NACIONALES
Perder la noción de la realidad
Opinión, por Miguel Ángel Anaya Martínez //
«Uno puede defenderse de los ataques; contra el elogio se está indefenso.»
Sigmund Freud.
Alguna vez escuché decir que el problema de la mayoría políticos cuando llegan al poder es que viven en una especie de “cuarto de espejos”, pues su círculo cercano, por preservar la chamba o por conseguir algún interés personal se convierte en un grupo de aduladores en donde el personaje político se ve reflejado haciendo siempre las cosas bien.
De esta manera aquel o aquella que se atreve a señalar un error o un área de oportunidad se convierte entonces en enemigo del político en el poder deduciendo que si no estás conmigo estás en contra de mí.
El que esto suceda -más frecuentemente de lo esperado- se convierte en un arma que apunta generalmente contra el mismo líder político y contra sus resultados en la administración pública, los casos los podemos observar en los gobiernos federal y locales, pues en muchas ocasiones aquellos que han señalado su desacuerdo con alguna acción o proyecto de las actuales administraciones han sido ignorados, descalificados, exhibidos o en su caso han quedado fuera del gobierno.
Tatiana Clouthier es una mujer preparada, en temas distintos a la economía, pero preparada al fin. Sus raíces políticas son conocidas por todos, en su trayectoria política destaca haber sido candidata a la alcaldía de San Pedro Garza García (conocido como el municipio más rico de Latinoamérica) por Nueva Alianza, partido al que nunca estuvo afiliada; su buena relación con el sector empresarial regiomontano y su cercanía al entonces precandidato Andrés Manuel López Obrador la llevaron a coordinar la campaña electoral del hoy presidente.
Tatiana cuando aúnera diputada federal, AMLO decidió nombrarla Secretaria de Economía. Aunque no hay versión oficial de las razones de su salida, destaca que en algunas reuniones privadas Clouthier había mostrado su desacuerdo con la reforma energética ya que ésta violaba el T-MEC y complicaba las relaciones comerciales con Estados Unidos, un tema que evidentemente afectaba distintos sectores económicos de nuestro país; se cree que esto, más la grilla interna de los sectores más radicales de Morena, provocó la salida de la ex secretaria.
El “cepillar” a toda persona que no esté de acuerdo con las decisiones del líder político es una posición peligrosa que lleva a la radicalización de cualquier movimiento político, un ejemplo lo podemos ver con Donald Trump, quien a través de su administración destituyó a todo aquel que pensara distinto, despotricó contra medios de comunicación y periodistas -En México hay dos o tres líderes políticos que hacen exactamente lo mismo- y cuando fue derrotado en las urnas, sus seguidores radicalizados decidieron hacer lo suyo tomando el Capitolio, demostrando que un movimiento político sin crítica al interior se convierte más bien en culto, en fanatismo.
Al estar sumergidos en su cuarto de espejos, los políticos dejan de ver la realidad y se olvidan de los problemas que la ciudadanía enfrenta diariamente, pues para su grupo cercano todo marcha bien o eso les interesa mostrar para congratular al líder político y para señalar ataques externos, creando enemigos imaginarios para poder cerrar aún más el círculo del poder.
Para muestra el tema de la inseguridad, pues mientras los encargados del ejecutivo nos muestran estadísticas que suponen una mejora en las cifras de seguridad, la realidad tiene otros datos. Solo en los últimos días se vivió el terror en la zona de Andares, Zapopan tras un fuerte enfrentamiento -aún no sabemos entre quienes-, supimos de la matanza en San Miguel Totolapan que dejó al menos veinte fallecidos, el asesinato de la diputada Gabriela Marín, entre cientos de casos más. La factura nos está saliendo muy cara, aunque claro, para nuestros líderes el problema es la oposición o los medios de comunicación que difunden estos casos.
El vivir en una burbuja fuera de la realidad es un tema viejo que afecta a políticos de todos colores, dependerá de cada líder con su sapiencia el evitar despegar los pies del piso y aperturar su gabinete y su mente a la entrada de ideas distintas a las suyas, finalmente, con pluralidad se construye la democracia y los equipos exitosos de trabajo.
