MUNDO
Venta de Twitter: Elon Musk podría cerrar la compra esta semana, solo que Biden la pudiera frenar

Política Global, por Jorge López Portillo Bassave //
De acuerdo con fuentes relacionadas, el multimillonario Elon Musk estaría por concluir las negociaciones para la adquisición de la red social Twitter en cuestión de horas o cuando mucho en días. Recordemos que hace casi seis meses el también dueño de Tesla informó que ofrecería 44 mil millones de dólares por la empresa del “pajarito azul”.
Después de unos días la compra parecía que se caería porque el millonario habría encontrado que el valor de la empresa estaba inflado por la cantidad de cuentas fantasma pero después de varios pleitos públicos y otros en las cortes parece que se ha llegado a un acuerdo y Musk respetará su oferta inicial, según él mismo ha informado en su cuenta de Twitter.
Musk había dicho que su objetivo al comprar era regresar la libertad de expresión en la llamada plaza pública cibernética, lo que enloqueció a los medios y partidarios de izquierda quienes han utilizado a dicha plataforma principalmente en Estados unidos y en Europa como herramienta de censura en contra de quienes tienen ideas u opiniones distintas a las suyas, independientemente de que estas sean correctas o erróneas.
Pero en semanas recientes Elon dijo que la compra de Twitter era la pieza central en una nueva estrategia de servicios digitales para que esa plataforma se convierta en la “App de todas las Apps”. No ha dicho bien a qué se refiere, pero parece ser que quiere que a través de Twitter uno pueda acceder a todas las plataformas de la Red.
OPORTUNIDAD DE INVERSIÓN
Twitter no ha sido una empresa rentable durante años, su departamento de comercialización no ha sido muy bueno y principalmente sus gastos han sido astronómicos por lo que no ha generado utilidades a sus accionistas.
Musk pagaría los $44 mil millones con dinero propio, con socios y con un crédito de cuando menos $13 mil millones de dólares provenientes de Bank of América, Morgan Stanley y Barclays quienes a inicios del año le garantizaron a él una línea de crédito con un interés muy bajo que ahora sería imposible de obtener por las alzas de las distintas tasas de interés y la inflación galopante en EUA. Con lo anterior y ante la actual circunstancia económica del mundo se ahorró algo así como $700 millones de dólares en intereses.
Según los bancos, ellos mantendrán su presencia accionaria por un par de años, esperando a que el valor de las acciones que garantizan su deuda suba y esto les permite ganar suficiente dinero como para poder recuperar lo invertido que no ganarán en intereses. Lo anterior nos da la idea de que las acciones de Twitter subirán por arriba de la inflación y por arriba de lo que los bancos le cobran a uno en intereses. Ojo esta es una oportunidad para invertir si es que a usted le atrae el mercado accionario.
La propia y actual administración de Twitter había anunciado que para el 2023 recortaría a un 20% de sus empleados, lo anterior con el objetivo de reducir en unos $800 millones de dólares la nómina anual, pero según algunos medios internacionales, Elon Musk informó a sus posibles inversionistas que él planea adelgazar la nómina en un 75%, es decir que de los 7,500 empleados solamente se quedaría con unos 1,800 empleados. Musk tendrá un verdadero desafío en este rubro pero seguramente los primeros que se irían son los de promoción comercial ya que en Tesla y en sus otras empresas ese departamento no existe, siendo él quien está a cargo de promover la imagen de las empresas a su cargo.
MUSK AMENAZA A LA SEGURIDAD NACIONAL DE EUA
Pero no todo es miel sobre hojuelas para Musk en la compra de Twitter, a través de su empresa Starlink, Elon ha regalado el servicio de internet satelital a todo Ucrania por todo el tiempo de la guerra, esto ha generado un costo aproximado de $100 millones de dólares, pero en fechas recientes ha informado que ya no puede seguir regalándolo por lo que pidió al gobierno de EUA que ayude a pagar esos costos en el futuro.
