LOS PELOTEROS
Acuerdo histórico de LMB con Grandes Ligas: Sin ser extraordinaria, mejora postemporada de la Major League

Vuelacercas, por Salvador Cosío Gaona //
Aunque hemos estado añorando el extenso desahogo de 163 juegos con que habitualmente se cubría el calendario ordinario de la temporada regular de Grandes Ligas en la Major League Baseball (MLB), no podemos dejar de reconocer que la actual campaña recortada a solo 60 cotejos a causa de la pandemia, ha tenido algunos destellos que si bien no la hacen extraordinaria tampoco ha sido un desastre ni nada parecido, siendo que la peculiaridad con que se desarrolla ha tenido bosquejos interesantes aún siendo breve, y obligará a un detallado análisis una vez que concluya para rescatar aspectos positivos pensando en el siguiente año, en tanto prevalezca la incertidumbre respecto a cómo evolucionará el tema sanitario para la temporada 2021.
Quizá entre lo que se puede señalar como negativo de la competencia está el hecho de que, obligados por la circunstancias muchos de los equipos se enfrentaron en su propia división cuando fue Inter Ligas. Sin contar que al principio se observó cierta displicencia de algunos escuadrones cuando parecía que simplemente estaban interesados en cumplir con presentarse a los parques de pelota sin dar el extra al que muchos nos tenían acostumbrados.
Aunado a ello, los participantes tuvieron que aceptar y adaptarse a nuevas reglas que resultaron bastante polémicas y que no terminaron de agradar a la afición.
Pero esa etapa, quizá sirvió para ir calentando motores y ya en la Serie de comodines se mejoró de manera considerable el espectáculo en el Rey de los deportes. No hubo grandes sorpresas y llegaron a esa etapa 16 equipos siendo que se impusieron en su mayoría los considerados favoritos.
En la Liga Americana el sembrado numero 1, Mantarrayas de Tampa Bay que terminó campeón de la División Este se impuso fácilmente al número 8 y tercero en esa misma división, Azulejos de Toronto. En otra contienda, el número 2 de la clasificación y primero en la División Oeste, Atléticos de Oakland sacó de la competencia a Medias Blancas de Chicago que había terminado en el tercer lugar de la División Central. En un duelo que resultó rápido en su desahogo, Mellizos de Minnesota sembrado como número 3 pero primero en la División Central, sucumbió ante el colocado en número 6 Astros de Houston que llegaba como segundo de la División Oeste. Y por último, Yankees de Nueva York, número 2 de la División Este, sembrado número 5 sacó de la contienda a los Indios de Cleveland que era segundo en la División Central, sembrado número 4.
En la Liga Nacional pasaron a la postemporada a disputar la serie de comodines los 8 equipos mejor calificados tras su desempeño en la agenda ordinaria, siendo los Dodgers de Los Ángeles en número 1 que fue líder en la División Oeste, Bravos de Atlanta como número 2 que fue el titular de liderato en la División Este, los Cachorros de Chicago como número 3 que fueron los líderes en la División Central, seguidos con el número 4 por Padres de San Diego que culminaron como el segundo lugar en la División Oeste; atrás de ellos en el número 5 los Cardenales de San Luis que terminaron la agenda ordinaria como número 2 como segundo lugar en la División Central, y en el número 6 los Marlines de Miami que culminaron como el segundo lugar en la División Este, y sin haber logrado los primeros sitios en sus divisiones pero como los números 7 y 8 mejor ubicados los Rojos de Cincinnati y los Cerveceros de Milwaukee.
En la misma serie de comodín Dodgers de Los Ángeles superó fácilmente a Milwaukee, Bravos de Atlanta dio cuenta de Rojos de Cincinnati, la sorpresa Marlines de Miami venció a Cachorros de Chicago y en una cerrada campal Padres eliminó a Cardenales de San Luis y enfrentará a Dodgers en la siguiente fase.
Ahora bien, al ponerse en marcha la Serie Divisional se mantienen como favoritos en la Liga Americana, Tampa Bay y Oakland, sin dejar de tener su oportunidad aún no siendo favoritos los Yankees de Nueva York y los Astros de Houston; y por la nacional se consideran favoritos para ganar la serie divisional y la serie de liga a Dodgers de Los Ángeles, seguidos por Bravos de Atlanta que están cerrando a tambor batiente, y sin descartar a Padres de San Diego y Miami, equipos que llegan bastante motivados para dar la pelea.
