LOS PELOTEROS
Charros parece mejorar: Trevor Bauer por la triple corona

Deporte Rey, por Gabriel Ibarra Bourjac //
Para lograr su séptima victoria de la temporada (7-0) con Diablos Rojos del México, batalló el estelar Trevor Bauer en Torreón en el juego en el que Diablos Rojos superó 7-4 al poderoso equipo de Algodoneros de Unión Laguna para regocijo de los amantes del rey de los deportes que abarrotaron el estadio de la Revolución, como lo hace en cada juego que el ex Cy Young sube al montículo.
Las crónicas del juego nos dicen que Bauer enfrentó dificultades con su comando en los tres primeros capítulos del juego al anotarle los Algodoneros al anotarle dos carreras y ponchar únicamente a un bateador, sin embargo se compuso y sacó cinco de los siguientes nueve outs por la vía del strike out.
Bauer es el primero de los lanzadores en alcanzar siete victorias, con efectividad de 1.70 y sumar 76 ponches, liderando ambos departamentos en la Liga Mexicana de Beisbol.
Bauer ha tenido seis salidas de calidad en nueve aperturas y en sus tres salidas previas como visitante ha dejado sin anotaciones a Tabasco en 7-1 episodios, permitiendo carrera sucia a Leones de Yucatán y blanqueando a Bravos de León en siete entradas.
Bauer va que vuela a conquistar la triple corona de pitcheo en la Liga Mexicana de Beisbol y el último que lo logró es Francisco Campos con Piratas de Campeche en la temporada de 2004.
TREMENDO LOS DIABLOS ROJOS
Y a propósito de los mejores equipos de esta temporada 2024 de la Liga Mexicana de Beisbol, Diablos Rojos del México es el número uno al llegar a 37 victorias contra 8 derrotas y estar en el liderato de la Zona Sur con 10 juegos de ventaja de Leones de Yucatán que tienen récord de 28-19.
En la Zona Norte el líder es Sultanes de Monterrey con 31-15, con ventaja de 4.5 juegos sobre Acereros y Tecos de los Dos Lareros con 27-20, más abajito, Algodoneros con 26-20, Toros con 24-23, seguidos de Rieleros (23-24), Saraperos (22-24), Charros (19-28) en el octavo lugar y hundidos en el fondo del standing están Caliente de Durango y Dorados de Chihuahua con 17-30 a 14.5 juegos del primer lugar.
ALTIBAJOS DE CHARROS
Vaya esfuerzo que ha venido realizando la directiva de Charros de Jalisco para salvar la presente temporada. Previo a su visita a León, Guanajuato, los tapatíos habían ligado 5 victorias, y se habían llevado el juego 6 en el primero juego ante Bravos, pero en el segundo juego de la serie, el pitcheo de relevo volvió a desaprovechar el apoyo de 11 carreras que le dio la ofensiva de Charros.
El lanzador norteamericano Matt Hartman había iniciado, pero una distensión muscular no le permitió seguir en la loma de los sustos cuando apenas había terminado de lanzar el segundo episodio, vino el relevo que hizo agua; entraron Samayoa, también lanzaron Miguel Aguilar, Severino González, Dovydas Neverauskas, Austin Pucket, Andrew Pérez, Elkin Alcalá y Bryan García, entre todos aceptaron 9 carreras. El peor fue Bryan García, quien entró en la novena con ventaja de 1 carrera (11-10), pero no logró contener la ofensiva de los guanajuatenses para perder el juego y así romper la racha de 6 victorias que habían hilvanado los tapatíos.
El primero de la serie ante Bravos lo había ganado el de Ocotlán Luis Iván Rodríguez quien en 6 entradas maniató a la artillería de Bravos en 1 carrera, 4 hits y 3 ponches. Greg Bird conectó en este juego su jonrón número 14.
Luis Iván que se integró hace poco más de un mes al equipo jalisciense mostró mucho mejor ritmo y control, seguramente será de gran ayuda al equipo en la segunda parte de la temporada. Finalmente Charros terminó perdiendo la serie ante Bravos.
El fin de semana el equipo viajó a Querétaro para enfrentarse a Los Conspiradores. El primero de la serie los pierde Charros 7-4 y el pitcher derrotado fue el zurdo Matt Minnick que terminó por explotar en el sexto capítulo, cuando recibió par de jonrones que se tradujeron en 3 carreras y en la voltereta en el score a favor de los locales.
El domingo Charros y Conspiradores tuvieron doble cartelera y dividieron honores. El primero lo ganó Querétaro 2-3 con anotación en la última entrada para dejar a los de Jalisco en el terreno de juego y así llevarse la serie.