Recordemos que EUA ha destinado para apoyar a Ucrania más de $60 mil millones de dólares en lo que va del conflicto, por lo que Musk piensa que es justo que alguien le pague en adelante el uso de sus equipos. Lo anterior de inmediato despertó molestia en los altos círculos del poderoso equipo de asesores del Presidente Biden en materia de seguridad nacional de los EUA quienes ya desde hace meses han traído en la mira a Musk por sus declaraciones a favor del partido contrario al Presidente, incluso manifestándose a favor del actual gobernador de Florida el republicano De Santis como su gallo para el 2024.
Musk ha dicho que él votó por Obama pero desde el 2020 ha tenido diferencias serias con las políticas de izquierda o de control impulsadas por el Partido Demócrata quien gobierna en California y desde el 2021 en la Casa Blanca. Del 2020 a la fecha en múltiples ocasiones Elon ha dicho que las políticas de dicho partido afectan la economía y la libertad de los estadounidenses lo que seguramente no ha sido muy del agrado de los políticos de dicho partido quienes contaban con el apoyo de casi todos los directivos de las empresas de redes sociales.
Musk ha criticado de forma severa el endeudamiento de EUA que ya alcanza el 129% de su PIB y ha pedido que se aumente la producción de gas natural y de petróleo para bajar la inflación, esto a pesar de que sus vehículos usan electricidad y son competencia de los vehículos que consumen gasolina.
En fechas recientes se ha filtrado información sobre posibles investigaciones del Departamento de Justicia en contra de Musk por sus mensajes en Twitter y se dice que asesores en seguridad nacional del Presidente Biden estarían evaluando si bloquear la compra de Twitter e incluso presionar a Elon en sus empresas como Space X y Starlink bajo el argumento de que sus inversionistas extranjeros o de que sus posturas personales ponen en riesgo la seguridad nacional, pero todas las empresas que cotizan en bolsa tienen abierta su cartera para que inversionistas de todo el mundo puedan invertir en ellas. De verdad esto es algo que no imaginábamos podría pasar en el país que se ostenta como la tierra de la libertad y de la democracia.
Elon Musk “Es un cañón suelto que no podemos predecir”, dijo un alto oficial del gobierno de EUA que prefirió mantener el anonimato. ¿O querrán decir controlar? Pero cuando otros multimillonarios invierten cientos de millones en campañas a favor del Partido Demócrata nadie dice nada, como lo fueron los más de $200 millones de dólares que invirtió el dueño de Facebook en la elección a favor de Biden en el 2020.
Como con Irán, Rusia y Arabia Saudita, la administración de Biden tiene con Musk una relación bipolar. Por un lado lo atacan diciendo que su control sobre Twitter y Starlink estará bajo investigación por ser un potencial riesgo para la seguridad nacional y por otro le piden ayuda para continuar dando servicio de internet gratuito a Ucrania y ahora le piden apoyo para darlo en Irán. La tecnología de comunicaciones y la red satelital que Musk desarrolló se han convertido en el centro de las operaciones civiles y militares en Ucrania y ahora el Pentágono y el NIS (Agencia de Inteligencia y Seguridad Nacional de EUA) se dan cuenta de su valor estratégico militar y político.
¿Será que la Casa Blanca le pida a Musk no meterse en política?, o ¿de hacerlo ser pro demócrata como lo era antes?, o ¿será que únicamente le pidan apoyar a Irán y no dejar de regalar dinero a Ucrania?
Los dados están ya echados, para el día 28 de octubre se debe saber si Musk y Twitter ya cerraron su acuerdo pero en adelante, la Casa Blanca puede ejercer su poder para dar su beneplácito al trato o cancelarlo todo bajo el argumento de la seguridad nacional de los EUA que podría más bien ser garantías políticas a favor del partido en el poder lo que tarde o temprano se podría saber así como lo fue el ahora hecho conocido de que durante la elección del 2020 el propio Departamento de Justicia acudió al dueño de Facebook (Mark Zuckerberg), a insinuar que la historia del hijo de Biden y de su computadora eran desinformación rusa bloqueando su difusión en redes sociales a un mes de las elecciones federales.
