siempre hablo con la verdad”, es posible que estemos frente a un individuo honesto.
Sin que lo anterior sea una regla infalible, lo cierto es que es bastante confiable. En mi experiencia, al impartir diplomados de Programación Neurolingüística o aplicar hipnosis, encuentro que cuando un alumno o cliente dice “no soy mentiroso”, lo que yo compruebo en poco tiempo es que estoy ante un “soy mentiroso”.
Esto viene a cuenta porque el presidente es la muestra viviente más representativa que al respecto tenemos en México.
López Obrador pasará a la historia por muchísimas malas razones, pero sobre todo, por haber sido el mandatario que más veces mintió en público; y lo hizo sin pudor ni miramientos. Y no sólo eso, sino que nos arrastró con su negación y delirio.
Andrés Manuel es un caso para tesis doctoral de psiquiatría.
A diario, cuando se refiere a “los de antes” desde el proscenio mañanero, asegura con su peculiar y belicoso modo de hablar que “No somos iguales”.
Pero lo que en realidad sale por su boca es un “Somos iguales” que “los de antes”.
La mitomanía de AMLO ha escalado a niveles en extremo vergonzosos y peligrosos; sin embrago, ya en este espacio hemos consignado en más de una ocasión que lo verdaderamente preocupante es, a pesar de lo calamitoso de su gestión, hay un gran sector de la población que continúa respaldando el desastre y el permanente engaño presidencial.
Sí, el daño está hecho y pareciera que aún somos una fracción poco representativa la que ha cobrado conciencia sobre el tremendo deterioro institucional que sufre nuestra nación en tiempos del obradorato.
Este domingo, en las páginas de Excelsior, el brillante académico y columnista Ricardo Alexander, lo describió con gran claridad:
“La pobreza ha aumentado. Igual la inseguridad y los homicidios. Somos el país más peligroso del mundo para practicar el periodismo. Los organismos autónomos son menos independientes que antes, al igual que el Poder Judicial, que fue entregado por quien fuera su presidente.
“Es un hecho que hoy en México somos menos libres. Somos más cínicos y estamos más divididos. Nuestra capacidad de sorpresa e indignación ha sido ahogada en un mar de delitos flagrantes, de mentiras y manipulaciones que todos los días se dictan desde el palacio imperial. Empezamos con un “al diablo las instituciones” y llegamos a un “no me vengan con que la ley es la ley”. Y nos dejó de indignar”.
¿Qué seguirá cuando concluya este desastroso gobierno?
No lo sabemos, pues tampoco tenemos la certeza de que Andrés Manuel López Obrador tenga entre sus planes abandonar Palacio Nacional.
Son tantas las mentiras y tan profundo su delirio, que nada sería una sorpresa.
Posdata:
Que descanse en paz Raúl Padilla López.
Twitter: @DeFrentealPoder
*Óscar Ábrego es empresario, consultor en los sectores público y privado, escritor y analista
político.
MUNDO
Rechaza ser deportado Hernán Bermúdez Requena de Paraguay

– Por Francisco Junco
Hernán Bermúdez Requena, el ex secretario de Seguridad Pública, nombrado por el entonces Gobernador de Tabasco, Adán Augusto López, ahora senador de la República, rechazó ser extraditado a México.
Durante la audiencia inicial, donde un juez dictó prisión preventiva, se le ofreció la extradición voluntaria, pero Bermúdez Requena, presunto líder del cartel de “La Barredora”, no aceptó.
Ahora se iniciará un proceso ordinario, que podría tardar hasta 60 días, en tanto, Bermúdez Requena, continuará bajo la custodia de la Secretaría Nacional Antidrogas de Paraguay.
En tanto, en México se informó que la Fiscalía General de la República ya presentó la solicitud de extradición contra Hernán Bermúdez Requena al gobierno guaraní.
“El Abuelo” o “El Comandante H”, como se le conoce al exfuncionario del gobierno del morenista Adán Augusto López en Tabasco, e identificado como el presunto líder del Cártel de “La Barredora”, fue detenido la madrugada del sábado, en Paraguay, en una residencia ubicada en la zona exclusiva de Marino Roque Alonso, donde permanecía escondido.
Este fin de semana, el presidente Santiago Peña, dio a conocer, en un pequeño video de 45 segundos, cómo fue el arresto de Bermúdez Requena.
En las imágenes, primero se ven aspectos de la residencia, se ve cómo las fuerzas especiales, revisaron la finca y derribaron la puerta, suben una escalera y someten a ex secretario de seguridad, lo encañonaron y lo tiraron al suelo, donde lo tenían sometido, bocabajo y un elemento le pone un pie en la espalda.
Después, el presunto líder de La Barredora, quien cuenta con una ficha roja activa de la Interpol, aparece sentado en un sillón con ropa deportiva, pelo más largo y canoso, barba larga.
Cuenta con una orden de captura en México por asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés.
En el video, se muestra que en la residencia, donde permanecía escondido, había fajos de dólares y guaraníes, moneda uruguaya, así como joyas, tarjetas bancarias, identificaciones y una camioneta de alta gama.
Manuel Doltane, titular de Asuntos Internacionales de la Fiscalía de Paraguay, reveló que Bermúdez, entró de manera ilegal al país.
Y es que en febrero de este año, después de hacer pública la orden de aprehensión en su contra, el ex funcionario estatal huyó del país.
De acuerdo con las autoridades, viajó primero a Panamá, después a España, más tarde a Brasil, para terminar en Paraguay.
En medios locales del país sudamericano, como el diario ABC, informaron que la detención del ex funcionario de Adán Augusto López, se logró, gracias a que en el mes de julio se detuvo a Gerardo Bermúdez Arreola, sobrino del presunto líder de “La Barredora”.
NACIONALES
Se rasga bandera gigante en Guanajuato