En el segundo dominical y tercero y último de la serie Charros mostró su gran poder al conectar 6 jonrones para aplastar 11-3 a Conspiradores, par de cuadrangulares conectaron el ex yankee Greg Bird y Oswaldo Arcia, a su vez Dwight Smith y Giansanti conecaron snedos jonrones para aplastar a Conspiradores. Así Charros evitó la limpia. En esta salida los caporales perdieron 4 de 6 juegos y volvieron a las andadas.
Habrá que ver si esta semana vuelve a retomar el paso cuando Charros visiten Tijuana para enfrentarse a Toros y recibir el fin de semana en el Panamericano a a Dorados de Chihuahua. En cuanto al cuerpo de lanzadores inicialistas, Charros ha mejorado, pero el bullpen sigue siendo su parte más débil y la mayor preocupación cuando no pueden sostener la ventaja que les genera la ofensiva.
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LOS PELOTEROS
Charros, el orgullo tapatío que sueña con la gloria

– Deporte Rey, por Gabriel Ibarra Bourjac
Los Charros de Jalisco están sorprendiendo en los playoffs de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) 2025, emergiendo como un auténtico caballo negro.
Tras una temporada irregular, con rachas brillantes opacadas por caídas abruptas, lograron el sexto boleto a la postemporada con un cierre espectacular. Ahora, en las semifinales, están a un paso de la final de la Zona Norte, demostrando que tienen la garra para pelear por la Copa del Rey en el Centenario de la LMB.
En la primera ronda, Charros enfrentó al líder de la División Norte, Sultanes de Monterrey, un bicampeón que parecía imbatible. Con una ventaja de 3-0, los jaliscienses estuvieron cerca de barrer, pero Sultanes remontó y forzó un séptimo juego.
En el Palacio Sultán, Charros mostró temple y aseguró la serie 4-3, avanzando como un equipo transformado. Sultanes, gracias a su promedio, regresó como el mejor perdedor, prometiendo un posible reencuentro.
En las semifinales, Charros se mide contra Algodoneros de Unión Laguna en el Estadio Francisco I. Madero de Torreón. Lejos de la irregularidad de la temporada regular, el equipo exhibe un juego colectivo inspirado: todos corren, batean y fildean con precisión. El pitcheo, liderado por figuras como el guasavense Luis Armando Payán (suma 3 victorias en play-offs), el estadounidense Zac Grotz y el ocotlense Luis Iván Rodríguez, han sido clave.
En los primeros dos juegos contra Algodoneros, Charros dominó con victorias contundentes de 9-3 y 7-4, impulsado por el bateo explosivo de Willie Calhoun, Kyle Garlick y Mateo Gil, quien despertó de un slump con tres jonrones en la serie.
De regreso en el Estadio Panamericano de Guadalajara, Charros buscó barrer a Algodoneros con una ventaja de 2-0. El sábado, el guasavense Luis Armando Payán brilló en la loma, lanzando siete entradas magistrales, con siete ponches, tres hits y una sola carrera limpia, asegurando un triunfo de 8-1 que puso la serie 3-0.
Mateo Gil, apodado “el hijo del papá”, volvió a destacar, consolidándose como un motor ofensivo. La afición, respondiendo al llamado del mánager Benjamín Gil, llenó el estadio con cerca de 11,000 almas, un respaldo que refleja el orgullo tapatío por su equipo.
El domingo, sin embargo, Tláloc interrumpió la fiesta. El cuarto juego, con Algodoneros liderando 1-0 en el tercer inning, fue suspendido por lluvia, postergando la acción para el lunes.
A pesar de este contratiempo, Charros está a una victoria de la final de la Zona Norte, donde podría reencontrarse con Sultanes de Monterrey, un rival experimentado al que ya vencieron.
La serie promete ser un duelo de titanes, pero los jaliscienses han perdido el miedo y juegan con la confianza de un equipo destinado a hacer historia.
DIABLOS, GRANDES FAVORITOS
En el otro frente, los Diablos Rojos del México avanzan como favoritos al título. Tras barrer 4-0 a los Leones de Yucatán y tomar una ventaja de 3-0 sobre Pericos de Puebla con un triunfo de 13-6 el domingo, suman siete victorias en los playoffs de 2025, tras ocho en su campeonato de 2024. Su paso arrollador los perfila como el rival a vencer, con 17 gallardetes en su historia.
Una final entre Diablos y Charros sería un sueño para los aficionados, un choque de titanes que elevaría el béisbol en Guadalajara.
El esfuerzo de la directiva de la familia González Íñigo por mantener béisbol todo el año en Jalisco, con Charros compitiendo en la LMB (verano) y la Liga Mexicana del Pacífico (invierno), es digno de reconocimiento.