Deportes
Históricas jaliscienses; Mía y Lía Cueva obtienen bronce en el Mundial de Clavados

-Por Diego Morales Heredia
Con sincronía perfecta y nervios de acero, las hermanas gemelas Mía y Lía Cueva Lobato escribieron una página histórica para el deporte mexicano al conseguir su primer podio en un Campeonato Mundial de mayores, colgándose la medalla de bronce en la final de trampolín de 3 metros sincronizado, durante el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos Singapur 2025.
El oro fue para la pareja china, que ratificó su dominio histórico en la disciplina, mientras que el segundo lugar fue para las representantes de Gran Bretaña. No obstante, la actuación de las mexicanas fue la más comentada por medios internacionales debido a su juventud y la naturalidad con la que enfrentaron la presión de un evento de esta magnitud.
Es la segunda medalla internacional para Lía y Mía Cueva, que el pasado mes de abril ganaron una plata en la primera parada de la Copa del Mundo de Clavados 2025 celebrada en Guadalajara. Y es la quinta medalla para México en el Mundial de Clavados 2025, después de las cuatro preseas de plata que la delegación tricolor sumó en los tres primeros días de competencia en Singapur.
Originarias de Guadalajara, Jalisco, las hermanas Cueva tienen apenas 14 años y ya han sido identificadas como una de las duplas con mayor proyección en el mundo de los clavados. Su sincronía no solo proviene del entrenamiento técnico, sino de una conexión innata que pocas veces se ve en este deporte.
El resultado en Singapur 2025 también es una señal alentadora de cara a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028, donde se espera que México tenga una de sus delegaciones más competitivas en clavados.
MUNDO
¿Qué pasa allá?

-Opinión, por Luis Manuel Robles Naya
No es fácil entender qué es lo que está pasando en la economía estadounidense. La impredecibilidad de la conducta del presidente Trump manda señales que causan incertidumbre en el escenario económico mundial.
Desconcierta que, a pesar de que los números recientes muestran una caída en el consumo y alzas moderadas en la inflación, las operaciones bursátiles reflejan una actividad inusualmente positiva ante estas circunstancias.
Hasta ahora, las postergaciones de los plazos para la fijación de aranceles y las negociaciones en curso han mantenido a la actividad bursátil en una relativa normalidad, pues hay inversionistas convencidos de que Donald Trump no cumplirá sus amenazas arancelarias. En el sector ha trascendido el concepto “TACO” (Trump Always Chicken Out) y al parecer confían en que eso sucederá.
También influye para esta relativa calma bursátil que la inflación, aunque ha subido, no ha tenido un impacto significativo; sin embargo, el factor de incertidumbre ha llevado a la acumulación de inventarios que habrán de salir cuando haya mayor claridad; mientras tanto, muchas empresas han revisado y reducido sus previsiones de ganancias.
Aún no se sabe cómo afectará la política arancelaria a la industria tecnológica que depende de cadenas de aprovisionamiento con productos fabricados en China y otros países afectados por los aranceles y, al conocerse, podría terminar esta indiferencia aparente del mercado de acciones.
Por otra parte, las disposiciones presupuestarias de Trump no atacan de fondo el déficit presupuestario y a decir de algunos congresistas y comentaristas, por el contrario, lo aumenta. La economía pierde impulso, no crece; el mercado laboral se enfría y el gasto del consumidor desciende.
Ante eso, la lógica y el sentido común aconsejarían echar para atrás la actitud radical proteccionista, pero Trump ha demostrado que la lógica no aplica en su caso empeñado también, como está, en incrementar el poder y autoridad del presidente por sobre jueces y órganos autónomos.
