OPINIÓN
El presupuesto del INE: La burocracia dorada, entre el deber y el dinero

Opinión por Pedro Vargas Ávalos //
El Instituto Nacional Electoral (INE) es una organización sumamente importante, lo cual nadie pone en tela de duda. Pero sus integrantes no suelen estar a la altura de miras de la institución, y por ello generan constantes discusiones.
El origen de esos problemas, los encontramos en el procedimiento de nombramiento de los consejeros de esa entidad: el sistema de cuotas coronado por el de agandalle, hizo trizas la imparcialidad que debe imperar en toda actuación del órgano plebiscitario.
Cuando se nombró a la mayoría de los altos funcionarios del INE, los partidos políticos que controlaban el Congreso federal, se despacharon con la cuchara grande y designaron como consejeros a quien se les antojó, repartiéndose alegremente las plazas (PRI, PAN y PRD) menospreciando a las demás formaciones partidistas.
Acostumbradas las entonces dominantes cúpulas políticas, como estaban de arreglar todo “en lo oscurito”, nunca se imaginaron que la ciudadanía iría a imponer su voluntad y a base de sufragios, escoger una vía distinta -a la que ellas significaban- para la nación. Esta senda, fue la que abandera Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), apoyado por varios partidos de menores dimensiones. En los comicios de 2018, los mexicanos despertaron y dieron un golpe de autoridad, de tal magnitud, que imposibilitó se pudiese alterar su resultado. Sin embargo, los encargados de regular la contienda comicial, continuaron en sus funciones, presumiendo que gracias a ellos fue la jornada histórica de julio de aquel recordado año.
Ya en ejercicio el nuevo gobierno, instauró un sistema de rígida austeridad y de combate sin cuartel a la corrupción. Esto implicó profundos cambios en la conducta de los servidores públicos, especialmente los de más elevado rango, quienes, dependientes del gobierno general se ajustaron a ese lineamiento sobrio; en cambio, los directivos de varios organismos autónomos se inconformaron: vivir en la justa medianía, como recomendaba Juárez a sus colaboradores, no era aceptable para la cúpula dorada de la burocracia enquistada en esas unidades independientes. Por ello recurrieron al amparo, a la controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Las normas legales que incomodan a los amparistas son esencialmente el artículo 127 constitucional reformado (que ordena ningún servidor público gane más que el primer mandatario) y la nueva Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos (LFRSP); empero tampoco les gusta el ordenamiento de Austeridad Republicana (LFAR) en vigor desde noviembre 20 de 2019, aniversario de la Revolución maderista de 1910.
Aperturados los procedimientos solicitados por los burócratas contrariados, el máximo tribunal mexicano les otorgó una suspensión provisional, para que los funcionarios de esos organismos (INE, CNDH, INAI, CREE, COFECE, IFT, etc.) siguieran cobrando más que el presidente, AMLO, quien había puesto el ejemplo desde el arranque de su período, disminuyéndose su sueldo. La resolución final está pendiente y se espera con ansiedad.
Cada uno de esos organismos disconformes, se puede decir que son millonarios, a contrapelo de la inmensa mayoría de ciudadanos, cuyos ingresos son parcos o a lo sumo intermedios. De allí la frase recurrente de “INE rico, pueblo pobre”, tomando como símbolo de los institutos autónomos al electoral.
Así las cosas, esta institución tan contestataria de la Cuatro T, solicitó a la Cámara de diputados federal, además de su planilla de egresos que dijo era de 13,084.17 millones de pesos, un presupuesto precautorio de 5,743.57 millones, para cubrir un proceso de revocación de mandato (ya aprobado por el Congreso) y una posible consulta popular. A esa enorme cifra se le debe agregar lo que se otorga a los partidos políticos, arrojando un gran total de 24, 649 millones de pesos. Esto prueba que la democracia mexicana es la más cara del mundo.
Deliberado ese proyecto en la Cámara baja, que tiene como facultad constitucional exclusiva, aprobar el presupuesto de egresos de la federación (PEF), se consideró excesivo y se rebajaron del gran total propuesto por el INE, una suma mayor a los 4,900 millones, aprobándose la gran cantidad de 19,736 millones 593 mil 972 pesos, es decir, un monto mayor al ejercido en este año 2021 (19,593 millones), cuando hubo la elección más grande de nuestra historia, además de una consulta popular para enjuiciar a los expresidentes.
