NACIONALES
Los siguientes 25 años

Opinión, por Miguel Anaya //
El tiempo es el eje rector de la vida, las épocas y los momentos importantes se miden de acuerdo con el tiempo. Estamos muy cerca de culminar un año más, han pasado 24 desde que el año 2000 llegó con nuevas ideas del futuro, con la proyección de que la tecnología iba a tener un gran despunte y de que el mundo iba a cambiar radicalmente y así fue.
Del año dos mil a la fecha hemos pasado de tener que comunicarnos a la oficina o casa de alguien para ver un tema pendiente a la posibilidad de tener comunicación 24/7 con cualquier persona en cualquier parte del mundo, pasamos de tener centros de convivencia presenciales – escuela, barrio o trabajo- a tener un mundo virtual de convivencia, empleo y educación con solo levantar el celular.
Todo esto y algunos factores más llevaron a que cambiara nuestra percepción de la vida durante estos 24 años. Los ataques del 11 de septiembre de 2001 cambiaron la seguridad en las fronteras y aeropuertos, además introdujo al mundo el concepto de terrorismo, cambiando protocolos de inmigración. En México la declaración de guerra contra el narcotráfico cambió la vida de las personas, pues los hechos violentos llegaron (y siguen llegando) a los lugares cotidianos: escuelas, partidos de futbol, restaurantes y demás espacios donde antes era impensable.
En nuestro país hemos vivido dos pandemias, la primera llegó con el virus AH1N1, este nos obligó a encerrarnos por un tiempo limitando la vida social fuera de ellas, por lo tanto, redes sociales como Facebook y Twitter (hoy X) crecieron exponencialmente, la obligación de quedarse en casa hizo que muchos mexicanos de todas las edades aprendieran a utilizar internet o al menos se interesara en ello.
La segunda pandemia, mucho más reciente y larga, aceleró el comercio en línea, cambió la forma de enseñar en las escuelas, además disparo temas sensibles como la depresión y el aislamiento social. Hay estudios señalan que la pandemia ocasionó un cambio social importantísimo pues obligó a un crecimiento tecnológico generalizado equivalente a 10 años de aprendizaje en tan solo dos años.
Esa avalancha de sucesos y algunos otros hacen que el 2024 sea diametralmente distinto al mundo en que crecimos. Entender el pasado reciente es importante para los políticos, empresarios y académicos, ya que es de vital importancia entender el porqué del mundo actual para poder tomar decisiones de futuro, de futuro inmediato, pero, sobre todo, es importante planear a largo plazo para lograr proyectos útiles para la sociedad.
Primero hablemos en términos de población, en 25 años se estima que la edad promedio en México ronde los 55 años, esto quiere decir que muchos ciudadanos estarán cerca del retiro, sus necesidades en términos de salud, empleo y movilidad cambiarán y estarán cerca de dejar de aportar a sus pensiones para aspirar a recibir dividendos de lo ahorrado ¿Los mexicanos estamos preparados en lo individual y en lo colectivo ante este panorama? Da la impresión de que en la mayoría de los casos la respuesta es negativa.
El crecimiento tecnológico avanza a pasos agigantados, los mayores avances son en el área biomédica, realidad virtual y en los robots que cada día realizan tareas más complejas como manejar de forma segura un auto, realizar cálculos contables y hasta cirugías. ¿En el ramo educativo y gubernamental se está pensado en estos procesos o se sigue educando a la antigüita, con temas y formas que dejarán de ser útiles en 5 o 10 años?
Seguridad y desarrollo social son temas que van de la mano con la cultura, en cualquiera de los casos podemos ver con tristeza que la batalla cultural está siendo perdida, pues la música y las redes sociales exaltan la delincuencia organizada, la violencia y pondera la posesión material de cosas antes del desarrollo personal y valores como la honestidad, respeto y trabajo duro.
Si queremos mejorar nuestro entorno en los próximos años comencemos por ofrecer la cultura del respeto hacia los demás y hacia el medio ambiente, hablemos de la importancia de trabajar por proyectos a largo plazo dejando de lado recompensas inmediatas, fomentemos los valores y la educación tecnológica.
Es difícil pensar en el futuro cuando vivimos un presente complejo, pero nuestra obligación moral y cívica es hacer un mundo mejor para las siguientes generaciones, nuestra conveniencia personal es crear un mundo mejor para cuando estemos viejos.
NACIONALES
Cayó en Paraguay, el líder de «La Barredora», Hernán Bermúdez Requena

– Por Mario Ávila
La labor de inteligencia de las fuerzas policiales del país y con el apoyo de las autoridades de la República del Paraguay, fue detenido el líder criminal de la organización delincuencial «La Barredora», Hernán Bermúdez Requena, alias «Requena», El Abuelo» y «comandante H».
La detención fue anunciada por el secretario de Seguridad Ciudadana del gobierno federal, Omar García Harfuch, a través de sus redes sociales, en donde él precisa que el presunto criminal fue detenido en Paraguay.
En un comunicado hecho público hace algunos minutos, García Harfuch, explica: «Por instrucciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo de cero tolerancia a la corrupción, se llevó a cabo una operación conjunta encabezada por el Centro Nacional de Inteligencia CNI, Defensamx, Secretaría de Marina, Fiscalía General de la República, Guardia Nacional, Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, en la que se realizó la detención de Hernán “N”, presunto líder de la organización criminal conocida como “La Barredora”.
En esta operación -abunda-, fue fundamental la participación de la Unidad de Inteligencia Financiera y el Centro Nacional de Inteligencia, así como el intercambio de información que hace posible la nueva Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia.
El comandante H, jefe de la policía de Tabasco de 2018 a 2014, presunto líder del grupo criminal La Barredora, dedicado al tráfico de drogas, la extorsión y el robo de combustible o huachicol, estuvo prófugo desde febrero y hoy, Hernán Bermúdez Requena ha sido detenido en Paraguay, según ha informado la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, en un comunicado divulgado este viernes en la noche.
Bermúdez llegó al cargo cuando uno de los principales dirigentes de Morena, Adán Augusto López, era gobernador en el Estado.
NACIONALES
Hospitalizan a Manuel Espino tras derrame cerebral; permanece en terapia intensiva