Lo que se advierte, desde mi punto de vista, es que los inversionistas están manteniendo artificialmente la calma en el sector bursátil porque este está fuertemente concentrado y los activos familiares invertidos en acciones están en niveles históricos, según lo señala el Financial Times.
La apuesta a que Donald Trump reculará es arriesgada, porque de no hacerlo los factores económicos hoy contenidos se manifestarán con toda su fiereza. Hasta ahorita el sector corporativo estadounidense ha mostrado resiliencia, pero estar condicionados a la veleidosa conducta del mandatario obliga también a extremar precauciones, particularmente en el área bursátil, porque una rectificación desde los niveles que hoy se observan de acumulación de activos familiares puede ser catastrófica.
El otro tema es el impacto que la estrategia económica tiene en la corrección de las finanzas públicas. Muchos piensan que la “Gran y Hermosa” ley propuesta, que contiene disposiciones fiscales, traerá altos costos sociales. Junto con los aranceles, pretende componer las desbalanceadas cuentas nacionales, reducir su déficit en el gasto público, aumentar sus ingresos, disminuir la deuda y reordenar el gasto gubernamental. Los objetivos son razonables, pero las formas y las decisiones no parecen serlo.
Los economistas han advertido el alto costo a pagar si se materializa el paquete completo de medidas proteccionistas, pues juzgan que con ello podrá salvar al gobierno, pero la economía tendrá que absorber el costo y eso puede doler. Se espera que los incrementos de precios resultantes de los aranceles afecten los márgenes de ganancias, reduzcan el consumo y afecten al crecimiento económico.
La falta de certidumbre repercute en el aspecto político porque las percepciones ciudadanas ya se mueven en las mediciones de opinión. Big Data Poll, la encuestadora más favorable al presidente, ya registra una aprobación negativa y otras agencias como Reuters/Ipsos registran la misma tendencia. La percepción sobre el rumbo del gobierno también es negativa y es presumible que esto afecte y mueva el panorama político para la próxima elección.
El apoyo en el segmento MAGA, el bastión de duros del régimen, también está disminuyendo, lo que supone pérdida de fortaleza incluso para las negociaciones con sus socios comerciales y aliados en la geopolítica internacional.
La fortaleza militar y el poderío económico que aún conserva el país vecino le permiten a su presidente presionar al mundo para demostrar fuerza, que muchos ya consideran menguante; sin embargo, la desconfianza resultante de sus aliados y socios con su política proteccionista lo aíslan cuando más consciente debiera estar de la necesidad de unificar al hemisferio occidental.
La economía ha traído de vuelta la Guerra Fría y el presidente estadounidense le está agregando algidez. Creo que le convendría revisar la historia, pues en el siglo XX el vecino país del norte nunca pudo ganar una guerra solo; siempre tuvo que hacerlo con aliados. Como en el pronóstico del tiempo, lo probable puede suceder o no, pero de que los tiempos son nublados, lo son, especialmente para México, sumamente dependiente de la economía de Estados Unidos.
MUNDO
La fuerza de la herencia mexicana en Los Ángeles

-Opinión, por Violeta Moreno
Como mexicana, me duele profundamente la persecución que enfrentan en Estados Unidos las personas por su “apariencia mexicana”.
Esta actitud, que evoca el racismo de épocas oscuras como la Segunda Guerra Mundial, se ha intensificado con discursos que generalizan a los mexicanos como “enemigos públicos” o responsables de las dificultades de aquel país.
Este terrorismo racial no solo es injusto, sino que siembra miedo, polarización y tensiones sociales en comunidades donde la diversidad debería ser un pilar de fortaleza. Los Ángeles, una ciudad con raíces hispánicas profundas, fundada por españoles y con una vibrante comunidad latina, es un claro ejemplo de cómo estas políticas hieren el corazón de una ciudad que lleva la cultura mexicana en su esencia.
La reacción del gobierno estadounidense, especialmente bajo la administración del presidente Trump, ha sido desproporcionada. Arrestar a personas por su apariencia en lugares cotidianos como Home Depot, o deportar a ciudadanos estadounidenses de origen latino, constituye un atropello a los derechos humanos.
