MUNDO
Previsiones del FMI: La economía actual en la pandemia

Economía Global, por Alberto Gómez R. //
Mientras la economía mundial se encuentra en una situación de incertidumbre máxima, y se ve un rotundo fracaso de Europa, que ni frena el coronavirus ni reactiva su economía, otras regiones del mundo se recuperan rápidamente y surgen nuevas oportunidades de negocios a la par que se fortalece, y en camino a consolidarse la economía digital.
Las cifras de nuevos contagios siguen aumentando sin cesar; esta nueva ola de contagios del coronavirus es más rápida, agresiva y letal, ya que el covid-19 se está presentando ya no sólo en adultos mayores y personas con ciertas predisposiciones genéticas o enfermedades crónicas como la diabetes o alta presión –como en el inicio de la pandemia hace un año- sino que ahora se está presentando en un gran número de jóvenes entre 15 y 35 años, muchos de los cuales están siendo víctimas mortales del padecimiento.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha rebajado con fuerza la previsión de crecimiento de la eurozona para 2021, con un golpe especialmente duro para España e Italia, países cuyas economías dependían en gran parte del sector servicios, específicamente del turismo, una industria convulsionada y en sus estertores de muerte, cuando menos como hasta hace un año lo fue.
Por el contrario, ha mejorado su estimación para el conjunto de economías desarrolladas, entre las que destacan Estados Unidos, con una mejora de dos puntos, y Japón, con un avance de 0.8 puntos, claro que ambas son las naciones con el mayor endeudamiento del mundo, y las alegres previsiones del FMI son producto de sus propios intereses al manipular la información para seguir ordeñando a una moribunda vaca lechera, hablando en términos mercadológicos.
El producto ya no está en su mejor momento pero es imprescindible para la empresa (instituciones financieristas internacionales), sobre todo porque no requiere una gran inversión -únicamente el costo de impresión de billetes- para su desarrollo y es un producto aceptado en el mercado (los dólares estadounidenses). Los productos vaca son útiles para generar inversión para otros negocios, como la implementación de un gobierno mundial único, algo anunciado desde hace décadas por personajes como Henry Kissinger, o George H.W. Bush (padre).
El FMI constata que mientras la recuperación se mantiene en aparente ascenso en algunos países de Asia, África, América Latina y Oceanía, en Europa languidece.
Las restricciones aprobadas en noviembre, durante la segunda ola, provocaron una recaída del empleo y las ventas en la mayor parte del continente, por lo que es de esperar que el endurecimiento de las medidas en este inicio del año vuelva a provocar una contracción de la actividad económica en general.
Las predicciones más optimistas del FMI hablan que la eurozona recuperará los niveles de PIB (Producto Interno Bruto) previos a la crisis hasta finales del año 2022; y España e Italia hasta 2023, si la emergencia de salud logra controlarse y se mitiga la grave situación de sus economías. Esto significa que la pandemia habrá provocado la pérdida de tres años en términos de actividad económica, y probablemente más en términos de empleo, y avances en desarrollo humano y social.
Sin embargo, las crisis económicas inequívocamente conllevan oportunidades; dentro del espectro de posibilidades que se abren durante esta ocasionada por la pandemia del coronavirus, están por ejemplo, el fortalecimiento del consumo interno de los países; incentivar la derrama económica doméstica en sectores como el turístico, ante la imposibilidad de realizar viajes al extranjero por el momento, ya sea por restricciones para entrar a una larga lista de países, por el confinamiento social, cuarentenas, exigencia de garantías de no ser portador del coronavirus, o simplemente por falta de liquidez económica para realizar viajes internacionales debido a la falta de empleo, y al recorte de sueldos y percepciones cada vez más extendido.
Una oportunidad para conservar el valor del dinero a largo plazo es la inversión en activos duros, como los metales preciosos y las criptomonedas, encabezadas por el Bitcoin (BTC); empresas de fondos de inversión como Microstrategy, continúan apostando al “caballo más rápido” –en palabras de Paul Tudor Jones, uno de los gurús más míticos de Wall Street; en el año de la pandemia (2020), el Bitcoin multiplicó por cuatro su valor. Pero en cierto sentido, fue Tudor Jones quien abrió los ojos de muchos escépticos. La divisa digital puede ser una cobertura contra la inflación mejor que el oro; el hecho de que grandes fondos como Grayscale, Block One y Microstrategy hayan seguido acumulando activos en Bitcoins es una prueba más de esta teoría.