Habrá que recordar que ya en la Serie Divisional se establece regresar al formato que estamos acostumbrados, es decir, a ganar 3 de 5 juegos, aunque este año tendrán la particularidad de llevarse a cabo en sitios neutrales (San Diego y Los Ángeles en lo que respecta a la Liga Nacional; y en Arlington y Houston por lo que se refiere a la Liga Americana), hasta su definición en la Serie Mundial.
Y siguiendo de cerca el desempeño de peloteros mexicanos en la Gran Carpa, habrá que decir que muchos de ellos tuvieron que despedirse de los playoffs, tras ser eliminados sus respectivos equipos.
Destacando que siguen en la contienda tres jugadores de Charros de Jalisco, ellos son: el joven lanzador nayarita, Víctor Aarón González con Dodgers de Los Ángeles, incluso con posibilidad de seguir avanzando toda vez que el conjunto angelino es fuerte candidato a disputar el Clásico de Otoño, así como los compatriotas que juegan para Astros de Houston, el lanzador derecho Humberto Castellanos y el pitcher sinaloense José Roberto Osuna, quien logró evadir el quirófano y ha confirmado ya está afinando el brazo en espera de ser activado en breve para jugar lo que resta de la postemporada.
En total, los mexicanos que siguen en playoffs son en la Liga Americana, Joakim Agustín Soria Ramos y Khris Adrian Davis Alarcón con Atléticos de Oakland, Luis Cessa con Yankees de Nueva York, y José Luis Hernández Urquidi, Humberto Castellanos y José Roberto Osuna con Houston y en la Liga Nacional, Julio César Urías Acosta y Víctor Aarón González con los Dodgers.
ACUERDO HISTÓRICO
En los últimos días se conoció de un convenio que en breve signarán los dirigentes de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) el máximo circuito beisbolero que se juega en primavera-verano, con Major League Baseball (MLB), a través del cual se pretende fortalecer y sin duda, favorecer el horizonte de los peloteros mexicanos.
Se dice que con este convenio, del cual se conocerán mayores detalles en las próximas semanas, se dejará atrás las condiciones acordadas en el anterior pacto que restringía la firma de prospectos por las organizaciones de Ligas Mayores.
“En el acuerdo que está por expirar y que tuvo vigencia por dos años, los jóvenes con talento debían tener al menos dos años en el roster de un equipo de Liga Mexicana para ser elegibles de ser tomados por un club de Grandes Ligas.
Al reestructurarse y reducirse el número de equipos en el programa de Ligas Menores en los Estados Unidos, el beisbol mexicano seguirá en la mira de las franquicias de MLB.
Como ejemplo está el debut que vivieron esta temporada siete jugadores, la segunda cifra más alta para peloteros nacionales en arribar a la Gran Carpa.
Este año alcanzaron el sueño americano Víctor Aarón González, pitcher zurdo con Dodgers; Humberto Castellanos, pitcher derecho, con Astros; Issac Paredes, tercera base con Detroit; Luis González, jardinero, con Medias Blancas; Jesús Cruz, pitcher derecho con Cardenales; Ramón Urías, jugador de cuadro con Orioles, y Alejandro Kirk, con Azulejos.
Históricamente ha habido casos como el de Jorge Orta, que pasó de Liga Central en México a Grandes Ligas sin jugar Ligas Menores; o Germán Jiménez, que pasó de un día para otro de los Charros de Jalisco a los Bravos de Atlanta.
Aunque el camino ofrecerá menos espacios con la reducción de equipos sucursales, los peloteros mexicanos con talento seguirán teniendo el impulso y las facilidades para lograr el anhelo de llegar a las Ligas Mayores”. (Milenio01/10/20).
E-mail: opinión.salcosga@hotmail.com
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LOS PELOTEROS
Charros se quedó sin gas: Diablos, digno campeón

– Deporte Rey, por Gabriel Ibarra Bourjac
Diablos Rojos es un digno y gran campeón. Logró ganar la Serie del Rey, venciendo en la final a Charros de Jalisco, jugando un beisbol de alto nivel al barrer al conjunto tapatío en cuatro juegos.