A pesar de lo antedicho, las oposiciones al régimen se pusieron furiosas por el recorte, (y otros reveses presupuestarios) llegando los panistas -que son los más furibundos- a emitir la sentencia revanchista de que por ello la reforma eléctrica actualmente en proceso, ya estaba muerta.
La avalancha de críticas por esa rebaja al INE, las encabezan comentócratas exorgánicos, consejeros electorales (como Jaime Rivera y desde luego, el inefable Ciro Murayama, junto a su centavero caudillo Lorenzo Córdova ) y los ya clásicos impugnadores del lopezobradorismo, encabezados por el fatídico Claudio X. González, el empresario que asegura no serlo, pero que recibió jugosisimos ingresos de las archimillonarias donaciones que los macroempresarios le otorgan (claro, todas deducibles de impuestos…¡faltaba más!).
Para el auto nombrado “izquierdista” Lencho Córdova, presidente del INE, su corporación se defenderá jurídicamente, porque el mentado recorte pone en entredicho no solo la revocación de mandato, sino que hace imposible “seguir ampliando los derechos políticos de las ciudadanas y los ciudadanos”.(El Financiero, 14-nov.2021).
El deber y el dinero deberían corresponderse proporcionalmente, y los servidores públicos tienen la obligación de poner el ejemplo, desempeñando sus cargos con honradez, sobriedad y espíritu republicano. La frase de que “no debe haber gobierno opulento en un pueblo pobre”, es muy cierta, así como que los funcionarios deben cumplir sus compromisos sin estar sujetos a recibir enormes emolumentos. Y mucho menos si la ley suprema de la nación lo prohíbe.
En un reciente evento al que asistió el Lic. Arturo Zaldívar, presidente de la SCJN, afirmó que la Corte ha trabajado y logrado notables avances en su programa de mejorar la impartición de la justicia, modernizar al poder judicial de la federación y abatir la corrupción, remarcando que, eso se ha logrado no obstante que han recibido anualmente menos de seis mil millones de pesos, en relación a su antecesor.
Esa información es aleccionadora para la administración pública, y en cuanto a los responsables de ella, les dijo el ministro Zaldívar: “la falta de presupuesto, no puede ser excusa para no cumplir con sus obligaciones” (Animal Político. Com, 17-nov.021).
Y como se expresó el jefe del gobierno federal, hablando de los directivos del INE, que vale para los demás organismos autónomos: “Que lleven a cabo un plan de austeridad, que se bajen los sueldos (los dirigentes ganan el doble de lo que recibe el presidente)…que le bajen a los viáticos, a las comidas” (del erario cada Consejero -excepto tres- gasta anualmente alrededor de 135 mil pesos) y remata el primer mandatario: “el presupuesto, de 19 mil millones, ¿Cómo no les va a alcanzar?”.
Y eso mismo dicen cuando menos, el 70% de los mexicanos, de los que a diario trabajan duro para sustentar a sus familias, y, aunque no lo aprueben, para mantener la burocracia dorada que amenaza no cumplir con su deber, si no se le da el dinero que exige. Son como decía el célebre Voltaire: Los que creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por dinero.
MUNDO
Nominar a Trump, la devaluación del Premio Nobel de la Paz

Los Juegos del Poder, por Gabriel Ibarra Bourjac //
¿Hay similitudes entre Donald Trump, la Madre Teresa y Nelson Mandela?
La pregunta, lanzada con sarcasmo por un colega, apuntaba a la reciente nominación de Trump al Premio Nobel de la Paz. La respuesta: Trump podría unirse a este selecto grupo.
La idea me dejó atónito. ¿Ha caído tan bajo la credibilidad de este galardón como para premiar a un líder cuya retórica se nutre de confrontación, cuya política persigue a migrantes y carece de un ápice de humanismo?
Hoy martes este debate resuena mientras el mundo observa el conflicto Israel-Irán, donde la autoproclamación de Trump como nominado expone las tensiones geopolíticas y mediáticas.