– Por Francisco Junco
El diputado federal de Morena, Manuel Espino Barrientos, se encuentra hospitalizado en terapia intensiva luego de sufrir un derrame cerebral.
La noticia fue confirmada por el coordinador de la bancada morenista en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal Ávila, quien detalló que el legislador de 65 años fue intervenido de emergencia durante la noche del miércoles.
“Tuvo un derrame en el cerebro y lo intervinieron hacia las nueve o diez de la noche. Está en terapia intensiva, en un lugar al que sus familiares, por la emergencia, lo condujeron”, informó Monreal, al tiempo que expresó su deseo de pronta recuperación y pidió oraciones por la salud de su compañero de bancada.
Espino, originario de Durango y actual integrante de las comisiones de Seguridad, Defensa y Comunicaciones y Transportes, fue trasladado por decisión de su familia a una clínica especializada, donde permanece bajo vigilancia médica. En un comunicado de Morena se informa que se mantiene estable dentro de la gravedad.
En redes sociales, la presidenta de Morena en Durango, Lourdes García Garay, envió un mensaje de solidaridad al legislador.
“Enviamos toda nuestra solidaridad y los mejores deseos de pronta y total recuperación a nuestro querido compañero diputado federal Manuel Espino. Confiamos en su fortaleza y en que pronto estará de vuelta”, publicó.
Con más de cuatro décadas de trayectoria política, Manuel Espino ha transitado por diversos partidos y cargos. Fue dirigente nacional del PAN entre 2005 y 2007, presidió la Organización Demócrata Cristiana de América y en los últimos años se integró a Morena, donde actualmente ocupa una curul por representación proporcional.
MUNDO
China, Japón y México: la batalla global por el internet del futuro con matices locales

– Por José Modesto Barros Romo, Conciencia Pública
El internet de ultra velocidad ya no es un asunto de ciencia ficción, sino un campo estratégico donde las potencias tecnológicas definen su hegemonía. Japón, China y, en menor medida, México, han roto en este año barreras históricas de transmisión de datos, cada uno desde trincheras distintas, pero con un objetivo común: asegurar ventajas en la economía digital del siglo XXI.
Japón sorprendió al mundo al anunciar que sus científicos del Instituto Nacional de Información y Comunicaciones Tecnológicas (NICT) lograron transmitir datos a 1.02 petabits por segundo a través de fibra óptica.
Se trata de un récord mundial que equivale a descargar en un segundo la información de más de 10 millones de videos en alta definición, el equivalente a todo el catálogo de Netflix en un solo segundo.
Más allá de la hazaña técnica, el logro japonés envía un mensaje claro: su apuesta es consolidar infraestructuras terrestres estables y de larga distancia, con la mira puesta en mantener la competitividad industrial frente a China, Estados Unidos y Europa.
El gigante asiático, por su parte, libra otra batalla: el dominio del espacio inalámbrico. China Mobile reveló que en una red experimental de 6G alcanzó velocidades de 280 gigabits por segundo, descargando un archivo de 50 GB (unas 25 películas de mediana calidad) en apenas 1.4 segundos.
A esto se suman proyectos universitarios que exploran transmisiones en frecuencias en terahercios y enlaces satelitales de 100 Gbps, tecnologías que se perfilan como piezas centrales en la construcción de un ecosistema digital global, donde China pretende marcar la pauta a la espera lanzar comercialmente las redes 6G para el año 2030 en todo su territorio.
La estrategia china es evidente: no se conforma con desplegar infraestructura terrestre, busca liderar el futuro de las comunicaciones en el espacio y en el aire, donde se definirá el control de datos y, con ello, el poder geopolítico. De ahí que los experimentos en 6G no solo representen avances científicos, sino una carta de presentación en la carrera tecnológica frente a los estadounidenses, japoneses y los europeos.
México, en contraste, aparece con un logro más modesto pero simbólico. El año pasado la empresa Megacable, en alianza con Nokia, alcanzó 1.1 terabits por segundo en pruebas de fibra óptica de larga distancia.
No es un récord mundial ni una revolución en telecomunicaciones (aunque sí es un hito a nivel Latinoamérica, equivalente a descargar un videojuego como Call of Duty: Modern Warfare III en un segundo). Esta es una señal de que nuestro país busca modernizar su infraestructura digital con miras a los próximos años.
El reto está en si estos avances se traducirán en beneficios reales para los ciudadanos o quedarán como demostraciones técnicas en un país donde millones aún carecen de acceso a internet estable.
La comparación es reveladora: mientras Japón apuesta por la perfección de la fibra, China por la supremacía inalámbrica y espacial, México apenas intenta ponerse al día. El dilema nacional es mayúsculo: ¿apostar por ser solo consumidores de tecnologías extranjeras o trazar un plan estratégico que coloque a la región en la disputa global por la soberanía digital?
Lo cierto es que el internet del futuro no será solo más rápido; también será la nueva frontera de poder. Quien controle las redes de transmisión controlará la información, la seguridad nacional y el desarrollo económico. Japón y China ya están en esa carrera. México, como suele ocurrir, observa desde la periferia.