La superioridad de los capitalinos quedó demostrada. Los escarlatas fueron muy superiores con un equipo muy balanceado, con un juego explosivo, sólidos tanto en la ofensiva, defensiva, corriendo las bases, como su cuerpo de inicialistas y relevistas, mostrando no solo su superioridad, sino pasar a la historia como uno de los mejores clubes en los últimos 50 años al obtener su corona número 18.
Diablos con este campeonato del 2025, no solo es bicampeón de la LMB, sino que además se convierte en el club con más cetros acumulados con 18, superando a Naranjeros de Hermosillo que tiene 17 en la Liga Mexicana del Pacífico.
Una felicitación a Diablos Rojos del México, a su timonel, el norteamericano Lorenzo Bundy, y a su presidente, Alfredo Harp Helú, quien no tuvo reparo en ofrecer los apoyos requeridos —abrir la chequera— para integrar un conjunto de extraordinarios peloteros que venció a todos los rivales que se encontró en el camino.
CHARROS
Terminó el sueño de Charros de Jalisco con el manager Benjamín Gil de timonel de lograr la hazaña de ser el primer equipo campeón de las dos grandes ligas del beisbol en México: Liga Mexicana del Pacífico (LMP) y Liga Mexicana de Beisbol (LMB).
La afición jalisciense al rey de los deportes abrigaba la idea de que su equipo fuera campeón de la liga de verano, después de haber entrado de panzazo a los play-offs de esta temporada 2025, pero llegando a y haber eliminado al gran favorito Sultanes de Monterrey, que había quedado de gran líder en el rol regular, mientras que Charros en la última serie antes de que cayera el calendario, logró colarse a la postemporada.
No fue así. Fue un gran mérito que Charros lograra el Campeonato de la Zona Norte de la LMB, venciendo a Sultanes en dos ocasiones, que era el gran favorito.
Por cierto, el equipo regiomontano el pasado año fue el campeón de la Zona Norte y, al igual que Charros sucumbió en la Serie del Rey en cuatro partidos, lo que nos muestra el poderío de Diablos, convertido en un tremendo trabuco en el beisbol mexicano.
GRAN TEMPORADA DE CHARROS
El conjunto tapatío tuvo este año su segunda participación en la LMB en la era de la familia González Íñigo que adquirió la franquicia que antes perteneció a Mariachis, para convertirlo en Charros. El haber logrado ser campeón de la Zona Norte y disputar con Charros la Serie del Rey en este aniversario del centenario de vida de la LMB, ha permitido vivir semanas muy intensas, con juegos que llevaron las emociones al clímax.
En los dos últimos partidos disputados en el Estadio Panamericano fue muy grato verlo repleto, donde no cabía un alfiler, con la afición empujando al equipo.
Si bien no se logró el campeonato, el equipo cumplió sobremanera, un grupo de peloteros que habían vivido una temporada de altibajos logró sublimarse al final de la temporada con ese espíritu de lucha para lograr que la afición acudiera a darle el apoyo.
Así, termina un ciclo de ensueño para la organización albiazul, que incluyó su tercer trofeo de campeón en la Liga ARCO Mexicana del Pacífico –en enero pasado frente a los Tomateros de Culiacán–, y el pase a la Final de la LMB, fruto de su campeonato en la Zona Norte.
No hay descanso para Charros de Jalisco, que ya se prepara para iniciar la defensa de su título en la LMP: este lunes reportan los primeros invitados al roster para la campaña invernal, que arranca el próximo 16 de octubre, recibiendo a los Águilas de Mexicali, en el Panamericano.
LOS PELOTEROS
Charros vs. Diablos: ¿Habrá de nuevo jarabe tapatío como en Monterrey?

– Deporte Rey, por Gabriel Ibarra Bourjac
En una final de la Serie del Rey, cualquiera puede ganar. Cuando los Charros de Jalisco enfrenten a los Diablos Rojos del México a partir de este miércoles, el diamante será un campo de batalla donde el corazón, la estrategia y la pasión decidirán al campeón de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB).
Este duelo es inédito en la historia de las finales de la LMB, un choque de titanes que promete emociones al límite. Los Diablos Rojos llegan como favoritos. Campeones en 2024 y bicampeones de la Zona Sur, buscan su título 18 y el primer bicampeonato de la LMB en 15 años.