La nominación, promovida por congresistas republicanos como Buddy Carter y respaldada por Pakistán, parece más un ejercicio de autopromoción que un reconocimiento genuino.
En redes sociales, como X, las reacciones son polarizadas: partidarios de Trump celebran el “logro” con hashtags como #TrumpForPeace, mientras críticos lo tildan de “cínico” y “absurdo”, citando su historial belicista.
Trump prometió evitar “guerras eternas” tras su victoria en 2024, pero autorizó ataques a instalaciones nucleares iraníes el pasado sábado, usando B-2 y misiles Tomahawk. Este acto contradice su discurso, y el supuesto “acuerdo de alto el fuego” con Irán, presentado como mérito, ya muestra fisuras, según posts en X que reportan nuevos enfrentamientos.
La nominación parece un intento de blanquear su imagen tras decisiones controvertidas.
El Nobel de la Paz, históricamente un bastión de humanitarismo, ha perdido brillo. La entrega a Barack Obama en 2009, sin resultados concretos en paz, marcó un precedente de devaluación. Nominar a Trump, conocido por su retórica agresiva y políticas antiinmigrantes, refuerza la idea de que el premio se ha convertido en una herramienta de legitimación política. En X, usuarios ironizan: “¿El Nobel para Trump? ¡Solo falta nominar a Kim Jong-un por sus sonrisas!”.
Esta percepción se agrava por el contexto: el ataque a Irán, justificado por la supuesta inminencia de una bomba nuclear, evoca el engaño de Irak en 2003 bajo Bush, cuestionando la transparencia de EEUU.
Los méritos alegados incluyen el “acuerdo de alto el fuego” y su giro diplomático con Corea del Norte en 2018-2019, aunque este último colapsó. Sin embargo, su intervención en Irán, alineada con Israel, sugiere una agenda de poder más que de paz. En redes, analistas como
@GeoPoliticaMX destaca que la nominación coincide con la presión de Trump para reafirmar la hegemonía estadounidense ante China y Rusia, aliados cautelosos de Irán.
La posibilidad de que Donald Trump reciba el Premio Nobel de la Paz, pese a su retórica de combate y confrontación, plantea un dilema ético y simbólico que erosiona la esencia del galardón. Este escenario no solo reflejaría una devaluación histórica del premio, sino que legitimaría una narrativa donde el poder y la autopromoción prevalecen sobre los principios humanitarios que han definido a figuras como Mandela o la Madre Teresa.
Si el Nobel cae en manos de un líder cuya trayectoria contradice la paz, el desafío será redescubrir su propósito original, promoviendo un diálogo global que priorice la humanidad sobre la hegemonía. Solo así se podrá contrarrestar la ironía de un mundo al revés, donde la confrontación se corona como virtud.
MUNDO
Sensacionalismo mediático: Alimentando el miedo a una Tercera Guerra Mundial

Los Juegos del Poder, por Gabriel Ibarra Bourjac //
El sábado pasado, el mundo despertó con la noticia de que Estados Unidos bombardeó instalaciones nucleares cerca de Teherán, utilizando bombarderos furtivos B-2, bombas antibúnker GBU-57 y misiles Tomahawk lanzados desde submarinos y destructores.
Este ataque a tres puntos estratégicos intensificó la tensión global en un contexto ya marcado por la incertidumbre del gobierno de Donald Trump. Sus políticas, desde aranceles arbitrarios hasta conflictos comerciales con aliados como México y Canadá, han generado inestabilidad, amplificada por medios sensacionalistas que, a través de redes sociales, alimentan el miedo a una tercera guerra mundial entre audiencias influenciables.
El conflicto comenzó con ataques israelíes contra Irán, basados en la supuesta inminencia de una bomba nuclear iraní. Irán respondió impactando misiles en el complejo militar Kirya en Tel Aviv, exponiendo la vulnerabilidad del sistema defensivo israelí, incluida su Cúpula de Hierro.
