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Medio Oriente es un polvorín: Se agrava la tensión Israel-Irán

Actualidad, por Por Alberto Gómez R. //
Los precios internacionales de los commodities se han disparado en las últimas semanas, especialmente del sector energético y los metales preciosos, como reacción al incremento de las tensiones geopolíticas en Oriente Medio, que probablemente lleve el precio del barril de petróleo a los 100 dólares o más ante el incremento de ataques entre Israel e Irán.
La madrugada del sábado 13 de abril, Irán lanzó una ofensiva sin precedentes con aviones no tripulados y misiles contra Israel, un ataque de represalia ampliamente anticipado como respuesta a los ataques israelíes contra objetivos iraníes, como el bombardeo a la embajada de Irán en Damasco, Siria, una doble violación al derecho internacional y a la soberanía de ambas naciones.
El papa Francisco lanzó el domingo (14 abril) un «llamado urgente» contra «una espiral de violencia» susceptible de «arrastrar a Medio Oriente a un conflicto aún mayor», tras el ataque de Irán contra Israel. «Lanzo un llamado urgente para que cese cualquier acción que pueda alimentar una espiral de violencia que podría arrastrar a Medio Oriente a un conflicto aún mayor», declaró el líder religioso después de su tradicional oración dominical en público, en la plaza de San Pedro del Vaticano.
Una escalada bélica en Medio Oriente tendría repercusiones significativas en la economía mundial debido a la importancia estratégica de la región en la producción y el suministro de energía, así como a su impacto en los mercados financieros globales y el comercio internacional, trayendo consecuencias como:
- Aumento de los precios del petróleo: El Medio Oriente es una importante región productora de petróleo, y cualquier conflicto en la región podría interrumpir la producción y el transporte de petróleo, lo que podría llevar a un aumento de los precios del petróleo a nivel mundial. Esto afectaría a la economía global, aumentando los costos de energía para empresas y consumidores, y podría desencadenar una desaceleración económica.
- Volatilidad en los mercados financieros: Las tensiones geopolíticas en el Medio Oriente pueden generar volatilidad en los mercados financieros globales. Los inversores tienden a volverse más cautelosos en tiempos de incertidumbre geopolítica, lo que puede llevar a una venta masiva de acciones y otros activos financieros considerados riesgosos. Esto podría afectar negativamente a los mercados de valores y de bonos en todo el mundo.
- Impacto en el comercio internacional: El Medio Oriente es un importante centro de comercio internacional, y cualquier conflicto en la región podría interrumpir las rutas comerciales y el transporte marítimo. Esto afectaría el comercio internacional, causando retrasos en la entrega de bienes y aumentando los costos de envío. Además, la incertidumbre resultante podría llevar a una disminución en la inversión y el comercio global.
- Aumento de la inestabilidad regional: Una escalada bélica en el Medio Oriente podría conducir a una mayor inestabilidad en la región, lo que podría tener repercusiones humanitarias y económicas a largo plazo. La inestabilidad política y social podría desencadenar flujos de refugiados, aumentar las tensiones étnicas y religiosas, y socavar la estabilidad de los países vecinos, lo que a su vez podría tener impactos económicos negativos en la región y más allá.
Adicional a lo anterior, el riesgo velado de una conflagración a gran escala -incluso nuclear-se acerca rápidamente a materializarse, ya que la injerencia de los países occidentales liderados por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN sólo complican el escenario.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha convocado a los embajadores de Reino Unido, Alemania y Francia para protestar por su “postura irresponsable” al declarar su apoyo incondicional a Israel frente al ataque sin precedentes con cientos de drones y misiles balísticos encabezado por Teherán.
En un comunicado, el Gobierno iraní ha declarado a los tres embajadores que lo ocurrido esta pasada noche es una represalia al ataque contra el Consulado de Siria en Damasco, que Teherán atribuye a Israel.
Estados Unidos y la OTAN siguen abriendo nuevos frentes bélicos en una escalada de tensiones geopolíticas sin precedentes, que impactan no sólo en el ámbito político internacional sino en la economía global, apenas en recuperación luego de la pandemia del coronavirus.
Javier Hernandez
17 de abril de 2024 at 20:13
Si es de mucho interés de mi parte estar informado de lo que está pasando en medio orientee.