Con un récord arrollador de 63-25 en la temporada regular, liderados por figuras como Robinson Canó, Río Ruiz, José Marmolejos y el tapatío Julián Ornelas, los escarlatas, bajo la dirección del experimentado Lorenzo Bundy, son una máquina ofensiva.
Su fortaleza en el Estadio Alfredo Harp Helú, donde abrirán los juegos 1 y 2 (10 y 11 de septiembre, 19:00 horas), los respalda. Pero, como diría un viejo aficionado, “en el béisbol, la grandeza no basta si el corazón no late”.
Los Charros de Jalisco, en cambio, son la sorpresa de 2025. Con un récord modesto de 46-46, se colaron al playoff con el sexto boleto tras vencer a Saraperos de Saltillo. Nadie apostaba por ellos.
“Charros no tiene nada que hacer ante Monterrey”, decían.
Pero, liderados por Benjamín Gil, considerado el mejor timonel del béisbol mexicano, dieron la campanada. Con cinco banderines en la Liga Mexicana del Pacífico (cuatro con Tomateros y uno con Charros en 2024-2025), Gil transformó un equipo inconsistente en una fuerza imparable.
En los playoffs, con 19 juegos (12 victorias, 7 derrotas), vencieron a Unión Laguna en un séptimo juego épico y humillaron a los Sultanes de Monterrey, líderes de la temporada con 55-37, en dos rondas (4-3 y 4-1). “El béisbol no miente: premia al que lucha”, diría Gil.
La hazaña de los Charros trasciende los números. Rompen una sequía de 54 años sin llegar a la Serie del Rey (desde 1971), su tercera final en la LMB (1950, 1971, 2025).
Son el único equipo que este año disputó la final de la Liga Mexicana del Pacífico, la Serie del Caribe y ahora la Serie del Rey, un logro histórico que los consagra como élite.
“Jalisco no juega solo por un trofeo; juega por su gente, por los que llenan el Panamericano con cánticos y banderas”, escribiría un cronista tapatío.
La serie, que continuará en el Estadio Panamericano de Zapopan (13 y 14 de septiembre, 18:00 y 17:00 horas, con un posible juego 5 el 15) y podría regresar a la capital (17 y 18 de septiembre), será una batalla épica.
Esta final es una fiesta nacional. El duelo enfrenta dos estilos: la solidez de Bundy, con su experiencia, contra el ímpetu de Gil, un motivador que levanta la autoestima de sus jugadores. En el diamante, como en la vida, gana quien entiende el alma de su equipo.
Este choque es más que deportivo; es una metáfora de México. Los Diablos representan la tradición y el poderío de la capital, un equipo que no admite derrotas. Los Charros encarnan la rebeldía tapatía, un conjunto que desafía pronósticos con garra.
La afición será clave. En Guadalajara, el Panamericano roza el lleno, respondiendo al llamado de Gil para hacer del estadio un volcán.
En la CDMX, los Diablos cuentan con un público leal que llena el Harp Helú. El béisbol es el pulso de un pueblo que se juega la gloria en cada lanzamiento. Los Charros necesitan consistencia en pitcheo y bateo oportuno para superar la historia de los Diablos. Los escarlatas deben evitar la complacencia ante un rival que crece bajo presión.
Cada juego será un capítulo de esta narrativa, donde el orgullo regional de Jalisco choca con la hegemonía capitalina. En esta Serie del Rey, el centenario de la LMB se celebra con un duelo que trasciende el marcador. Charros y Diablos nos regalan un espectáculo donde la estrategia, la pasión y el coraje decidirán al rey.
Diablos llega como favorito, como lo fue Monterrey ante Charros en los playoffs. “Sultanes no tiene rival”, decían, pero Jalisco bailó el jarabe tapatío en el Palacio Sultán. Con Gil al frente, Charros juega inspirado.
¿Lograrán los Diablos su corona 18 o veremos nacer a un nuevo titán de la LMB, como ya lo es Charros en el Pacífico?
El béisbol no tiene guion escrito; es un juego de valientes donde cada batazo escribe la historia.
Este miércoles es el primer juego, comienza esta leyenda. Que el diamante hable y que el corazón tapatío, con su afición rugiendo, deje una huella imborrable en esta batalla por la eternidad.