Trump, alineándose con Israel, decidió intervenir sin pruebas claras que justifiquen la acción, evocando el precedente de George W. Bush, quien en 2003 invadió Irak con falsas acusaciones sobre armas de destrucción masiva. Esta repetición de tácticas imperiales para preservar la hegemonía estadounidense genera escepticismo global. ¿Quién confía en Trump, cuya facilidad para distorsionar la verdad es bien conocida?
Tras ganar las elecciones en noviembre de 2024, Trump prometió evitar “guerras eternas”, pero su retórica belicosa, incluyendo amenazas contra el líder supremo iraní Ali Khamenei, contradice esa postura. Su decisión arriesga un conflicto de consecuencias impredecibles, especialmente si Irán contraataca bases estadounidenses en la región.
Los medios sensacionalistas, amplificados por plataformas digitales, convierten esta crisis en un espectáculo de paranoia, presentando el conflicto como el preludio de una guerra global. Sin embargo, un análisis racional sugiere que las condiciones para una escalada de esa magnitud son limitadas, particularmente por la postura de China y Rusia, aliados históricos de Irán.
CHINA: CAUTELA ESTRATÉGICA
China ha optado por posicionarse como mediador, proyectando una imagen de actor responsable en la escena global. Los aviones chinos detectados rumbo a Irán probablemente buscaban evacuar personal, no brindar apoyo militar. Una guerra prolongada elevaría los precios del petróleo, afectando la economía china, que depende de la estabilidad energética.
Pekín podría recurrir a presión diplomática o sanciones económicas contra Estados Unidos, pero una intervención militar es improbable, dado el riesgo de desestabilizar sus relaciones con Occidente. Los medios sensacionalistas, sin embargo, exageran el rol de China, generando temor infundado entre quienes consumen titulares alarmistas sin cuestionarlos.
RUSIA: OPORTUNISMO LIMITADO
Rusia, enfrascada en su conflicto con Ucrania, ve en la crisis una oportunidad para distraer a EEUU y debilitar su apoyo a Kiev. Sin embargo, su respaldo a Irán ha sido mínimo, sin evidencia de asistencia militar directa. Moscú podría negociar beneficios, como alivio en sanciones por Ucrania, a cambio de mantenerse al margen. Aunque podría ofrecer inteligencia o logística a Irán si el conflicto escala, una intervención activa es poco probable.
Los titulares que predicen una coalición Rusia-Irán son exageraciones mediáticas que alimentan la paranoia de una guerra global, ignorando los cálculos estratégicos de Moscú.
FACTORES QUE LIMITAN LA ESCALADA
Irán ha advertido que la intervención de EE. UU. podría desencadenar una “guerra total”, pero su capacidad militar está mermada tras los ataques israelíes a sus defensas aéreas y sitios nucleares. China y Rusia priorizan su estabilidad interna y económica, evitando un enfrentamiento directo con EE. UU. e Israel. Ambos países podrían buscar influencia mediante soluciones diplomáticas, no militares. Los medios sensacionalistas, sin embargo, capitalizan el miedo, magnificando la amenaza y omitiendo el contexto geopolítico que desinfla la narrativa de una guerra mundial inminente.
IMPLICACIONES PARA MÉXICO
Para México, el conflicto tiene repercusiones económicas y políticas significativas. Un aumento en los precios del petróleo por la guerra beneficiaría temporalmente a Pemex, pero elevaría los costos de combustibles, impactando la inflación y el bienestar de los mexicanos. Además, la presión de EEUU para alinear a México en su agenda podría complicar la política de no intervención del país, un principio histórico de su diplomacia.
La intervención de Estados Unidos en Irán es un movimiento arriesgado de Trump para reafirmar la hegemonía estadounidense, sin evidencia sólida que lo respalde. Los medios sensacionalistas, amplificados por redes sociales, convierten esta crisis en un espectáculo de miedo, exagerando las probabilidades de una tercera guerra mundial y generando paranoia entre audiencias poco críticas.
China y Rusia, con posturas cautelosas, difícilmente escalarán militarmente, optando por maniobras diplomáticas para proteger sus intereses. En México, el conflicto amenaza con impactos económicos y diplomáticos, lo que exige un periodismo responsable que desmantele el alarmismo y fomente un análisis racional.
La ciudadanía merece información veraz, no narrativas que lucren con el temor.
