Connect with us

OPINIÓN

Amoríos y odios de la DEA en México

Publicado

el

Tercera Instancia, por Modesto Barros González //

La traición es la principal característica entre el personal de la Agencia Antidrogras Norteamericana (DEA, por sus siglas en inglés). Es y ha sido parte de la “traición” con todo y lo que pregona que está dedicada a la lucha contra el contrabando y el consumo de drogas en el país del norte, además del lavado de activos, según pregonan.

La Drugs Enforcement Administration (DEA) depende del Departamento de Justicia desde su formación con ese nombre en 1968. “Aprieta” y “afloja” a sus conveniencias para llevar a cabo lo que les conviene.

En ocasiones otorga todos los apoyos y recursos a varias personas que se podrían calificar como sospechosas y de presuntas relaciones con actividades ilícitas, pero cuando la “querencia” concluye o se disminuye, los mandos de esa empresa, perdón, agencia, dan la vuelta a la tortilla y se les van encima hasta acabarlos.

Se ha dicho que la DEA no puede operar dentro del territorio de su país, posiblemente para no salpicar o pisar a sus propios paisanos y hasta su acción es muy dudosa porque está “impedida” en descubrir y arrestar a poderosos narcotraficantes que deben de operar y manejar cientos de millones de dosis de drogas entre los drogadictos que residen en la Unión Americana, por lo menos eso estiman los enterados en esa materia.

Ahora bien lo que haga la DEA o deje de hacer en su país es responsabilidad absoluta de su gobierno, pero desde hace varias decenas de años se ha convertido en la “poderosa policía del mundo” con la libertad de implicar, perseguir y descubrir a poderosos narcotraficantes.

Se puede calificar como acertada su actuación, sin embargo llama la atención el reciente arresto del exsecretario de la Defensa Nacional de México, general de división diplomado del Estado Mayor, Salvador Cienfuegos Zepeda, al que la DEA acusa de proteger por más de tres años al grupo delincuencial del H-2 como se le decía a Héctor Beltrán Leyva, capturado desde 2014.

Al que fuera el poderoso mando militar en la administración del expresidente Enrique Peña Nieto, le fincan por lo menos cuatro delitos graves y pareciera que van con todo contra de él, como lo hicieron hace años contra el general Jesús Gutiérrez Rebollo, al cual primero lo premiaron con ser el hombre fuerte contra los narcotraficantes y luego le propinaron la “puñalada” por la espalda, como califican sus amistades y lo acusaron de proteger a Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”.

Por cierto Gutiérrez Rebollo, falleció hace unos meses después de haber sido encarcelado en la capital de Nayarit.

Existen varios comentarios publicados que la detención del General Cienfuegos, será aprovechada en la próxima elección del Presidente de Estados Unidos, para conseguir votos a favor del Señor Trump, quien parece que cada vez está más lejos de poderla conseguir y lo substituirán por el demócrata Joe Biden, lo que se verá en unos días más.

Tal parece que al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya le está despertando sospechas las constantes operaciones que hacen en nuestro país los “intocables” empleados de la DEA, quienes igual se coluden con verdaderos peligrosos criminales, como se codean con las altas autoridades del gobierno de la república y de los gobiernos estatales.

Corrompen, cobijan y descobijan a quien ellos quieren o de quien dice que les proporciona información para luchar contra los que realizan las ilícitas actividades del narcotráfico.

Esa fuerza extranjera por años hace lo que le pega en gana y en ocasiones se les aplaude los fuertes golpes que han dado, pero también se les critica cómo se enriquecen algunos de sus elementos al corromperse cuando se “infiltran” con los peligrosos grupos de traficantes de droga.

Por cierto la “poderosísima” y supuestamente “efectiva” DEA, durante varios años tuvo en “la mira” de su escopeta al general Cienfuegos, mientras, han dicho, que el gobierno de su país (EEUU) ha solicitado al Gobierno de México la captura y extradición de Ovidio Guzmán López, hijo del El Chapo Guzmán, Joaquín Archivaldo Guzmán Loera.

Como se recordará hace un año en la capital de Sinaloa, Culiacán, elementos del Ejército Mexicano y algunos agentes de la DEA, infiltrados, según publicaciones, detuvieron por varias horas a Ovidio, pero por instrucciones del propio Presidente de México, según aceptó hace unas semanas, lo tuvo que dejar libre por la seguridad de la población de esa ciudad de Sinaloa.

Tal parece que la fallida detención del hijo de “El Chapo”, le ha servido de impunidad y parece que ya no ha delinquido o por lo menos los norteamericanos ya no tienen elementos contra de él, pero sus baterías se han enfocado contra el general Cienfuegos.

Ahora hay que esperar si la SEDENA o por lo menos sus altos jefes tienen voluntad y elementos para defender al que fue su jefe máximo o lo dejarán a su suerte, aunque el Presidente Andrés Manuel López Obrador, ya advirtió que algunos de los que operaron en forma cercana con el general Cienfuegos, tendrán que salir de esa Secretaría.

Mientras está la rebatinga del militar de carrera arrestado y posiblemente encarcelado en el Estado de Nueva York, en México, este domingo se celebraron elecciones en dos estados, Hidalgo y Coahuila, aunque algunos miembros de partidos oficialistas las querían retardar para el 2021 con el pretexto de la pandemia y posiblemente para lograr mejores resultados en la gran contienda que se celebrará en junio del próximo año en la República Mexicana.

Esperemos que sean tranquilas y limpias la contienda de éste domingo 18 de octubre de 2020.

Continuar Leyendo
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Copyright © 2020 Conciencia Pública // Este sitio web utiliza cookies para personalizar el contenido y los anuncios, para proporcionar funciones de redes sociales y para analizar nuestro tráfico. También compartimos información sobre el uso que usted hace de nuestro sitio con nuestros socios de redes sociales, publicidad y análisis, que pueden combinarla con otra información que usted les haya proporcionado o que hayan recopilado de su uso de sus servicios. Usted acepta nuestras cookies si continúa utilizando nuestro sitio web.