MicroStrategy ha estado invirtiendo en Bitcoin, haciendo que BTC sea un activo de reserva de sus fondos. Actualmente, es el mayor tenedor de BTC entre las empresas públicas, con más de 70,000 BTC por valor de unos $2,800 millones de dólares al precio actual de Bitcoin, que después de algunas semanas de correcciones llega nuevamente a los $41,000 dólares, luego de retroceder hasta los $31 mil hace un par de semanas.
La capitalización de mercado actual de Bitcoin es de más de $763 mil millones de dólares, esto es mayor que la de empresas como Facebook y Alibaba, la empresa minorista de e-commerce más grande de China.
MUNDO
Rechaza ser deportado Hernán Bermúdez Requena de Paraguay

– Por Francisco Junco
Hernán Bermúdez Requena, el ex secretario de Seguridad Pública, nombrado por el entonces Gobernador de Tabasco, Adán Augusto López, ahora senador de la República, rechazó ser extraditado a México.
Durante la audiencia inicial, donde un juez dictó prisión preventiva, se le ofreció la extradición voluntaria, pero Bermúdez Requena, presunto líder del cartel de “La Barredora”, no aceptó.
Ahora se iniciará un proceso ordinario, que podría tardar hasta 60 días, en tanto, Bermúdez Requena, continuará bajo la custodia de la Secretaría Nacional Antidrogas de Paraguay.
En tanto, en México se informó que la Fiscalía General de la República ya presentó la solicitud de extradición contra Hernán Bermúdez Requena al gobierno guaraní.
“El Abuelo” o “El Comandante H”, como se le conoce al exfuncionario del gobierno del morenista Adán Augusto López en Tabasco, e identificado como el presunto líder del Cártel de “La Barredora”, fue detenido la madrugada del sábado, en Paraguay, en una residencia ubicada en la zona exclusiva de Marino Roque Alonso, donde permanecía escondido.
Este fin de semana, el presidente Santiago Peña, dio a conocer, en un pequeño video de 45 segundos, cómo fue el arresto de Bermúdez Requena.
En las imágenes, primero se ven aspectos de la residencia, se ve cómo las fuerzas especiales, revisaron la finca y derribaron la puerta, suben una escalera y someten a ex secretario de seguridad, lo encañonaron y lo tiraron al suelo, donde lo tenían sometido, bocabajo y un elemento le pone un pie en la espalda.
Después, el presunto líder de La Barredora, quien cuenta con una ficha roja activa de la Interpol, aparece sentado en un sillón con ropa deportiva, pelo más largo y canoso, barba larga.
Cuenta con una orden de captura en México por asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés.
En el video, se muestra que en la residencia, donde permanecía escondido, había fajos de dólares y guaraníes, moneda uruguaya, así como joyas, tarjetas bancarias, identificaciones y una camioneta de alta gama.
Manuel Doltane, titular de Asuntos Internacionales de la Fiscalía de Paraguay, reveló que Bermúdez, entró de manera ilegal al país.
Y es que en febrero de este año, después de hacer pública la orden de aprehensión en su contra, el ex funcionario estatal huyó del país.
De acuerdo con las autoridades, viajó primero a Panamá, después a España, más tarde a Brasil, para terminar en Paraguay.
En medios locales del país sudamericano, como el diario ABC, informaron que la detención del ex funcionario de Adán Augusto López, se logró, gracias a que en el mes de julio se detuvo a Gerardo Bermúdez Arreola, sobrino del presunto líder de “La Barredora”.