NACIONALES
Los juzgadores: Ley, justicia y pluralidad con democracia

Por Pedro Vargas Ávalos //
A partir del cercano uno de septiembre, el Poder Judicial mexicano se renovará, a pesar de las oposiciones, las oligarquías privilegiadas, la mayoría de sus comentócratas y medios tradicionales, es decir, tope en lo que tope. Tendremos pues, juzgadores emergidos del voto popular y no de cúpulas de predominio.
Los enjuiciadores que integren el innovado ramo jurisdiccional (en Jalisco seguiremos en espera, pues nuestros legisladores -y quizás el ejecutivo- no tienen prisa y al parecer ni simpatías para remozar nuestro aparato judicial) tendrán como norte aplicar la ley, siempre procurando imponer la justicia, lo cual les será fundamental porque simbolizan la pluralidad nacional y surgen de la voluntad popular, o sea , de la democracia, lo cual se ajusta a lo que ordena el artículo 39 de la Constitución: Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste.
Ministros, magistrados y jueces siempre deben sujetarse, en el ejercicio de sus funciones, a la ley o más ampliamente al Derecho, pues aquella es el mandamiento obligatorio escrito (por lo que si no se cumple es sancionable) expedido por la autoridad competente, en tanto que este -el Derecho- implica el conjunto de normas y principios que regulan la convivencia de las personas, con el fin de que imperen la justicia -saber separar lo justo de lo injusto y que se otorgue a cada quien lo que legal y razonablemente le corresponde- y el orden con armonía social.
El aparato judicial, por tradición, siempre se integró con matices clasistas; de hecho, no encontrábamos en el cuadro de juzgadores, representantes de los pueblos originarios, y solo en exiguo porcentaje miembros del ámbito social más pobre o carentes de apoyos poderosos. En consecuencia, la carrera judicial no cumplía sus objetivos, debido a que ordinariamente se alteraba por influencia de los factores hegemónicos. Todo lo anterior es contrario a la pluralidad de la sociedad mexicana y al mandato constitucional que se funda indiscutiblemente en la soberanía nacional que reside en el pueblo.
Consecuente con lo antedicho, son los juzgadores resultantes de la reforma judicial que ahora es parte de la suprema ley de la república. Y si tales funcionarios no se ciñen al sentido de ley, derecho y justicia, para bien de la población, ahora habrá el Tribunal de Disciplina Judicial. Sobre el tema, declaró Celia Maya García, virtual presidenta de ese organismo: “se busca crear un nuevo sistema de justicia con juzgadores preparados, pero también con sensibilidad social y que sea cercana a la gente.” Agregando que, nunca serán persecutoras, pero eso sí: “El Tribunal de Disciplina Judicial, la única misión que tiene es que la justicia se imparta conforme a lo que dice la Constitución.
Entonces todo eso que ocurría antes de que había desviaciones, y siempre que te desvías de la ley implica una corrupción, pues que si eso se da se pare a tiempo, no se deje correr, no exista. Que se den resoluciones rápidas cuando haya quejas en este sentido para que no se hable de impunidad”. (El Universal, 16/06/2025).
Por lo que ve a la pluralidad étnica de México, esta se reflejará en la Suprema Corte de Justicia luego de la histórica elección del uno de junio pasado, pues quien obtuvo la mayoría de los votos y que por ende será quien presida al más alto tribunal de la nación, es el jurisconsulto de raza mixteca Hugo Aguilar Ortiz; esto además de que fueron electos varios juzgadores de ascendencia indígena en varias entidades federativas.
El citado Aguilar Ortiz, se describe: “soy indígena mixteco del estado de Oaxaca, he dedicado mis conocimientos, ejercicio profesional y experiencia en la promoción y defensa de los derechos indígenas en los últimos 30 años, en los que, en conjunto con otros abogados, hemos sistematizado la realidad y aspiraciones de los pueblos, las hemos transformado en conceptos jurídicos que recientemente fueron incorporados en el artículo 2º de la Constitución Federal”. (Diario Red, 9/05/25).
