OPINIÓN
¿Será realidad?
Luchas Sociales, por Mónica Ortiz //
¡Que no quede en el discurso del evento! Gobierno del Estado anuncia estrategia de combate a la violencia de género en Jalisco, mediante un programa rector buscará dar acceso a la justicia a mujeres víctimas de violencia en razón de género, con acciones de prevención y atención que incluyen la transversalidad de diversas dependencias públicas.
Se intervendrá el grave problema de la violencia contra las mujeres, adolescentes y las niñas, las cuales deben tener sin duda la política pública adecuada, nunca politizada y de interés general de los gobiernos todos. Pero ante la aceptación de que la violencia es real y aunque se origine comúnmente desde el seno familiar, no existe excusa para no prevenir y asistir a las víctimas con toda la infraestructura necesaria para generar consciencia social.
En este contexto, sabemos que en el día a día las principales víctimas de este terrible cáncer que es la violencia de género, son sin duda las mujeres, adolescentes, las niñas y grupos vulnerables. Sin embargo, cuando un gobierno es estable se compromete con políticas públicas para prevenir, atacar y erradicar un problema social grave en el que las personas son víctimas y por obvias razones requieren atención, intervención preventiva o inmediata de autoridades y finalmente el derecho a tener acceso a la justicia y reparación del daño
Se debe exigir que los gobiernos que toman el tema y aseguran entrar a generar acciones, no sean exclusivamente para conseguir percepción intencional, previa a las cifras reales de lo fatal que es el problema y al impacto mediático que atrae antes del día internacional de la mujer, pues de ser así será una estrategia tristemente sin resultados reales más allá de las fotos, los titulares y las personalidades asistentes a la presentación de tan importante evento para nuestra sociedad jalisciense.
En este sentido, es importante que los gobiernos y dependencias públicas que son parte de los 5 ejes de esta estrategia emergente que pretende el poder ejecutivo estatal, sean lo bastante cuidadosos para deducir que el principal problema de este doloroso tema es la revictimización, la falta de empatía y la falta de especialización de los funcionarios y servidores públicos que dan atención a las víctimas, su deshumanización ante la problemática, el desconocimiento de protocolos nacionales e internacionales y derechos humanos, la insensibilidad de personas debido a que carecen de empatía genuina y real pero atienden víctimas, por lo que no logran que las víctimas se sientan protegidas y acompañadas por las instituciones públicas, es uno de los mayores obstáculos y principal motivo de que fallen este tipo de políticas públicas emergentes.
Habrá entonces que comprender que la atención a mujeres, adolescentes, niñas y grupos vulnerables inicia de manera efectiva con la capacitación y concientización de los involucrados en atacar el problema sirviendo a la sociedad, mientras mantengamos normalizada la violencia y creamos que es un asunto personal, toleremos la cultura machista, las agresiones, la discriminación en todas y cada una de sus formas, pero sobre todo cuando como sociedad también razone respecto a que los agresores en una gran mayoría tiene evidentemente un problema de salud mental, quizás entonces conscientes, capacitados, entregados al servicio público para la sociedad y no a la camiseta del grupo político que los llevó a ser funcionarios o servidores públicos, se consiga un cambio, combate real y empatía por las víctimas de violencias, de otra forma solo es un ataque contra la violencia de género parcial y simulado.
La transversalidad de la Estrategia Emergente contra la Violencia en Razón de Género, los municipios metropolitanos y el Gobierno del Estado, resultará de manera efectiva y será solidaria cuando la empatía, la capacitación y la salud mental de las personas encargadas de auxiliar, guiar y atender a víctimas reales esté presente en el servidor público de primera línea y no sean victimarios en sus hogares, círculo de amigos y trabajo, porque solo así se logrará capacitar perfiles adecuados y se combatirá adecuadamente la violencia y sus múltiples formas con consecuencias fatales y devastadoras finales para las víctimas, por los daños que ocasiona, el tipo de ayuda que requieren las víctimas es sumamente especializada; en una sociedad que normaliza la violencia, la cultura del machismo y la politiquería, quizás habría que dudar de la intención de los entes gubernamentales que buscan proyección política positiva a través de supuestas luchas en las que no tienen intención de ganar y dejar los aplausos para los resultados.