CARTÓN POLÍTICO
Edición 807: Magistrada Fanny Jiménez revoca rechazo de pruebas y defiende Bosque de Los Colomos
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LAS NOTICIAS PRINCIPALES:
Crónica de una semana tensa en la UdeG: La rebelión estudiantil que desafía a la FEU
MUNDO
Tolerancia en tiempos de algoritmos

– Opinión, por Miguel Anaya
¿Qué significa ser conservador en 2025? La etiqueta, lejos de significar a una persona o grupo de ellas, aglutinadas en torno a la Biblia o valores cristianos, se ha vuelto un acto de rebeldía. El conservadurismo pareciera significar a una nueva minoría (o una mayoría silenciosa) que enfrenta un prejuicio constante en redes sociales.
En sociedades donde la corrección política dicta el guion, ser conservador implica defender valores tradicionales —para algunos valores anacrónicos— en medio de un mar de redefiniciones. La sociedad dio un giro de 180 grados en tan solo 20 años y aquellos que señalaban hace dos décadas, hoy son señalados.
¿Y ser liberal? El liberalismo que alguna vez defendió la libertad frente al Estado hoy se ha transformado en progresismo militante: proclamar diversidad, reivindicar minorías, expandir derechos. Noble causa, sin duda.
El problema comienza cuando esa nobleza se convierte en absolutismo y se traduce en expulsar, callar o cancelar a quien no repite las consignas del día. El liberal de hoy se proclama abierto, pero con frecuencia cierra la puerta al que discrepa. Preocupante.
He aquí la contradicción más notable de nuestro tiempo: vivimos en sociedades que presumen de “abiertas”, pero que a menudo resultan cerradas a todo lo que incomoda. Lo que antes era normal hoy puede costar reputación, trabajo o, en casos extremos, la vida. Hemos reemplazado la pluralidad por trincheras y el desacuerdo por el linchamiento mediático (“funar” para la generación Z).
La polarización actual funciona como un espejo roto: cada bando mira su fragmento y cree que posee toda la verdad. Los conservadores se refugian en la nostalgia de un mundo que quizá nunca existió, mientras que los liberales se instalan en la fantasía de que el futuro puede aceptar todo, sin limitantes.
Ambos lados olvidan lo esencial: que quien piensa distinto no es un enemigo para destruir, sino un ciudadano con derecho a opinar, a discernir y, por qué no, a equivocarse humanamente.
La violencia y la polarización que vivimos, no son fenómenos espontáneos. Son herramientas. Benefician a ciertas cúpulas que viven de dividir, a las plataformas digitales que lucran con cada insulto convertido en tema del momento.
El odio es rentable; la empatía, en cambio, apenas genera clics. Por eso, mientras unos gritan que Occidente se derrumba por culpa de la “ideología woke”, otros insisten en que el verdadero peligro son los “fascistas del siglo XXI”. Y en el ruido de esas etiquetas, el diálogo desaparece.
Lo más preocupante es que ambos discursos se han vuelto autorreferenciales, encerrados en su propia lógica. El conservador que clama por libertad de expresión se indigna si un artista satiriza sus valores; el liberal que defiende la diversidad se escandaliza si alguien cuestiona sus banderas.
Todos piden tolerancia, pero solo para lo propio. Lo vemos en el Senado, en el país vecino, tras el triste homicidio de Charlie Kirk y hasta en los hechos recientes en la Universidad de Guadalajara.
En buena medida, este mal viene precedido de la herramienta tecnológica que elimina todo el contenido que no nos gusta para darnos a consumir, solo aquello con lo que coincidimos: EL ALGORITMO.
El algoritmo nos muestra un mundo que coincide totalmente con nuestra manera de pensar, de vivir, de vestir, nos lleva a encontrarnos únicamente con el que se nos parece, creando micromundos de verdades absolutas, haciendo parecer al que piensa un poco distinto como ajeno, loco e incluso peligroso. Algo que debe ser callado o eliminado.
Occidente, en 2025, parece olvidar que lo que lo hizo fuerte no fue la homogeneidad, sino la tensión creativa y los equilibrios entre sus diferencias. Quizá el desafío es rescatar el principio básico de que la idea del otro no merece la bala como respuesta.
Solo la palabra, incluso aquella que incomoda, puede mantener vivo un debate que, aunque imperfecto, sigue siendo el único antídoto contra el silencio y la complicidad impuestos por el miedo o la ignorancia.