El senador Antonino Morales Toledo, también de origen autóctono (zapoteco) declaró complacido: “Más de siglo y medio después, un hijo de los pueblos originarios, esta vez de raíz mixteca, asume la más alta responsabilidad del Poder Judicial. Su elección representa un paso firme hacia una justicia más incluyente, cercana al pueblo y con rostro indígena”. En cuanto a su actuación, indicó Aguilar Ortiz, en una entrevista, que él no había llegado con transacciones con alguna agrupación, sindicato, poder político, etcétera, enfatizando: “llego con los votos que la ciudadanía depositó el 1 de junio; no tengo más que compromiso con ellos, con la Constitución, con el marco jurídico, con garantizar certeza para todos, porque este para mí es el objetivo central.” (Público, 2025-06-18).
El experimentado letrado agregó, en el encuentro predicho, que estaba consciente del lugar al que llegaría, y del “reto que tenemos, las dificultades que ha tenido la Corte, por decirlo de manera suave, en los últimos años” así como de la condición que tienen grandes sectores de la ciudadanía en relación a la justicia.
Al respecto expuso: «Hay un sector de la población que cuenta con los recursos suficientes para contratar un abogado calificado y ellos seguirán llegando a la Corte y se les va a administrar justicia siempre que tengan la razón, pero también hay otro sector que no tiene esas condiciones; y para los cuales el sistema de justicia no ha existido, por lo que vamos a equilibrar ahora la condición de estos sectores sociales tradicionalmente excluidos para que accedan a la justicia». Seguidamente enfatizó que defendería la división de poderes, pero invariablemente atendiendo el bien de la República.
Finalmente precisó que será el enlace entre a los nueve ministros para “que tomemos decisiones trascendentes”; el objetivo es “darle un nuevo enfoque y visión a ese órgano y al sistema de justicia del país.” En cuanto al padrón que encontrará en la SCJ, dejó claro que “reconocerán la experiencia del personal que actualmente labora en la Corte y advirtió que a quien se detecte haciendo cosas indebidas, se dará vista al Tribunal de Disciplina Judicial… y tendrá que dejar el espacio, pero quien contribuya a encontrar una justicia real, verdadera, que realmente sirva a la nación, será bienvenido».
No dejaron de haber expresiones racistas sobre el virtual guía de la SCJ, (incluyendo temas anodinos como el uso de la toga) pero contra esas críticas, la presidenta Claudia Sheinbaum lo encomió:” Me da mucho gusto que el próximo Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sea un indígena mixteco de Oaxaca, muy buen abogado, muy buen abogado; tengo el privilegio de conocerlo” y adicionó su comentario al asegurar que domina no solamente “temas relacionados con los pueblos originarios, sino en general, tiene un amplio conocimiento; es un hombre modesto, sencillo,…con una enorme inteligencia y sensibilidad social, entonces nos da mucho gusto” que sea quien presida la Corte. (Mañanera del pueblo, 04/06/2025).
Y junto a la mandataria de la patria, nosotros y millones de connacionales, nos congratulamos de la renovación democrática del Poder Judicial, lo cual anuncia una etapa en la cual, la justicia por fin estará cerca del pueblo, y será básica para edificar un genuino estado de derecho.
-
Uncategorized6 años atrás
Precisa Arturo Zamora que no buscará dirigencia nacional del PRI
-
Beisbol5 años atrás
Taiwán marca camino al beisbol en tiempos del COVID-19: Reinicia partidos sin público
-
REPORTAJES6 años atrás
Pensiones VIP del Ipejal: Arnoldo Rubio Contreras, ejemplo del turbio, sucio e ilegal proceso de tabulación de pensiones
-
VIDEOS6 años atrás
Programas Integrales de Bienestar, desde Guadalajara, Jalisco
-
VIDEOS6 años atrás
Gira del presidente López Obrador por Jalisco: Apoyo a productores de leche en Encarnación de Díaz
-
OPINIÓN5 años atrás
¡Ciudado con los extremistas! De las necedades de FRENA y otros males peligrosos
-
VIDEOS6 años atrás
Video Columna «Metástasis»: Los escándalos del Ipejal
-
OPINIÓN4 años atrás
Amparo, la esperanza de las Escuelas de Tiempo Completo