MUNDO
Turismo médico
Bioética, por Omar Becerra Partida //
Un gran negocio sin protección legal adecuada para el paciente. Nos referimos al turismo médico, que se refiere a los flujos internacionales de viajeros que por lo regular se trasladan fuera de su país con el fin de recibir servicios médicos más baratos y de menor o igual calidad, que en su país de origen en la mayoría de los casos.
Esto involucra uno o varios procesos, que van desde las consultas, intervención, hospitalización hasta la provisión de medicamentos.
Es decir, todas las personas que emprenden un viaje a nivel nacional e internacional con el fin de recibir algún tratamiento médico, son parte de quienes realizan turismo médico, ya sea por un tratamiento estético, una urgencia e incluso para recibir terapia psicológica y psiquiátrica en el caso de adicciones.
No descartamos que se incluyan nuevos nichos de negocio como la fecundación in vitro, el arrendamiento de vientre, la manipulación genética y procedimiento de farmacéuticas ya que la ley general de salud y las normas oficiales no contemplan este tipo de procesos.
Según datos de Pacientes más allá de las fronteras (2019), entre 1.4 y 3 millones de pacientes extranjeros viajan a México, incluidos a los migrantes que regresan para diversos tratamientos, coloca al país en el segundo lugar en turismo médico a nivel mundial, solo después de Tailandia; y la primera posición global en turismo dental.
Según datos de la Secretaría de Turismo, difundidos en 2021, el tamaño de esta industria en México se estima entre 8,000 y 8,800 millones de dólares, de los cuales entre 2,700 y 3,500 millones corresponden al sector turismo médico. Según la Asociación de Turismo Médico señala que las intervenciones quirúrgicas más vendidas son especialidades como cirugía plástica, odontología, oftalmología, cardiología y oncología, entre otras, son entre 40 y 80% más económicas que en Estados Unidos.
Por ello el 80% de los turistas son de Estados Unidos que viene a México por motivos de salud. Este tema plantea varios problemas, que van desde la calidad aleatoria de asistencia en el extranjero, la dificultad de transmitir el expediente clínico de un país a otro, a la incapacidad de demandar a un médico extranjero en el caso de alguna negligencia médica.
Se plantean muchas cuestiones éticas y bioética jurídicas respecto al trato al paciente por parte de los profesionales de la salud, asi como tambien las preocupaciones sobre el tráfico de órganos.
Complicaciones graves, estafas, e incluso robo de órganos, el turismo médico sufre de una mala imagen en la actualidad, pero no deja de ser un gran negocio para los involucrados.
Según el gobierno de Estados Unidos el gobierno de México no otorga compensación monetaria a las víctimas de delitos. A diferencia del sistema estadounidense, donde los pagos de compensación y los servicios de asistencia a las víctimas son posibles a través de fondos públicos, en México solo el perpetrador tiene la obligación legal de pagar los daños.
Los programas en algunos estados mexicanos brindan a las víctimas asistencia psicológica, legal y médica, pero esto varía en todo México. Ya sea que decida llevar su caso a través del sistema judicial mexicano o no, puede acceder a los recursos de compensación y asistencia a las víctimas en los Estados Unidos.
Casi la mitad de los programas estatales de compensación para víctimas de delitos cubren ciertos gastos de bolsillo, como médicos, funerales, asesoramiento y salarios perdidos para los residentes elegibles del estado que se convierten en víctimas de delitos fuera de los Estados Unidos.
Si no tiene otra opción, ya sea por motivos financieros o por cualquier otra causa,
tendrá que verificar:
1. La acreditación del hospital por medio de normas y reconocimiento oficial, es sencillo ya que la mayoría de ellos siendo privados están constituidos como sociedades mercantiles aquí en Mexico.
2. El médico o personal de la salud con la certificación de un proceso equivalente en su país, en Mexico con título universitario y especialidad correspondiente, cédulas de los grados de estudios asi como la certificación de colegios correspondientes a su especialidad.
3. Informarse de riesgos y beneficios asi como la protección legal correspondiente de su país y el país al que viajará. Cuídese de las malas prácticas médicas.