– Por Francisco Junco
En la explanada del Congreso del Estado de Guanajuato, donde se conmemoraba el inicio de la Independencia, la gigantesca bandera monumental que suele ondear con orgullo se desgarró mientras era izada.
Una ráfaga de viento tensó la tela y provocó la primera rasgadura cerca del mástil; segundos después, otra bocanada de aire convirtió el estandarte en un lienzo vulnerable que cedió completamente ante la fuerza de la naturaleza.
El sonido seco del desgarre y el movimiento incontrolable de la bandera detuvieron por un instante el ritmo del acto cívico. Entre los asistentes se percibió un silencio respetuoso, mientras manos ágiles trataban de recuperar la tela antes de que tocara el suelo, consciente de que cualquier contacto con el pavimento sería una falta a la dignidad del símbolo nacional.
El protocolo indica que una bandera monumental dañada no debe desecharse ni manipularse de manera cualquiera. La norma establece que su retiro se realiza mediante una ceremonia solemne de incineración, un acto respetuoso que mantiene la dignidad del lábaro patrio, además de que su manejo está bajo la supervisión de autoridades competentes, como la Sedena.
La Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, junto con normativas estatales, recuerda que la enseña no debe alterarse ni tocar el suelo.
Por ello, las autoridades presentes aseguraron que la bandera sería tratada siguiendo los procedimientos oficiales, garantizando que el símbolo nacional continúe recibiendo el respeto que merece incluso al final de su vida útil.
Al concluir la ceremonia, el acto continuó sin la bandera en el asta, pero con la certeza de que la experiencia sirve como lección: proteger los símbolos requiere previsión, cuidado técnico y respeto por la ley.
Cuando la próxima bandera monumental vuelva a ondear, su imagen será recordatorio de que los colores que representan a México merecen siempre una custodia digna.
JALISCO
Más de 3 mil 200 marcas de tequila dan sabor a las fiestas patrias

– Por Francisco Junco
En el marco de las celebraciones de septiembre, el tequila se convierte en protagonista indiscutible de la mesa mexicana. No solo es la bebida nacional por excelencia, sino un emblema de identidad, cultura y tradición que representa a México ante el mundo con la fuerza de su historia y el sabor de su tierra.
De acuerdo con cifras del Consejo Regulador del Tequila (CRT), actualmente existen 3 mil 211 marcas registradas, vinculadas a 213 productores autorizados, lo que demuestra la amplitud y versatilidad de esta bebida que acompaña con orgullo a la gastronomía nacional.
“De esta agroindustria tequilera dependen más de 100 mil familias; hoy es un producto que se comercializa en más de 120 países y, por supuesto, está sujeto a un cumplimiento normativo muy minucioso. Cada gota es inspeccionada, certificada y analizada por el Consejo Regulador del Tequila”, destacó María Bertha Becerra, responsable de aseguramiento de producto terminado en el CRT.
El recorrido del tequila es también una historia de manos mexicanas. Desde los campos de agave azul, pasando por las destilerías, envasadoras y centros de distribución, miles de trabajadores imprimen tradición, conocimiento y pasión en cada etapa de su producción.
“Tenemos cinco clases: blanco, joven, reposado, añejo y extra añejo, además de dos categorías: tequila y tequila 100% de agave”, explicó Becerra, al recordar la diversidad que ofrece esta bebida reconocida como la primera Denominación de Origen de México.
Además de ser un símbolo, es una de las bebidas más reguladas del planeta. Desde 1994, el CRT supervisa cada fase de su producción conforme a la Norma Oficial Mexicana NOM-006-SCFI-2012, garantizando calidad y autenticidad en cada botella que se consume dentro y fuera del país.
Con más de 200 municipios protegidos por la Denominación de Origen, repartidos entre Jalisco, Michoacán, Tamaulipas, Nayarit y Guanajuato, el tequila es mucho más que un acompañante de las fiestas patrias: es el espíritu de México que une a generaciones y brinda al mundo un motivo más para decir: ¡Qué viva México y qué viva el tequila!