Estas acciones no solo afectan a indocumentados, sino también a inmigrantes legales y a personas nacidas en Estados Unidos, separándolas de sus familias y comunidades. Casos documentados de deportaciones injustas, donde ciudadanos estadounidenses o residentes legales han sido expulsados, han generado terror e incertidumbre.
Este enfoque no solo es cruel, sino que alimenta una narrativa peligrosa que estigmatiza a toda una comunidad, ignorando su contribución histórica y cultural.
Los Ángeles no es una ciudad “invadida” por extranjeros, como algunos sectores quieren hacer creer. Su identidad hispánica es intrínseca, tejida desde su fundación por colonos españoles y enriquecida por generaciones de mexicanos, muchos de ellos nacidos en EE.UU.
Esta presencia no es una ocupación, sino una expresión natural de su herencia cultural. La comunidad latina, con su carácter binacional, aporta una riqueza única que fortalece el tejido social y económico de la ciudad.
Lo que algunos en EE.UU. perciben como “desorden”, otros lo reconocen como una lucha pacífica por los derechos humanos en un país construido por inmigrantes de todos los rincones del mundo. La felicidad y resiliencia del pueblo mexicano, capaz de encontrar lo bueno en medio de lo malo, parece generar envidia en quienes no comprenden que la alegría es una elección interna, no un privilegio externo.
El discurso de Trump, buscando complacer a sus seguidores más radicales, ha profundizado la polarización. Al priorizar la “firmeza” y el “control”, ha legitimado actitudes xenófobas que dividen a la sociedad estadounidense.
Sin embargo, también hay voces en el país vecino del norte que valoran la diversidad y ven en las protestas pacíficas de Los Ángeles un esfuerzo legítimo por defender los derechos de todos, independientemente de su origen.
Esta dicotomía refleja la complejidad de un país que, aunque fundado por inmigrantes, a veces lucha por aceptar su propia diversidad. Desde México, vemos con tristeza cómo se criminaliza a nuestra gente. Ser mexicano es más que una nacionalidad; es una actitud de resistencia, esperanza y comunidad. Acoger a los deportados no es solo un acto de solidaridad, sino un reconocimiento de que este es su hogar, un país que nunca les cerrará las puertas.
Muchos de los mexicanos en territorio estadounidense, legales o no, contribuyen significativamente al crecimiento de ese país. Son trabajadores, estudiantes, empresarios y ciudadanos que fortalecen a ambas naciones. Incluso aquellos que, por necesidad o desconocimiento, cruzaron la frontera sin documentos, no son delincuentes; son personas que buscan una vida mejor, como lo han hecho inmigrantes de todas las épocas.
Espero de corazón que cese el miedo y las consecuencias económicas y sociales de estas políticas. Los Ángeles merece recuperar la paz, una ciudad que no solo es un crisol de culturas, sino un símbolo de la conexión histórica entre México y Estados Unidos.
La verdadera paz llegará cuando el pueblo y el gobierno estadounidenses acepten que la historia española e indígena es parte fundamental de su identidad. Reconocer esta herencia compartida no debilita a EE.UU., sino que lo enriquece.
Los mexicanos, ya sean indocumentados, legales o ciudadanos binacionales, son parte del alma de Los Ángeles. Su presencia no es una amenaza, sino un recordatorio de la historia compartida que une a ambos países. Desde mi perspectiva, la solución no está en muros o deportaciones, sino en el diálogo, el respeto y la colaboración.
México y EE.UU. son vecinos inseparables, aliados en innumerables sentidos, y nuestra cercanía trasciende fronteras. Que Los Ángeles vuelva a ser un faro de esperanza, donde la diversidad sea celebrada y donde mexicanos y estadounidenses podamos seguir construyendo un futuro juntos, como pueblos hermanos que, a pesar de las dificultades, se quieren y se respetan.