Sin embargo, la afición tapatía no ha respondido en verano como en invierno. Benjamín Gil, con su pasión característica, reclamó esta apatía, instando a los jaliscienses a llenar el Panamericano y apoyar al “gran equipo de Jalisco”.
La respuesta en la serie contra Algodoneros, con una entrada récord el domingo, muestra que el mensaje caló, aunque la lluvia frustró el clímax. Charros tiene la oportunidad de hacer historia. De eliminar a Algodoneros y superar a Sultanes, podría enfrentar a Diablos en una final épica. Guadalajara, única ciudad con béisbol profesional todo el año, merece vibrar con su equipo.
El llamado de Gil no es solo a llenar gradas, sino a ser parte de un legado. Que la afición tapatía se una a esta fiesta, empuje a Charros hacia la gloria y demuestre que Jalisco es la capital del béisbol mexicano.
LOS PELOTEROS
Un llamado a la grandeza de Benjamín Gil: “Hoy el gran equipo de Guadalajara es Charros”

– Deporte Rey, por Gabriel Ibarra Bourjac
Benjamín Gil no es solo un manager de beisbol, es un líder que lleva la pasión por este deporte en la sangre y un amor profundo por Jalisco en el corazón.
Sus palabras, cargadas de sentimiento, no son un simple reclamo a la afición; son un grito de guerra que busca encender el alma de Guadalajara, una ciudad que tiene la oportunidad única de escribir su nombre en los anales del beisbol mexicano.
Los Charros de Jalisco, bajo la guía de Gil y el respaldo de la familia González Íñigo, están al borde de un logro histórico: ser campeones en verano y en invierno, un hito sin precedentes que puede cambiar el rumbo del deporte en México.
Pero este sueño no se construye solo en el diamante; se forja en las gradas, en el rugido de una afición que hace temblar el estadio y convierte cada juego en una experiencia inolvidable.
Tiene razón Gil cuando expresa que Guadalajara no es cualquier ciudad. Es la cuna del beisbol mexicano, la única en el país con dos equipos profesionales, uno en la Liga Mexicana del Pacífico y otro en la Liga Mexicana de Beisbol.
“Respeto a Chivas y Atlas, pero hoy el gran equipo de Guadalajara es Charros de Jalisco. Representamos a la gente tapatía, con su coraje, corazón y garra de trabajadores entregados. Guadalajara es única en México por tener dos equipos. Deberíamos ser la ciudad más beisbolera del país, pero en el estadio no lo demostramos”, expresó el timonel de Charros esta semana al solicitar el apoyo de la afición tapatía”.
Esta distinción debería traducirse en una afición inquebrantable, en estadios llenos de pasión, en un apoyo que se sienta desde el primer lanzamiento hasta la última jugada. Sin embargo, como Gil lo expresó con el corazón en la mano, la respuesta de la afición no ha estado a la altura.
En los juegos de play-off, el Estadio Panamericano, que debería ser una fortaleza inexpugnable, ha visto gradas con apenas 6 mil personas, mientras otras plazas del país reúnen a 15 mil o más por partido. Esta apatía duele, no solo al equipo, sino a todos los que creen en el potencial de Guadalajara para ser la capital indiscutible del beisbol.
A quienes critican desde la comodidad de los chats, a los que prefieren mirar hacia otras ligas o se pierden en la mezquindad de ignorar los logros de los Charros, les decimos: el beisbol es más que un juego, es unión, orgullo y comunidad.
Durante décadas, Guadalajara careció de un equipo profesional porque la afición no respondió. Hoy, gracias al esfuerzo de empresarios serios como la familia González Íñigo, los Charros son una realidad vibrante, un equipo que representa la garra, el coraje y el espíritu trabajador de esta gran ciudad.
No dejen que esta oportunidad histórica se desvanezca en el silencio. Este es el momento de despertar, Guadalajara. No se trata solo de llenar el estadio, sino de ser parte de un legado. Traigan a sus familias, vengan con sus amigos, griten por cada batazo, celebren cada out.
Hagan que los Charros sientan que no están solos en esta batalla épica. Que el Estadio Panamericano se convierta en un volcán de pasión, donde los rivales teman jugar y los jugadores se sientan invencibles. No esperen a la final para unirse a la fiesta; sean parte de ella desde ahora, desde esta serie, desde este preciso instante.
Guadalajara, esta es tu hora de brillar. Demuestra que eres la afición más grande, la más leal, la que nunca se rinde. Los Charros son el reflejo de tu carácter, de tu lucha, de tu grandeza. No dejes que te lo cuenten.
¡Vive la historia, sé parte de la leyenda! Que el próximo juego marque el inicio de una fiesta que resuene en todo México. ¡Arriba los Charros, arriba Guadalajara!